Ya se sabe, el mal tiempo y las dificultades activan agudiza nuestra creatividad y ayudan a que las ideas para superar estos problemas fluyan por nuestra cabeza. Y eso es lo que le debió ocurrir a Dane Kouttron, un ingeniero del MIT que, harto de las nevadas y de los problemas para moverse por su barrio durante el invierno, desarrolló un robot semi autónomo que limpia su calle como una quitanieves tradicional.
Él lo creó como un proyecto totalmente personal y sin más intención que mejorar su vida durante el invierno, pero en esta época algo así es imposible que pase desapercibido. Un vecino subió un vídeo de su invento a internet y ahora todos quieren conocer cómo funciona este robot con sus llamativos faros que parecen ojos.
Viendo las fotos es fácil pensar que se trata de una gran obra de ingeniería, pero aquí la clave está en el ingenio de Kouttron, pues sus materiales son totalmente caseros. Toda su inteligencia viene de una máquina creada por el propio ingeniero con utensilios que tenía por casa a raíz de su amor por los robots. Se ha convertido en uno de los personajes del invierno, pero de momento no tiene pensado comercializar la idea.