La empresa de transportes Benavent se dedica al traslado de carne. Pero en sus camiones no llevan la imagen de una vaca o de un cerdo, sino la de una mujer rubia desnuda, a tamaño natural y con postura sexy. Está serigrafiada en toda su flota de camiones. El juzgado de instrucción 4 de Ciudad Real les ha ordenado retirar esa publicidad "humillante y vejatoria", que cosifica a la mujer, y les prohíbe que vuelvan a exihirla en el futuro. Una sentencia que el dueño de la empresa no comprende. Rafael Benavent colocó la imagen desnuda en su primer camión hace 17 años.
Defiende que no es un reclamo publicitario sino una forma de decorar sus camiones exaltando la belleza. "No entiendo a quién no le puede gustar", dice. Por ahora piensa recurrir la sentencia y no va a retirar la imagen. El juez insiste en su fallo en que la imagen es más propia de páginas de contactos sexuales o clubs de carreteras "rancios". La Asociación de Usuarios de la Comunicación que presentó la demanda añade que transportar carne nada tiene que ver con la imagen del cuerpo femenino, por lo que creen que estamos ante un caso de publicidad ilícita además de sexista.
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