Visitamos la mayor fábrica de motores del mundo: ¿sabes de qué marca es y dónde está?

Hasta Gyor, la ciudad más importante del noroeste de Hungría, ha viajado El Confidencial para conocer la mayor fábrica de sistemas de propulsión del mundo. Esta planta es propiedad de Audi y fabrica motores, coches y otros componentes tanto para la propia marca alemana como para otras empresas del Grupo Volkswagen. Se inauguró en 1993 en un solar de 800.000 metros cuadrados con 82 empleados, y ahora la factoría alberga 12.143 empleados y las instalaciones han crecido hasta los cinco millones de metros cuadrados, es decir, 500 hectáreas. De hecho, en la actualidad supone el 6% de las exportaciones totales de Hungría, con envíos a 122 países diferentes.

Un año después de su nacimiento, en 1994, Audi Hungría comenzó a producir motores. Un recorrido de 30 años que llevó a la empresa a fabricar en 2023 nada menos que 1.660.425 de sistemas de propulsión para 35 centros de producción del Grupo Volkswagen. De ellos, 1.164.289 eran motores de gasolina y diésel de tres y cuatro cilindros. Además, en la planta se produjeron también 19.734 motores de gasolina de cinco cilindros, 277.081 motores de gasolina de seis cilindros, 78.905 motores diésel de seis cilindros y 6.216 motores de diez cilindros. A los que hay que sumar 114.058 sistemas de propulsión eléctrica, con un rango de potencia que va desde los 90 kW (122 CV) hasta los 180 kW (244 CV).

En concreto, la planta húngara produce motores eléctricos desde 2018, y hoy se utilizan en modelos como los Audi Q8 e-tron y Q6 e-tron, y el nuevo Porsche Macan, ya que estos dos últimos están basados en la nueva Plataforma Premium Eléctrica (PPE). De hecho, durante nuesta visita tuvimos ocasión de montar algunos de los componentes de un motor eléctrico del Q6 e-tron, un proceso que los operarios realizan manualmente, aunque la mayoría de los otros pasos son realizados por robots. El proceso total de montaje requiere entre tres y cuatro horas para producir cada uno de estos propulsores. Adicionalmente, la planta se está preparando para producir los nuevos motores de los futuros vehículos eléctricos pequeños del Grupo Volkswagen. Y con esta novedad, por primera vez fabricará en serie el paquete de laminado metálico que conforma el núcleo del motor eléctrico, y en el futuro hará lo propio con los rotores y la electrónica de potencia.

¿Qué coches se hacen aquí?

Audi Hungría comenzó a fabricar coches hace 26 años, pues todo empezó en 1998 con la primera generación del TT Coupé. En la actualidad producen los Audi Q3 y Q3 Sportback, y en 2023 establecieron un nuevo récord al fabricar 177.775 unidades de Audi. En el desglose, 94.823 correspondieron al Q3, 73.806 al Q3 Sportback, 6.850 al TT Coupé y 2.681 al TT Roadster. Pero, tras 25 años de producción, Audi dejó de fabricar el TT en todas sus variantes el pasado año, después de hacerse 662.762 vehículos, repartidos entre sus tres generaciones.

Y cuando hacemos referencia al Q3 y Q3 Sportback, hablamos de la producción de todas sus versiones, desde los motores de gasolina y diésel, los hibridos suaves, los híbridos enchufables o las variantes deportivas RS Q3 y RS Q3 Sportback. Además, en septiembre de 2024 comenzaba en la planta húngara la fabricación del Cupra Terramar, convirtiendo a Audi Hungría en el primer centro de producción del Grupo Volkswagen en el que se fabrica un modelo de una marca hermana junto a modelos de Audi.

Puertas para Bentley o Lamborghini

Otra parte importante de Audi Hungría es el denominado Taller de Herramientas, fundado en 2005 y que actualmente emplea a unas 700 personas. Cuenta con aproximadamente 60.000 metros cuadrados de superficie, siendo uno de los mayores de su clase en Europa Central y Oriental. Tiene tres áreas de actividad: fabricación de herramientas, construcción de instalaciones y accesorios, y producción en serie exclusiva. De hecho, este último apartado ha experimentado un importante aumento de volumen en los últimos años, alcanzando la cifra récord de 41.375 conjuntos de componentes de carrocería entregados en 2023. Uno de los puntos fuertes del departamento es un concepto de producción flexible que permite la fabricación económica de componentes de carrocería de alta calidad en lotes pequeños. La amplitud de la creación de valor aquí abarca desde la producción de sofisticadas piezas individuales hasta el ensamblaje de piezas en componentes listos para instalar, como puertas y portones traseros.

De hecho, uno de los principales clientes es Audi Sport, la división deportiva de la marca alemana, con modelos como el R8 o el e-tron GT Quattro. De hecho, este último supuso más de 12.700 conjuntos de componentes en 2023, siendo el coche con mayor volumen del departamento. Además, en Gyor se fabrican todos los componentes de aluminio de ese modelo, como las puertas, los guadabarros o las aletas. Pero también se hacen componentes de aluminio para modelos de Lamborghini, como el Urus, el Huracán o el Aventador, o para Bentley, destinados a su modelo SUV Bentayga.

Por otro lado, la fábrica tiene un departamento de Desarrollo Técnico. Con una plantilla de 673 especialistas, en él se realizan proyectos completos en diversos módulos de propulsión convencionales y eléctricos. Y es que la planta cubre todo el espectro de desarrollo, desde la construcción hasta la termodinámica, y desde las simulaciones numéricas hasta las pruebas en banco y en el propio vehículo. Para ello, el departamento cuenta con 18 bancos de pruebas para motores de combustión y cuatro para sistemas de propulsión eléctrica, incluidos dos para pruebas acústicas y cuatro bancos climáticos para simulaciones ambientales.

La empresa apuesta por la tecnología y por las soluciones inteligentes, no solo en la producción, también en la logística. Por ello, está mejorando su infaestructura con sistemas de transporte y vehículos sin conductor, que trasladan de forma autónoma los componentes a los puestos de trabajo, como por ejemplo la línea de producción de motores eléctricos. Estos se orientan en la nave con escáneres láser y buscan la ruta óptima. Y los algoritmos y el aprendizaje automático hacen posible este procedimiento. Actualmente, Audi Hungría cuenta con dos centros logísticos con una superficie total de 160.000 metros cuadrados.

Durante nuestra visita, los responsables de Audi Hungría explicaron que la planta opera con un balance neutro en carbono desde enero de 2020. De este modo, se convierte en el tercer emplazamiento neutro en carbono del Grupo Audi, después de Audi Bruselas, en Bélgica, e Ingolstadt, en Alemania. Además, la fábrica es el mayor consumidor de energía geotérmica del país, ya que más del 90% de la energía térmica que necesita la empresa se cubre con este tipo de energía desde 2015. El sistema proporciona al menos 82.000 megavatios hora de energía cada año, y de ese modo se reducen sus emisiones de CO₂ en unas 17.000 toneladas al año.

De Austria a Hungría en eléctricos

Para llegar a Gyor, nuestra logística pasaba por volar hasta Viena, para después viajar desde la capital austriaca en coche. Un trayecto con una duración aproximada de una hora y 20 minutos, que prácticamente en su totalidad se desarrolló por autovía, y que hicimos al volante del nuevo Audi Q6 e-tron. El coche eléctrico más avanzado de la marca alemana mide 4,77 metros de longitud por 1,94 de anchura y 1,65 de altura. Y, como decíamos, comparte la moderna plataforma PPE con Porsche.

La versión Q6 e-tron Quattro, empleada en nuestra ruta, cuenta con una batería de iones de litio (tecnología NMC, de níquel, manganeso y cobalto) de 800 voltios con capacidad bruta de 100 kWh (94,9 kWh útiles). Rinde 285 kW (387 CV), tiene 855 Nm de par máximo, acelera de cero a 100 m/h en 5,9 segundos y cuenta con una velocidad punta autolimitada de 210 km/h. Respecto a su consumo, homologa un gasto combinado WLTP de 17,2 kWh/100 km, que se traduce en 618 kilómetros de autonomía eléctrica.

Y si para la ida contamos con un SUV eléctrico, el retorno a Viena fue a los mandos de un S e-tron GT, una berlina eléctrica deportiva que mide 4,99 metros de largo, por 1,96 de ancho y 1,36 de alto. Equipa un motor eléctrico en el eje delantero de tipo síncrono de imán permanente (PSM), con una potencia de 176 kW (239 CV). Este se combina con el motor eléctrico del eje trasero, de nuevo desarrollo, también diseñado como una máquina síncrona de imanes permanentes (PSM), y que proporciona 415 kW (564 CV). Es decir, la potencia combinada del S e-tron GT es de 500 kW (679 CV), con un paso de cero a 100 km/h en 3,4 segundos y una velocidad punta autolimitada electrónicamente de 245 km/h. En cuanto a consumo, homologa un gasto medio WLTP de 18,0 kWh/100 km, y su autonomía media es de 609 kilómetros.

Al probar este segundo Audi eléctrico se repiten algunos patrones del Q6 e-tron, como un interior con mucha calidad y una alta carga tecnológica. Y en lo que se refiere al rendimiento sucede lo mismo, ya que el S e-tron GT es un coche rápido, dinámico, equilibrado y confortable. De hecho, Audi ha reducido recientemente el peso del motor eléctrico del eje trasero en unos diez kilogramos, al rediseñar componentes como el rotor y el estator. Y el resto de elementos, como la dirección, rápida y precisa, o el sistema de frenos, de nuevo desarrollo, mayor tamaño, con discos de acero y pinzas acabadas en color rojo de serie, funcionan de maravilla.