Los científicos investigan una momia del siglo XVI que podría desvelar importantes datos para la historia de las enfermedades entre Europa y América. Se trata de un cadáver encontrado en Quito (Ecuador) detrás del muro de una iglesia que apareció tras un terremoto en 1949. 

Philippe Charlier es uno de los ciéntificos que se encargan de la momia. El patólogo francés ha encontrado indicios de una enfermedad inflamatoria en sus articulaciones, lo que podría ser poliartritis reumatoide, una dolencia común en América incluso antes de la llegada de Cristóbal Colón.