Probamos el Fiat E-Doblò de pasajeros, alternativa eléctrica al SUV y al monovolumen

Desde el lanzamiento al mercado del primer modelo hace ya dos décadas, cuatro generaciones del Fiat Doblò han acompañado a los profesionales, pero también a las familias. Y ahora llega la quinta entrega, completamente nueva, hermanada técnicamente con los modelos de Citroën (Berlingo y Berlingo Van), Opel (Combo Life y Combo Cargo), Peugeot (Rifter y Partner) y Toyota (Proace City Verso y Proace City), y que, como estos, también se fabrica en la factoría de Stellantis en Vigo, tanto con motores de combustión como su versión 100% eléctrica E-Dobló. Es decir, doble novedad, porque es la primera vez que se produce en nuestro país, pero también la primera en que hay un Doblò de mecánica eléctrica; que es precisamente el que hemos probado por los alrededores de la planta gallega.

Estamos ante un vehículo que se ofrece tanto en versión comercial como para el transporte de pasajeros, pues hay tres configuraciones diferentes: Van, Crew Cab y Combi, sumando cuatro siluetas y dos longitudes de carrocería. Más una amplia oferta mecánica donde elegir. Porque, por ejemplo, tenemos dos opciones en diésel, ambas de 1,5 litros de cilindrada: 100 CV y 130 CV de potencia, la menos potente solo con cambio manual y la más poderosa con opción a elegir entre caja manual y automática de ocho velocidades. También hay un propulsor de gasolina tricilíndrico 1.2 de 110 caballos, mientras que la variante 100% eléctrica E-Dobló dispone de un motor de 100 kW (136 CV) y una batería de 50 kWh, homologando una autonomía de 280 kilómetros en ciclo combinado WLTP.

Como buen vehículo de trabajo, el Dobló comercial ofrece diferentes elementos que lo convierten en un compañero versátil y flexible. Destacan los sistemas Magic Features, entre los que figura el Magic Cargo, que aumenta 0,5 metros cúbicos (500 litros) el volumen de carga y permite transportar objetos de hasta 3,4 metros de longitud. Y también se puede contar con un espacio adicional bajo el asiento del pasajero para el transporte de materiales delicados. Por otro lado tenemos el Magic Mirror, un espejo retrovisor digital que puede funcionar como espejo propiamente dicho, darnos una vista completa del área del punto ciego o actuar como cámara de visión trasera al maniobrar.

Asimismo, también presenta el sistema Magic Plug, que solo está disponible para la versión E-Dobló eléctrica y permite utilizar la energía de la batería de propulsión del vehículo para accionar distintas herramientas eléctricas de trabajo, como un taladro o una sierra de calar, pero también pequeños electrodomésticos, máquinas cortacésped...

Y hay otro dos sistemas Magic Features, aunque estos solo disponibles para la versión Combi de pasajeros: el Magic Top, que es un techo de cristal panorámico que cuenta con una repisa transparente longitudinal para almacenar objetos, más un compartimento trasero al que puede accederse desde el interior o desde el maletero; y el Magic Window, que permite abrir únicamente la luneta trasera para acceder al maletero, sin necesidad de levantar todo el portón.

En lo que respecta a las capacidades de transporte, las versiones de combustión interna alcanzan la tonelada de carga, mientras que el E-Dobló se queda en los 750 kilos. Y el volumen máximo de carga es de 4,4 metros cúbicos. Además, la carrocería Crew Cab permite una modularidad única entre los asientos y el espacio de carga, gracias a una mampara deslizante que sirve para modular la zona dedicada al transporte o la zona reservada a los asientos de los pasajeros, en función de las necesidades.

Sin embargo, la versión de pasajeros está solo disponible como E-Dobló 100% eléctrica, y exclusivamente en versión corta, con 4,4 metros de longitud. En el interior, la segunda fila está compuesta por tres asientos independientes, que pueden plegarse para crear un suelo plano que aumenta la capacidad de carga de un modo sencillo, y así transportar elementos de gran tamaño como puedan ser bicicletas, que caben sin necesidad de desmontarlas.

Su batería homologa hasta 280 kilómetros de autonomía media, y como puede cargarse con corriente continua a un máximo de 100 kW, para alcanzar el 80% se necesitan solo 30 minutos. Además, dispone de hasta 17 sistemas de ayuda y asistencia a la conducción, entre los que destacan el reconocimiento automático de señales de tráfico, el Active Safety Brake, el Lane Keeping Assist, el Head-pp Display o el Grip Control en las versiones Van.

Al volante del E-Dobló Combi

Durante nuestra prueba de conducción solo pudimos ponernos a los mandos de la variante de pasajeros, disponible únicamente como E-Dobló eléctrico. Y lo primero que llama la atención al acomodarse en el nuevo vehículo es su cercanía a un turismo más tradicional, con un confort de marcha muy logrado al que se suman virtudes como la gran visibilidad que ofrece por sus amplias zonas acristaladas, la elevada posición de conducción, la luminosidad interior o la amplitud inmensa de la que disfrutamos a nuestro alrededor, al aprovecharse casi todo el espacio de una carrocería alta y con formas bastante cuadradas.

Además, como en la segunda fila los tres asientos son individuales e idénticos, tres adultos pueden acomodarse detrás, disponiendo de mucho espacio para las piernas, e incluso de bandejas tipo avión montados en los respaldos de los asientos delanteros.

El motor eléctrico, por su parte, rinde bien para mover un vehículo de este tipo y tamaño, permitiendo viajar en silencio y con buenas recuperaciones a cualquier velocidad, aunque la máxima que podremos alcanzar es de 130 km/h, una limitación electrónica ideada para alargar al máximo la autonomía. Y al volante, el conductor puede elegir entre tres programas de funcionamiento: Normal, Eco y Power. Cada modo modifica la respuesta de la mecánica para optimizar las prestaciones o la eficiencia, recomendándose el Normal para la mayoría de las situaciones del tráfico, el Eco para potenciar el ahorro de energía y la autonomía entre recargas, y el Power para obtener la máxima potencia.

Nos ha parecido una alternativa más que interesante para las familias, toda vez que los vehículos monovolumen están ya casi extintos, y los SUV no son siempre lo amplios y versátiles que espera, por ejemplo, un matrimonio con tres hijos. Porque el Fiat E-Dobló, siempre que un vehículo eléctrico se adapte a nuestras necesidades, cumple con muchos de los requisitos de las familias numerosas, como espacio interior, un amplio maletero que admita mucho equipaje, multitud de huecos para almacenaje... Y también podrá adaptarse a aquellos que tengan un estilo de vida más aventurero o deportista, pues gracias a su altura libre al suelo más elevada puede circular por caminos sin problema, y albergar por ejemplo bicicletas, sin necesidad de desmontar la rueda delantera: cargarlas en el coche es cuestión de segundos.

Con todos los descuentos, y tras aplicar también la rebaja del plan Moves, el E-Dobló eléctrico de pasajeros tiene un precio de entrada de 29.100 euros. Por su parte, el Fiat E-Dobló Furgón arranca en 31.300 euros, mientras que si el cliente se mantiene fiel a los motores de combustión, el Dobló 510 Furgón más asequible tiene un precio de partida de 20.950 euros.