La plaga de robos en moto no deja de crecer en Argentina. Los motochorros, como se conoce a los delincuentes que se desplazan en parejas por la ciudad para cometer sus fechorías a bordo de una moto, pueden identificar a una víctima y seguirla durante varios minutos hasta que encuentran el lugar perfecto para cometer el atraco, o bien descubren a cualquier persona en mitad de una calle y se lanzan a por ella.

Esto es lo que sucedió el pasado mes de agosto en un barrio de Buenos Aires, aunque las imágenes han visto la luz ahora. Un joven está en solo en una calle cuando dos chicos aparecen por la calle subidos a una moto: lo ven, detienen la motocicleta y uno de ellos se va a por él con una pistola en la mano exigiéndole que le entregue sus pertenencias.

Sin embargo, cuando el chico se da la vuelta el atracador se ve sorprendido al darse cuenta de que es su amigo y decide no robarle. Después de la sorpresa inicial, víctima y ladrónse funden en un rápido abrazo, antes de que cada uno vuelva a sus quehaceres: el joven esperando en la calle y el atracador de nuevo en su moto.

El vídeo se ha vuelto viral en Argentina y en muchos otros países. Los robos en motochorro son una epidemia y hace pocos días veíamos el caso del brutal atraco a una mujer a las puertas de su trabajo para robarle un bolso y la cartera que llevaba encima. Las autoridades están analizando nuevas posibilidades para luchar contra esta oleada de delincuencia.