Buzos indonesios han recuperado del fondo del mar una de las cajas negras del avión de la aerolínea Lion Air. El aparato se estrelló el pasado lunes en el mar de Java con 189 personas a bordo y sin ningún superviviente. Se perdió el contacto con él 13 minutos después de su despegue del aeropuerto de Yakarta rumbo a la ciudad minera de Pangkal Pinang. Los buzos han encontrado el dispositivo que registra los datos de vuelo y siguen buscando la segunda caja negra, la que habría grabado las conversaciones entre los dos pilotos. Se espera que den pistas de las causas del siniestro.