En el 44% de los accidentes en España está implicado un vehículo con más de 15 años

El 'Informe Anual 2021' elaborado por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) desvelaba hace unas semanas que el parque automovilístico español había vuelto a incrementar su edad media durante el año pasado, alcanzando ya una antigüedad de 13,49 años que nos coloca en el pelotón de cola de Europa, y muy por debajo de la media en el continente, donde la edad del parque rodante es de 11,5 años. Y ahora un estudio de la Fundación Línea Directa, realizado en colaboración con Centro Zaragoza, explica cuáles están siendo las dramáticas consecuencias de que los españoles nos movamos en vehículos tan viejos y, es otra de las conclusiones, cada vez peor mantenidos.

Porque según el informe 'Coches obsoletos, riesgo real. Influencia de la antigüedad del parque automovilístico en la accidentalidad (2011-2020)', el impacto sobre la seguridad vial se está haciendo cada vez más evidente. No solo porque en la última década hayan perdido la vida en nuestro país 2.700 personas en accidentes con coches de más de 15 años, sino porque, y esto es quizá lo más elocuente, el porcentaje de coches muy antiguos involucrados en accidentes graves se multiplicó por tres durante el periodo analizado: si en 2011 los vehículos con más de 15 años estaban implicados en un 15% de los accidentes mortales, en 2020 ese mismo grupo de automóviles se vieron envueltos en el 44% de los siniestros con al menos un fallecido. Y cuando se analizan los accidentes con heridos graves, si en 2011 los coches de esa edad protagonizaron un 12% de los accidentes, una década después, en 2020, participaban ya en el 39% de ese tipo de siniestros.

El informe, de hecho, trata de cuantificar el número de vidas que se salvarían con una mejor renovación del parque automovilístico español. Y estima, atendiendo a la letalidad que presentan los vehículos en función de su antigüedad, que si se consiguiera rebajar la edad media de lo vehículos españoles a 10 años, podrían ahorrarse 260 muertes por accidentes de circulación anualmente.

Y es que el parque automovilístico español es obsoleto, y da la sensación de que los sucesivos planes de achatarramiento emprendidos por los diferentes gobiernos hayan conseguido el efecto contrario: en vez de retirar coches viejos de la circulación para achatarrarlos, que se achatarren 'en vida'. Porque nada menos que 22,9 millones de vehículos, que son dos de cada tres, tienen ya más de una década de antigüedad en nuestro país, y 16,2 millones superan los 15 años. Un auténtico museo del automóvil, en el que la antigüedad ha crecido un 38% en los últimos 10 años.

Pero si queremos ver coches viejos de verdad, hay regiones mejores que otras para hacerlo. Porque según el estudio de la Fundación Línea Directa y Centro Zaragoza, elaborado con datos de 2020 porque es el último ejercicio con datos por desglosados por comunidades autónomas, los extremeños no solo tienen una infraestructura de ferrocarril digna del siglo XIX, sino que también cuentan con el parque automovilístico más antiguo, con una media de 15,1 años. Y le siguen Castilla-La Mancha y Castilla y León, con 14,6 años en ambos casos. Aunque Galicia, Andalucía y La Rioja también están por encima de los 14 años de media.

En el extremo opuesto aparece Madrid, donde la edad media del parque circulante al finalizar 2020 era de 10,4 años, la más baja del país, cuya media en ese momento era de 13,1 años (subió hasta 13,49 años durante el 2021). Y otras comunidades españolas con una media inferior a los 13 años son Cataluña, Euskadi y Baleares.

Coches peor mantenidos también

Pero el informe va más allá, y también suspende a los españoles en cuanto al mantenimiento de sus vehículos, ya que el 50% de los coches que pasan la ITV tienen defectos en la primera inspección, y en uno de cada cinco se detectaron deficiencias graves o muy graves. Además, el absentismo en las inspecciones técnicas es una auténtica pandemia: un 40% de los vehículos que deberían haber pasado la ITV en 2021, no lo hicieron.

Y los autores del estudio analizan también la evolución del gasto en mantenimiento en ese mismo periodo 2011-2020, descubriendo que la inversión de las familias españolas en mantenimiento del coche se redujo un 20%, pasando de 625 a 497 euros. Aunque en el caso concreto de Madrid, destacado en las conclusiones del informe, la reducción fue algo menor, del 9%: de los 578 euros anuales de media gastados en taller en 2011 a los 526 euros en 2020.

Quizá por ello los defectos detectados en la inspección de las ITV se agravan continuamente, y en especial los que pueden tener influencia sobre la seguridad vial y causar accidentes. Porque en los últimos cinco años, los defectos graves o muy graves se han incrementado de forma drástica en el sistema de alumbrado (44%), la dirección (34%), el conjunto formado por ejes, neumáticos y suspensión (26%), el motor y la transmisión (10%) o el sistema de frenos (10%). Tendencia en la que están siendo determinantes los vehículos más viejos, pues los coches de más de 10 años aportan el 88% del total de los defectos graves en los neumáticos y el 93% de los problemas con el sistema de alumbrado.

Para Mar Garre, directora general de laFundación Línea Directa, "evidentemente, las prestaciones y la seguridad pasiva de los coches nuevos han dado un salto cualitativo en los últimos años. Sin embargo, sabemos que la adquisición de un coche nuevo supondría un gran esfuerzo para las familias españolas en un momento como el actual, marcado por la inflación y el encarecimiento de la financiación. Por eso, ahora más que nunca, es vital que mantengamos nuestros vehículos en perfecto estado, que pasemos la ITV en los plazos oficiales y que hagamos las revisiones pertinentes".