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Intentan linchar a un ucraniano tras la explosión del autobús que dejó 13 muertos
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se recrudece el conflicto en el este del país

Intentan linchar a un ucraniano tras la explosión del autobús que dejó 13 muertos

Tras estos sucesos, Zajárchenko anunció una ofensiva contra las fuerzas de Kiev y descartó nuevas iniciativas de paz por parte de los rebeldes

Foto: Los rebeldes prorrusos pasean a 18 prisioneros ucranianos e intentan linchar a uno en Donetsk (EFE)
Los rebeldes prorrusos pasean a 18 prisioneros ucranianos e intentan linchar a uno en Donetsk (EFE)

El conflicto en el este de Ucrania se recrudece pese al acuerdo de retirar el armamento pesado al que se llegó el pasado miércoles. Las últimas imágenes que llegan desde este país son terriblemente duras, sobre todo las de las últimas 24 horas, después de que un proyectil de artillería explotara contra un autobús público y dejara 13 personas muertas.

Ambos bandos se acusaron enseguida de la autoría del ataque, mientras que el Consejo de Seguridad de la ONU, en una resolución adoptada a instancias de Rusia, pidió una investigación de la tragedia.

Horas después de la ofensiva, y en represalia hacia el bando ucraniano, fue el propio líder de los separatistas prorrusos, Alexandr Zajárchenko, quien ordenó pasear por las calles de la ciudad a los 18 soldados ucranianos hechos prisioneros en la batalla por el control del aeropuerto para su escarnio público, unas crudas escenas cubiertas profusamente por la televisión rusa.

Uno de ellos, supuestamente el oficial de más alto rango de los "ciborg" -como son conocidos los soldados ucranianos apostados en el aeropuerto-, fue trasladado hasta la misma parada, donde fue humillado y golpeado por la multitud. "Fascistas" y "asesinos" fueron los gritos proferidos por la muchedumbre, que obligó a los prisioneros de guerra a ponerse de rodillas.

Tras estos sucesos, Zajárchenko anunció una ofensiva contra las fuerzas de Kiev hasta los límites administrativos de la región y descartó nuevas iniciativas de paz por parte de los rebeldes. "No habrá más treguas", dijo Zajárchenko, quién señaló que las milicias ya combaten con los soldados ucranianos en varias localidades y que "continuarán la ofensiva hasta las fronteras de la región de Donetsk", según las agencias rusas.

El anuncio de la ofensiva se produce dos días después de que se acordara en Berlin ese repliegue del armamento pesado de la zona de seguridad de 30 kilómetros tras las consultas mantenidas por los ministros de Exteriores de Ucrania, Rusia, Alemania y Francia.

Por otro lado, el número dos del llamado Estado Mayor de la RPD, Eduard Basurin, dijo que 24 milicianos han muerto en las últimas 24 horas en combates con las tropas ucranianas cerca del aeropuerto de Donetsk y la ciudad de Górlovka.

Putin culpa a Kiev

El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró que la responsabilidad por el agravamiento de la situación bélica en el este de Ucrania y por la muerte de civiles recae en las autoridades de Kiev, que "dan órdenes criminales".

"Son las autoridades ucranianas quienes dieron la orden oficial de lanzar acciones militares a gran escala prácticamente a lo largo de todo el frente" de batalla, dijo Putin, según las agencias rusas.

"Utilizan artillería, lanzaderas de misiles y aviación de modo indiscriminado, en barrios muy populosos. Y todo esto va acompañado de lemas propagandísticos sobre su búsqueda de la paz. La responsabilidad recae en quienes dan las órdenes criminales", agregó, en una reunión del Consejo de Seguridad ruso.

Tras guardar un minuto de silencio por las víctimas durante la guerra en el este de Ucrania, "entre ellos las personas que murieron (ayer) en una parada de transporte público", el presidente ruso reiteró que el conflicto "no tiene otra solución que las negociaciones de paz e iniciativas de carácter político".

"A menudo escuchamos, también por parte del Kiev oficial, que se adhieren precisamente a esa vía para solucionar los problemas, pero en la práctica sucede todo lo contrario", lamentó Putin.

Trabas a la ayuda humanitaria

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) denunció que el gobierno de Ucrania está obstaculizando la entrada de ayuda humanitaria al este del país.

Las restricciones han ocurrido en las últimas semanas, pero desde esta semana han quedado reguladas en la nueva ley de Seguridad Nacional, que exige permisos especiales para salir y entrar a áreas del país no controladas por el Gobierno.

A esta legislación están sometidos tanto los nacionales como los extranjeros empleados de ONGs o de la ONU. "Esto complica aún más la situación de los desplazados internos, y complica enormemente la distribución de asistencia humanitaria", dijo en rueda de prensa Karin de Gruijl, portavoz del ACNUR.

Por su parte, el portavoz de la oficina del alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Rupert Colville, también mostró preocupación por la nueva legislación.

"Esta decisión de pedir documentación especial es especialmente preocupante teniendo en cuenta la decisión del gobierno del noviembre de 2014 de dejar de prestar los servicios básicos estatales a las áreas que no están bajo su control".

"Estas restricciones tendrán severos efectos en las personas más vulnerables, como los ancianos, las madres con hijos y las personas con discapacidades. Solicitamos a las autoridades ucranianas que modifiquen su posición", afirmó el portavoz.

El conflicto en el este de Ucrania se recrudece pese al acuerdo de retirar el armamento pesado al que se llegó el pasado miércoles. Las últimas imágenes que llegan desde este país son terriblemente duras, sobre todo las de las últimas 24 horas, después de que un proyectil de artillería explotara contra un autobús público y dejara 13 personas muertas.

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