Los mitos de la antigua Grecia cobran vida para deleite de los vecinos de la ciudad francesa de Toulouse. La araña Ariane y el minotauro Asterion caminan entre un público sorprendido por las dimensiones de estos visitantes mecánicos que han tomado las calles. Estos gigantes de metal de casi 50 toneladas son los protagonistas de la nueva performance del grupo francés de teatro llamado La Máquina. Ella es una de las artistas que da vida a los colosos. Tardaron dos años en ser construidos. Cada uno está controlado por decenas de operadores que articulan cada pieza con gran precisión para lograr el mayor realismo posible en el movimiento. Un espectáculo donde los límites de la fantasía se traspasan a paso de gigante.