El establecimiento Crensa abre sus puertas este lunes en Valencia con una camarera llamada Mulán a la entrada del local, en un lugar que contará con tecnología avanzada en la cocina y dos camareras robotizadas que se encargarán de servir los pedidos.
Los robots, que piden paso al son de "Déjeme pasar, por favor", sirven la comida con un: "Que aproveche, cariño", incorporan un elemento innovador a un barrio diferente de la ciudad, como es el de Benimaclet.