Museos suburbanos: la historia de Madrid (también) está en el subsuelo

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El vestíbulo de Pacífico abrirá sus puertas el sábado 14 de octubre
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El vestíbulo de Pacífico abrirá sus puertas el sábado 14 de octubre

Detalle del vestíbulo de Pacífico
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Detalle del vestíbulo de Pacífico

En la estación de Chamberí aún puede verse mobiliario antiguo
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En la estación de Chamberí aún puede verse mobiliario antiguo

Los carteles se conservan prácticamente intactos
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Los carteles se conservan prácticamente intactos

Otro de los carteles de la estación de Chamberí
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Otro de los carteles de la estación de Chamberí

La estación de Chamberí puede visitarse de jueves a domingo
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La estación de Chamberí puede visitarse de jueves a domingo

La antigua estación se cerró en 1966
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La antigua estación se cerró en 1966

Los restos de la fuente de los Caños del Peral
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Los restos de la fuente de los Caños del Peral

Estos restos forman el mayor museo arqueológico bajo tierra de Madrid
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Estos restos forman el mayor museo arqueológico bajo tierra de Madrid

Cualquier ciudadano puede disfrutar de estos restos
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Cualquier ciudadano puede disfrutar de estos restos

La Nave de Motores de Pacífico funcionó hasta 1972
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La Nave de Motores de Pacífico funcionó hasta 1972

En la estación de Pacífico cualquiera puede visitarla
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En la estación de Pacífico cualquiera puede visitarla

El exterior de la nave también mantiene su aspecto original
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El exterior de la nave también mantiene su aspecto original

Corría el año 1923 cuando la estación de metro Pacífico abría sus puertas a los madrileños en el tramo Atocha-Puente de Vallecas de la pionera línea 1. El sábado 14 de octubre se inaugurará la rehabilitación del vestíbulo original, cerrado en 1966 por una prolongación de los andenes. Respetando la decoración de antaño, ideada por el arquitecto Antonio Palacios, los ciudadanos podrán disfrutar del patrimonio histórico de Metro todos los sábados, de forma gratuita y reservando previamente.

La estación de Pacífico ya formaba parte de la ruta museística de Metro de Madrid. Su Nave de Motores, construida entre 1922 y 1923 e inaugurada en 1924, estuvo en funcionamiento hasta el año 1972. Las obras de conservación velaron por su aspecto original y se recuperó para el público tal y como fue concebida.

Pero, sin duda, si hay una estación que llama la atención por las historias que circulan en torno a ella, esa es Chamberí. La antigua estación pertenece a la primera línea de Metro, que fue inaugurada en Madrid en 1919. Se clausuró el 21 de mayo de 1966 tras la decisión de aumentar la longitud de los trenes y ante la imposibilidad de alargar la estación. El diseño, también de Antonio Palacios, optó por una solución funcional, muy simple en cuanto a recorridos y organización y por unos acabados sencillos. Chamberí cuenta con una serie de carteles publicitarios que se conservan prácticamente tal y como fueron creados en la década de los años 20 y que son uno de los grandes atractivos de la estación.

Si Ópera forma parte de tus trayectos habituales, seguro que te ha llamado la atención los restos allí expuestos. El descubrimiento de estos vestigios se produjo en 1925, durante las obras de construcción del tramo Sol-Quevedo de la línea 2 y del Ramal Ópera-Norte. Tras su rehabilitación, la estación de Ópera guarda el mayor museo arqueológico bajo tierra de Madrid, un espacio de 200 metros cuadrados donde se pueden observar restos arqueológicos de los siglos XVI y XVII: la Fuente de los Caños del Peral, el Acueducto de Amaniel y el Alcantarillado del Arenal. 

 

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