Fíjense en lo que se encontró una patrulla de policía en una carretera de Australia...Este vehículo que ven dejando un rastro de fuego. Tras seguir sus pasos durante un buen rato comprobaron que se trataba de un coche que arrastraba un remolque en llamas. El conductor circuló así, con una bola de fuego como compañera de viaje durante al menos 20 kilómetros.

El conductor tiene 49 años y se desconoce el motivo por el que no había detenido el vehículo.