Toda la resolución del Banco Popular y los acontecimientos que la provocaron siguen envueltos en un halo de misterio. Seis meses después, la famosa JUR, la Junta Única de Resolución, sigue sin hacer público ni el documento que recoge los motivos de la intervención del banco ni el de Deloitte. Así que los afectados siguen sin tener derecho a saber por qué su inversión pasó a valer cero de la noche a la mañana.