El Estado colombiano pide perdón por el asesinato de un indígena hace 20 años

Bogotá, 21 ago (EFE).- El Estado colombiano pidió hoy perdón a los indígenas de la comunidad Nasa por el asesinato, cometido hace 20 años, de uno de sus miembros a manos de integrantes del Ejército en el departamento del Cauca (suroeste).

El acto forma parte del fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que condenó al Estado colombiano por este hecho en una sentencia fijada en julio de 2007.

Germán Escué Zapata, entonces de 21 años, fue sacado de su vivienda con engaños por parte del Ejército para, luego de acusarlo de ser guerrillero, asesinarlo en una zona montañosa del sector.

"A nombre del Estado colombiano y del Gobierno del presidente Álvaro Uribe pedimos perdón por hechos que nunca debieron suceder", dijo la viceministra del ministerio del Interior y de Justicia, Bibiana Manrique.

En el acto de desagravio, cumplido en el resguardo de Jambaló del caserío Vitoyó (departamento del Cauca), también llevó la palabra la viceministra de asuntos multilaterales, Adriana Mejía, quien dijo a los casi 7.000 aborígenes que a Escué Zapata los militares "lo detuvieron, lo golpearon" y posteriormente lo asesinaron.

Familiares de la víctima indicaron a televisiones locales que para ellos el hecho de que el Estado reconozca este crimen es "muy importante".

La decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) también contempla que la familia de la víctima debe recibir indemnización económica.

En su fallo, la CIDH reconoció que Escué Zapata era un agricultor y su ejecución se inscribió dentro de un "patrón de violencia contra los pueblos indígenas asentados en esta zona del país y de sus líderes".

La Corte Interamericana de Derechos Humanos es una institución judicial autónoma de la Organización de los Estados Americanos (OEA) cuyo objetivo es la aplicación e interpretación de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

La Corte tiene su sede en San José de Costa Rica, pero frecuentemente realiza sesiones extraordinarias en otros países. EFE ocm/ap/av