Las protestas a Trump no cesan no solo en su país, sino por todo el mundo. Allá donde el presidente vaya, recibe las críticas de los ciudadanos de dicha ciudad. Sus oponentes no cesan en su empeño y ahora, son globos-protesta caricaturizando al americano los que se llevan el protagonismo. El último ejemplo, en San Francisco: un barco se ha paseado por su costa con un pollo-protesta. "No es un hombre ni un líder decente, y hay que hacérselo saber" defiende uno de los manifestantes en Londres, una de las últimas ciudades visitadas por el magnate.