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Los ingenieros logran dar un paso para restablecer la electricidad en Fukushima
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LOS INGENIEROS CONSIGUEN CONECTAR UN CABLE ELÉCTRICO AL REACTOR 2

Los ingenieros logran dar un paso para restablecer la electricidad en Fukushima

Los ingenieros japoneses han conseguido conectar un cable eléctrico externo al reactor 2 de la central nuclear de Fukushima, aunque todavía no han devuelto el flujo

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Los ingenieros logran dar un paso para restablecer la electricidad en Fukushima

Los ingenieros japoneses han conseguido conectar un cable eléctrico externo al reactor 2 de la central nuclear de Fukushima, aunque todavía no han devuelto el flujo de energía a la planta, según informó el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA). "Las autoridades japonesas han informado al OIEA de que los ingenieros han sido capaces de conectar un cable externo a la red eléctrica de la unidad 2", indicó la agencia de la ONU en un comunicado.

El OIEA agregó que se pretende "volver a conectar la energía a la unidad 2, una vez que el rociado de agua sobre el edificio del reactor de la unidad 3 se haya completado". La vuelta de la electricidad sería un paso positivo en los trabajos para poner en marcha el sistema de refrigeración del reactor, que como los otros cinco de Fukushima se averió tras el seísmo y posterior tsunami del pasado viernes. El OIEA ya señaló en los días pasados que la vasija de contención del reactor 2 está parcialmente dañada, lo que entraña un riesgo de fuga radiactiva.

Graham Andrew, asesor científico del director general del OIEA, Yukiya Amano, declaró a la prensa en Viena que la situación sigue siendo "muy seria", aunque no ha empeorado desde el miércoles. El reactor 4 de la planta atómica es el que entraña "mayor preocupación", aseguró, ya que no se sabe nada sobre el nivel de agua en las piscinas de combustible nuclear usado.

EEUU manda aviones para evacuar

Lucha desesperada en la central de Fukushima para evitar una fusión del núcleo mientras Estados Unidos anuncia que mandará aviones para ayudar a abandonar Japón a los estadounidenses que estén preocupados por la radiación. Los esfuerzos por refrigerar el reactor 3 de la planta con cañones de agua y helicópteros militares continúan y TEPCO, compañía propietaria de la central, ha reconocido que no podrá restablecer el suministro eléctrico en Fukushima para reactivar los sistemas de refrigeración antes de mañana, viernes. Por ello, deberá seguir utilizando tanques cisterna y helicópteros para reducir la temperatura del núcleo y del combustible nuclear de plutonio que alberga. La elevada radiactividad ha obligado esta mañana a detener temporalmente dichas operaciones.

Las autoridades estadounidenses expresaron hoy su alarma por la radiación, pero se esforzaron por no criticar al Gobierno japonés, que parece estar superado por la crisis. Las medidas de Washington indican recelo hacia su estrecho aliado por la peligrosidad del peor accidente nuclear en el mundo desde el desastre de Chernóbil en 1986. La máxima autoridad nuclear de Estados Unidos dijo que la piscina de refrigeración para las varillas de combustible gastado en el reactor 4 podría haber quedado seca y otra tiene filtraciones. Gregory Jaczko, director de la Comisión Nuclear Regulatoria, dijo en una comisión parlamentaria que los niveles de radiación en torno a la piscina de refrigeración es extremadamente alta, lo que supone un riesgo mortal para los trabajadores que aún están en la planta, gravemente afectada por el terremoto. "Sería muy difícil para los trabajadores de emergencia llegar a los reactores. Las dosis que podrían experimentar serían dosis potencialmente mortales en un periodo de tiempo corto", dijo en Washington.

El organismo nuclear de Japón dijo que no podía confirmar si el agua cubría las barras de combustible. El operador de la planta dijo que creía que la piscina de combustible gastado del reactor aún tenía agua el miércoles, y dejó claro que su prioridad era la piscina del reactor número tres. El jueves por la mañana, helicópteros militares lanzaron unos 30 toneladas de agua, destinadas a este reactor. Un equipo de emergencia dejó de echar temporalmente agua en el mismo reactor con un cañón de agua debido a la alta radiación, dijo la cadena NHK, pero otro grupo reanudó después los trabajos.

Los expertos sanitarios dijeron que el pánico por las fugas radiactivas de la planta de Daiichi, situada a unos 240 kilómetros al norte de Tokio, estaba desviando la atención de otros riesgos que afrontaban los supervivientes del terremoto y tsunami del pasado viernes, como el frío, la nieve y el acceso a agua potable. Dentro del complejo, dañado por cuatro explosiones desde el seísmo de magnitud 9 y el tsunami posterior, los trabajadores con trajes de protección y usando iluminación provisional intentaban supervisar qué pasaba dentro de los seis reactores. Han estado trabajando en turnos breves para minimizar la exposición a la radiación. Las últimas imágenes de la planta nuclear mostraban graves daños en algunos de los edificios tras las cuatro explosiones. Dos de los edificios eran un amasijo de acero y cemento.

Evacuación de las zonas próximas

El ministro portavoz, Yukio Edano, señaló que su país "entiende" la recomendación de EEUU de que sus ciudadanos en un radio de 80 kilómetros de la central abandonen la zona, pero insistió en que por ahora el Gobierno nipón no considera necesario ampliar el perímetro. Cerca de 200.000 personas fueron evacuadas los días pasados en un perímetro de 20 kilómetros en torno a la central de Fukushima, mientas a aquellas entre 20 y 30 kilómetros se les ha recomendado no salir de sus casas, cerrar las ventanas y no encender el aire acondicionado. Hoy, las autoridades niponas incrementaron en unos 28.000 el número de evacuados en las localidades cercanas a la planta nuclear, que fueron reubicados en refugios en las provincias de Fukushima, o en las zonas de Niigata y Togichi, según NHK.

Además, en la provincia de Fukushima, otros muchos han decidido voluntariamente dirigirse al sur o alejarse de la planta para evitar exponerse a la contaminación nuclear. Los principales problemas parecen concentrarse ahora en dos unidades, la 3 y la 4, en las que las temperaturas y el nivel de radiactividad siguen siendo muy elevadas. El ministro japonés de Defensa, Toshimi Kitazawa, dijo que si es necesario se repetirá de nuevo la operación de vertido de agua sobre el reactor 3 desde helicópteros.

Precisó que el nivel de radiación a 300 metros de altura se situaba en 4,13 milisievert por hora, mientras que a 90 metros alcanzaba los 87,7 milisievert. Ayer las autoridades niponas detectaron que los niveles de radiación a más de 20 kilómetros al noreste subieron a los 0,33 milisierverts por hora, ligeramente por encima de lo normal pero todavía sin peligro para la salud.

Tres de los seis reactores sufren daños en su núcleo

El mundo contuvo ayer la respiración con la mirada fija en un reducido grupo de expertos que luchaba por evitar una catástrofe en la central nuclear de Fukushima. Anoche, 180 operarios continuaban bombeando agua a varios reactores de la planta. La prioridad era el reactor 3, el único en el que se utiliza plutonio, mucho más nocivo que el uranio, como combustible. El Gobierno japonés intentará hoy de nuevo suministrar agua al reactor con helicópteros militares, después de que ayer se abortase una operación similar por los altos niveles de radiación.

Este fracaso, y la evacuación temporal de todos los trabajadores de la planta, hizo temer por momentos que la situación estaba fuera de control. Todos los reactores tenían problemas de refrigeración. En un gesto desesperado, la Policía intentó enfriar los residuos radiactivos en uno de los reactores con cañones de agua, utilizados por efectivos antidisturbios. A primera hora del día se declaró un nuevo incendio en la planta, que en las últimas 48 horas ha enviado bajos niveles de radiación hacia Tokio, propagando el miedo por la capital y la alarma internacional.

Por primera vez desde el comienzo de la crisis, Japón trasladó “su preocupación” al Organismo Internaciona lde la Energía Atómica (OIEA), que reconoció que tres reactores de la central tienen su núcleo dañado y que "algunos escombros en tierra de la explosión del 14 de marzo en el reactor 3 tienen queser retirados antes de poder empezar a pulverizar (agua)". El director general de la AIEA, Yukiya Amano, añdió que "no es el momento de decir que las cosas están fuera de control" en Japón, en referencia a las declaraciones del comisario de Energía de la Unión Europea, Guenther Oettinger, quien el martes calificó la situación de “apocalíptica” y ayer insistió en que puede producirse un desastre nuclear “en las próximas horas”.

También preocupa la situación del reactor 2, donde se registró una súbita bajada de la presión que, según TEPCO, es un indicio o de que se está enfriando o de que habría una fisura en lavasija. La compañía propietaria de la central reconoció ayer que no está segura “de si la vasija de contención es o no hermética".

Los ingenieros japoneses han conseguido conectar un cable eléctrico externo al reactor 2 de la central nuclear de Fukushima, aunque todavía no han devuelto el flujo de energía a la planta, según informó el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA). "Las autoridades japonesas han informado al OIEA de que los ingenieros han sido capaces de conectar un cable externo a la red eléctrica de la unidad 2", indicó la agencia de la ONU en un comunicado.

El OIEA agregó que se pretende "volver a conectar la energía a la unidad 2, una vez que el rociado de agua sobre el edificio del reactor de la unidad 3 se haya completado". La vuelta de la electricidad sería un paso positivo en los trabajos para poner en marcha el sistema de refrigeración del reactor, que como los otros cinco de Fukushima se averió tras el seísmo y posterior tsunami del pasado viernes. El OIEA ya señaló en los días pasados que la vasija de contención del reactor 2 está parcialmente dañada, lo que entraña un riesgo de fuga radiactiva.

Graham Andrew, asesor científico del director general del OIEA, Yukiya Amano, declaró a la prensa en Viena que la situación sigue siendo "muy seria", aunque no ha empeorado desde el miércoles. El reactor 4 de la planta atómica es el que entraña "mayor preocupación", aseguró, ya que no se sabe nada sobre el nivel de agua en las piscinas de combustible nuclear usado.

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