Eigg es una de las islas del archipiélago de las Hébridas Interiores (Escocia), situada al norte de la península de Ardnamurchan. En ella vive una pequeña comunidad que cuenta con 45 hogares, seis edificios y veinte comercios. Además, tiene una característica muy especial: su sistema energético se basa en la autosuficiencia y en las fuentes renovables. Sus habitantes han conseguido obtener hasta el 95% de la electricidad que necesitan a través de la energía eólica, hidráulica y solar.
El proyecto comenzó en 1998 y finalizó en 2008, gracias a que sus habitantes compraron la isla de Eigg al gobierno británico y pudieron obtener la plena autonomía. La comunidad cuenta con un sistema de baterías de almacenamiento y dos generadores diésel para casos de emergencia. Con ello pueden suministrar energía a sus 45 kilómetros de red.
La economía del lugar se sustenta principalmente en la pesca, la ganadería y el turismo. Las siguientes fotografías de Paul Hackett (Reuters) nos aproximan a la isla más sostenible energéticamente de planeta.