Así va el nuevo Peugeot 3008 Hybrid: un SUV con motor híbrido suave de 136 CV y etiqueta eco

La nueva generación del Peugeot 3008, la tercera del SUV francés, está a la venta con tres tipos de mecánicas electrificadas: como híbrido suave, híbrido enchufable y 100% eléctrico. Anteriormente, ya habíamos tenido ocasión de conducir el eléctrico, bautizado como E-3008, y ahora hemos probado la variante con hibridación suave MHEV, dotado del motor Hybrid 136 y el cambio automático e-DCS6. Esta mecánica marca el acceso a la gama del SUV, desde 38.660 euros con el acabado Allure, o desde 43.160 euros si se configura con la terminación GT.

El coche crece en dimensiones frente a su antecesor, con 454 centímetros de largo por 190 de ancho y 164 de alto, y una distancia entre ejes de 274 centímetros. Por lo tanto, es nueve centímetros más largo, seis más ancho y dos más alto, y su batalla crece seis centímetros. Por lo tanto, el Peugeot 3008 se mantiene como un SUV-C, aunque los responsables de Peugeot califican a este modelo como un SUV Fastback, y es cierto apreciar un parecido en la vista lateral y en la marcada inclinación de la luneta trasera con el 408. Además, este coche también progresa en aerodinámica, ya que anuncia un coeficiente de penetración Cx de 0,28.

Respecto a las matriculaciones, en lo que va de año, las referentes a los SUV-C suponen el 21,82% de las ventas en España, y el 48% de ellas están asociadas a un motor híbrido, ya sea híbrido suave o convencional, según datos de Peugeot. Por ello, la mecánica que hemos probado del nuevo 3008, el Hybrid 136 e-DCS6, es una opción muy interesante dentro de la gama del modelo.

Una mecánica que consta de un motor 1.2 tricilíndrico de gasolina que rinde 136 CV de potencia a 5.500 vueltas y entrega un par máximo de 230 Nm a solo 1.750 revoluciones por minuto, mientras su parte eléctrica está compuesta por un motor eléctrico de 15,6 kW de potencia y se asocia a una batería de 48 voltios con 0,89 kWh de capacidad (0,43 kWh útiles). Acelera de cero a 100 km/h en 10,2 segundos, cuenta con una velocidad máxima de 201 km/h y homologa un consumo combinado WLTP de 5,5 l/100 km. Gracias a un depósito de 55 litros, permite imaginar una buena autonomía. Además, porta la etiqueta medioambiental eco de la DGT, tan buscada hoy en día y que abre algunas puertas en el centro de las grandes ciudades, además de generar ciertos ahorros tanto en impuestos como en el uso cotidiano.

Según los datos de las marcas, este híbrido suave puede realizar hasta el 50% de los trayectos en modo 100% eléctrico en ciudad. Su autonomía en modo 100% eléctrico es de aproximadamente 1 km/h a velocidades inferiores a 30 Km/h, y es cierto que al volante se percibe como el coche sale en modo eléctrico, pero con un leve toque al pedal del acelerador, entra en acción el motor de combustión. De hecho, el sistema se encarga de ir combinando el motor de gasolina y el eléctrico para lograr la máxima eficiencia. Aunque también es cierto decir que la ciudad es donde más se percibe la aportación eléctrica. Otro dato a tener cuenta es que este híbrido suave reduce en un 15% el consumo de combustible en comparación con el motor de gasolina PureTech 130 EAT8; un ahorro que llega hasta el 30% si es en ciudad.

Nos ponemos en marcha

Una vez montados dentro del nuevo Peugeot 3008 encontramos unos asientos cómodos, tanto por amplitud como por sujeción. La calidad percibida es buena, con presencia de algunos materiales sostenibles con un tacto distinto a lo habitual, como el tejido gris claro que reviste gran parte del salpicadero. A nuestro alrededor encontramos multitud de huecos para depositar objetos. Pero, sin lugar a dudas, lo que más destaca en el interior del SUV es el i-Cockpit panorámico, que sigue con el ya habitual volante pequeño de la marca francesa, pero adopta una enorme pantalla curvada de 21 pulgadas, que hace de instrumentación y de central, y que combina con un Head-Up Display sobre el parabrisas. Justo por debajo están los llamados i-Toogles, mandos táctiles que podemos configurar a voluntad. Ahora, el selector del cambio se ubica en la zona del tablero existente a la derecha del volante, de manera que se deja espacio libre en la consola central, donde hay una plataforma de recarga para el móvil, el selector de modos de conducción o el botón del freno de mano.

Todo ajustado y con el cinturón abrochado, nos disponemos a hacer una ruta de unos 200 kilómetros, que principalmente nos llevará por autovía, pero donde también haremos una pequeña parte por entornos urbanos. Maniobrar con el SUV nos resulta sencillo desde un primer momento, ni un giro de volante de más ni de menos. Por lo tanto, encontramos una dirección precisa y suficientemente rápida. Además, las primeras sensaciones es que los 136 CV de potencia mueven correctamente los 1.648 kilogramos de peso del coche, que puede variar ligeramente según el equipamiento. Porque aunque sus prestaciones no destacan por ser especialmente rápidas, con un cero a 100 km/h en 10,2 segundos, con dos personas a bordo, no nos ha resultado un coche torpe ni hemos echado en falta más potencia para lidiar con una incorporación a carretera o una salida complicada de una rotonda. Además, es posible seleccionar el modo Sport, que aporta un toque más enérgico en la entrega de potencia. También están disponibles los modos Normal y Eco.

Ya en carretera y a un ritmo constante de 120 km/h por autovía, el 3008 nos ha agradado por su equilibrio y confort. La suspensión trabaja correctamente y va absorbiendo bien las imperfecciones del asfalto, sin ningún tipo de balanceo. Respecto a su consumo, con esta motorización homologa un gasto medio en ciclo WLTP de 5,5 l/100 km. En nuestra prueba se movió en todo momento entre los seis y los siete litros, sin llegar a las cifras oficiales, pero requeriríamos una prueba de mayor duración para sacar conclusiones claras, pero la sensación que transmite esta tecnología es que con una conducción suave será posible lograr consumos más bajos.

Como decíamos anteriormente, las dos plazas delanteras nos han resultado amplias y confortables, pero las traseras también nos han convencido. Al menos, si tomamos como referencia una altura de 1,70 metros, con generosas dimensiones de anchura, altura y longitud, pues en la segunda fila el hueco para las piernas es enorme y el túnel de transmisión es muy poco invasivo. Respecto al maletero, sea cual sea la mecánica elegida, es de 520 litros, y puede ampliarse hasta 1.480 litros si se abate la segunda fila de asientos.

Las versiones Allure equipan de serie acceso sin llave con bloqueo y desbloqueo de proximidad, climatizador bi-zona, puesto de conducción i-Cockpit con dos pantallas de 10 pulgadas y Peugeot i-Connect, retrovisores exteriores plegables eléctricamente y calefactables con iluminación de cortesía, llantas de aleación de 19 pulgadas o cámara de marcha atrás HD, o sensores de aparcamiento. Mientras, la terminación GT implica volante calefactable, pantalla curvada de 21 pulgadas frente al conductor, mandos táctiles i-Toogles configurables y Peugeot i-Connect Advanced, cargador inalámbrico para móvil de 15 vatios, asistente de luces de carretera adaptativas, control de Crucero Adaptativo con función Stop & Go, cámara de marcha atrás HD y sensores de aparcamiento traseros y delanteros, techo y spoiler trasero Black Diamond, o portón trasero motorizado con acceso manos libres.