Malia Obama es, por motivos evidentes, una de las adolescentes más famosas del mundo, pero también es una simple chica de 18 años a la que le gusta salir de fiesta y divertirse con sus amigas. Y eso es precisamente lo que ha hecho.

A finales del mes pasado, la hija mayor del presidente de los EEUU se desplazó hasta Chicago para asistir al festival de música Lollapalooza. Pero lejos de conseguir mantenerse como una asistente anónima más, las cámaras de los paparazzi consiguieron grabar unas imágenes en las que se la ve dando rienda suelta al indudable ritmo que lleva en el cuerpo.

Su sensual baile al compás de la actuación del rapero Bryson Tiller demuestran que la joven ha heredado el gen 'bailongo' de sus padres que en más de una ocasión han mostrado también en público sus dotes naturales para el baile.