Portugal reabrirá sus playas el próximo 6 de junio. Los portugueses podrán disfrutar de sus arenales de nuevo, pero siguiendo una serie de medidas de seguridad. Los grupos deberán mantener una separación de un metro y medio, las tumbonas se reservarán para toda la mañana o toda la tarde y no estarán permitidos los deportes de playa de dos personas o más. La policía no vigilará el cumplimiento de las normas. El Gobierno ha desarrollado además una aplicación que informará puntualmente sobre el estado de ocupación de cada playa