Trazo a trazo y caracter a caracter, más de 3.000 japoneses celebran en Tokio el Concurso Anual de Caligrafía de Año Nuevo, con la esperanza de tener un buen comienzo este 2019. Desde niños de 3 años a mayores de 89, siguen la tradición japonesa del 'Kaikizome', literalmente "primera escritura", que consiste en representar un 'kanji' o poema con la llegada del nuevo año. Cada 5 de enero, varios miles de calígrafos se reúnen en el Nippon Budōkan de la capital japonesa, en un acontecimiento retransmitido a nivel nacional. Deben terminar el escrito en 24 minutos. Y la ejecución de cada trazo cuenta. La caligrafía es un arte ampliamente practicado y venerado en muchas partes de Asia. Se considera que el acto de escribir caracteres agudiza la mente y mejora la concentración. Los ganadores de esta competición anual se anunciarán en una ceremonia que se celebrará en Tokio el próximo 24 de febrero.