Comidas que tomas en verano y no deberías ni probar

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Hamburguesas y perritos
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Hamburguesas y perritos

Con el tiempo libre y las buenas temperaturas, solemos acudir a los mercados al aire libre, tan de moda en estos tiempos, repletos de actividades y comida rápida. Es prácticamente imposible resistirse a tomar un perrito caliente o una hamburguesa. Todos sabemos que no son la opción más saludable y aun así los pedimos. En su lugar, prueba otros tipos de carne como el pavo o pollo, o indaga algo más y busca puestos de comida asiática, donde seguro que encontrarás opciones igual de ricas pero más sanas.

Palomitas
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Palomitas

Muchos de nosotros esperamos al verano para disfrutar de una película en pantalla grande. Además, solo ahora están abiertos los cines al aire libre. No solo vamos por la trama, sino por las adictivas (y caras) palomitas. Si lo que quieres es no arruinar tu operación bikini, recomendamos mantener este salado y grasiento aperitivo a raya. O bien porciones pequeñas o (mejor todavía) guardarte las ganas y hacerlas en casa.  

Carne de barbacoas
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Carne de barbacoas

El verano está para comer al aire libre. Es tiempo de barbacoas. No obstante, si quieres mantener la línea, quizá no sea lo más recomendable. Ten especial cuidado con los trozos más grasientos de la carne y asegúrate de que está en buen estado. Guarda los acompañantes en una nevera y así evitarás arrepentirte en un futuro.

Cócteles
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Cócteles

Sabemos que cuando el calor aprieta, una bebida bien fresquita sienta de maravilla. Sin embargo, quizá los cócteles no sean la mejor opción. Deshidratan, y tienen mucho más azúcar que cualquier cerveza. Y, además, su alcohol te hará más proclive a consumir más calorías, en torno a unas 2.000 para ser exactos. También hay que saber escoger: un margarita, peor que un mojito.

Ensalada de patata
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Ensalada de patata

Es una receta clásica, fresquita y fácil durante el verano. Es difícil resistirse a tomarla al aire libre. Sin embargo, hay que andarse con cuidado con cualquier plato hecho con huevo crudo. En este caso, debemos cerciorarnos de la calidad de su mayonesa, no vaya a ser que contraigamos una salmonelosis durante las vacaciones.  

Helados caseros
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Helados caseros

La manera perfecta para refrescarse una tarde de verano. Una vez más, debemos poner especial atención a los ingredientes y al proceso de preparación. Si lo hacemos en casa, no debemos dejarlo mucho tiempo al sol, pues uno de sus ingredientes principales es el huevo y su combinación con el calor puede hacer que enfermemos. En este caso, la FDA estadounidense recomienda usar una base de natillas o huevos pasteurizados.  

Ensalada César
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Ensalada César

Se nos suele olvidar que el aderezo típico de este rico plato también está hecho con huevos crudos o poco hechos. Por eso, se debe extremar la precaución, sobre todo teniendo en cuenta las altas temperaturas. Además, suele cargarse de calorías extra: salsas, queso, pan tostado… No es la elección más ligera.  

Limonada
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Limonada

La limonada casera en un día caluroso entra de maravilla. No obstante, es una de las bebidas más engañosas: puede parecer más saludable, pero normalmente se hace con la misma cantidad de azúcar que los refrescos de cola. Si quieres algo igual refrescante y sabroso, prueba el agua saborizada.

Por fin, verano. Altas temperaturas, menos ropa, días más largos y, por supuesto, la mesa repleta de alimentos suaves, frescos y ligeros. Una de las mejoras cosas de esta estación es la comida. Sin embargo, no todos los alimentos que comemos durante los meses más cálidos son adecuados para la dieta o incluso para nuestra salud. Entre ellos, algunos de los más populares.

No solo hay que poner especial atención a los azúcares y carbohidratos de nuestros platos favoritos, sino que en verano, más que en ninguna otra estación, hay que cerciorarse de que los métodos de conservación son los correctos. Pulsa en las flechas de la derecha para averiguar los alimentos con los que debes tener cuidado o, directamente, mantener a raya.  

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