“España dice que siguieron el protocolo del ébola, pero obviamente algo se hizo mal”

“En España no se han ofrecido detalles sobre cómo exactamente contrajo el virus la auxiliar de enfermería, y su condición actual se desconoce”. La frase forma parte de una información de la cadena estadounidense CNN sobre la primera persona infectada de ébola en Europa, una trabajadora del Hospital Carlos III de Madrid que atendió a los dos religiosos españoles fallecidos este verano en la capital. Manuel García Viejo y Miguel Pajares. Y resume a la perfección las dudas en el extranjero sobre si se siguieron correctamente los protocolos de seguridad.

La CNN, que titula su información ‘España redobla la respuesta contra el ébola’, destaca asimismo que la Unión Europea exige “respuestas” a las autoridades sanitarias españolas sobre cómo pudo infectarse la auxiliar de enfermería. “Las autoridades sanitarias españolas aseguran que se siguieron correctamente todos los protocolos y procedimientos en el tratamiento de los dos misioneros. Pero la UE ha pedido una explicación”. El portavoz de la Comisión Europea Frederic Vincent fue mucho más allá, al declarar a la CNN que “España nos ha dicho que se siguieron todos los protocolos, pero obviamente algo se hizo mal”.

El portavoz de la Comisión Europea Frederic Vincent fue mucho más allá, al declarar a la CNN que 'España nos ha dicho que se siguieron todos los protocolos, pero obviamente algo se hizo mal'

“Los hospitales donde los pacientes han sido trasladados -dijo Vincent en referencia a los diez pacientes evacuados desde África a Europa- están supuestamente equipados y listos para tratar con enfermos de ébola. Si los protocolos se siguen, es muy improbable que se dé un brote en la UE. Pero, de nuevo, el riesgo cero no existe, particularmente en un hospital, donde el personal trata con enfermos. Necesitamos saber lo antes posible qué ha pasado y si necesitamos revisar los procedimientos”.

La cadena estadounidense subraya además que sindicatos han culpado al Gobierno de Mariano Rajoy, argumentando que advirtieron hace tiempo que los equipos de protección personal utilizado por el personal médico no eran del más alto nivel. El personal del servicio de urgencias e intensivos del hospital La Paz, designado como centro de referencia para el tratamiento de posibles casos de ébola, denunció hace tres meses en los juzgados la falta de medios, protocolos y entrenamiento para atender a este tipo de pacientes.

En el diario The Washington Post la crítica es incluso más ácida. El influyente periódico de la capital estadounidense titula hablando de un "misterio desconcertante en España" y preguntándose "¿Cómo pudo contagiarse de ébola una enfermera?". En el cuerpo de la noticia, el periodista afirma que "el primer caso de transmisión de Ebola fuera de África Occidental ha suscitado dudas sobre (...) si los protocolos fueron suficientes para proteger a los trabajadores sanitarios".

Por su parte, The Wall Street Journal abre su información hablando de Excalibur. "El destino del perro de la enfermera genera clamor en España", titula el diario financiero. "Entre las vidas en riesgo por el contatio de ébola fuera de África Occidental se encuentra Excalibur", explica después el cronista, quien también hace referencia al hashtag #VamosAMorirTodos como ejemplo del alarmismo generado.

Las dudas sobre dichos equipos de protección también las recoge la BBC o la agencia Reuters. La cadena pública británica cita en su web a personal médico que asegura que los trajes no alcanzaban el nivel cuatro de seguridad, que son absolutamente impermeables y disponen de un respirador independiente. “En lugar de ello los trajes eran de nivel dos (…), las fotografías aportadas por el personal indican que los monos no permitían respirar y que los guantes estaban hechos de látex y atados (al traje) con cinta adhesiva”, afirma.

“No podría haberse infectado”

Reuters, por su parte, cita a un profesor de biología molecular de la Universidad Británica de Nottingham, Jonathan Ball, que afirma que la auxiliar de enfermería no debería haberse infectado con el virus mortal si se hubieran tomado las medidas apropiadas de contención y control. “Es crucial descubrir qué salió mal en este caso (el de España) para tomar las decisiones que aseguren que esto no volverá a ocurrir”, afirmó.

Mientras, el diario USA Today critica la falta de información concreta en torno al primer caso de trasmisión del virus localizado fuera de África Occidental. “(Las autoridades) no han dicho dónde pasó sus vacaciones (la enfermera), ni tampoco han especificado si las autoridades sanitarias están revisando a las personas con las que entró en contacto durante sus vacaciones”.

“Cuando se llega a un medio en el que no hay experiencia, con equipamientos nuevos y todo lo que implica... pues no estoy sorprendido' del contagio de la sanitaria

Las ediciones en papel de los diarios más prestigiosos del planeta incidían ayer en estas cuestiones. El estadounidense New York Times destacaba que el caso es “particularmente preocupante” porque “España es un país desarrollado del que se espera que tenga los protocolos de actuación correctos y aplique las medidas de seguridad de forma rigurosa para controlar una enfermedad infecciosa”.

Por su parte The Guardian comparaba el caso español con el de Estados Unidos, donde el primer paciente diagnosticado con el virus en el país sigue en estado crítico en un hospital de Dallas. El rotativo británico centraba su información en supuestos errores a la hora de seguir los protocolos de seguridad y defectos en los equipos, como trajes de protección que no cumplían la normativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) -que especifica que éstos deben ser impermeables e incluir aparatos de respiración-. Además, cita a personal del hospital Carlos III que asegura que los objetos procedentes de las habitaciones de los misioneros fallecidos fueron sacados del centro en el mismo ascensor que utiliza todo el personal.

El diario The Daily Telegraph, por su parte, titulaba con dureza: “La enfermera española, primer caso de contagio de ébola en Europa,tuvo el virus durante una semana antes de ser diagnosticada”. “La trabajadora sanitaria se fue de vacaciones tras haberse infectado con el virus mortal que portaba un misionero que regresó a Madrid procedente de Sierra leona”, resumía el rotativo.

¿Fue un error la repatriación?

El caso de la sanitaria española demuestra, según expertos, que es mejor exagerar en las medidas para prevenir el contagio que ser acusado de lo contrario. Es la idea que esgrime el profesor Peter Piot, quien presidió ayer una reunión de científicos convocada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Debe ser una lección para todos. Que se puede exagerar en la reacción y protección, pero es mejor ser acusado de esto que de no haber tomado todas las medidas necesarias”, dijo el director de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.

Piot coincidió con otros especialistas en que el caso de la auxiliar de enfermería no implica la amenaza de un brote de la enfermedad, pero sí refleja el hecho de que siempre hay riesgos al repatriar a una persona infectada. En estos casos “veo a gente que más probablemente puede infectarse en unidades de cuidados intensivos”. declaró a la prensa durante una teleconferencia entre científicos de distintos países para analizar la evolución de la epidemia en África Occidental. “Cuando se trata de atender a pacientes con ébola el riesgo es muy alto y el error más pequeño puede ser fatal”, señaló el especialista, quien contribuyó al descubrimiento del letal virus en 1976. Piot añadió que “cuando se llega a un medio en el que no hay experiencia (…) con equipamientos nuevos y todo lo que implica... pues no estoy sorprendido” del contagio de la sanitaria.

Preguntado sobre el error que pudo conducir a esta situación, Piot sostuvo que “un momento muy peligroso es cuando se retira el traje de protección al salir de una unidad de aislamiento. Uno está lleno de sudor, se retira las gafas y se frota los ojos con las manos, este puede ser el final”, indicó.