¿Somos los españoles más de 'Lamborghini' que de transporte público para ir al trabajo?

Arval, la compañía especializada en renting de vehículos de servicio completo y soluciones de movilidad, acaba de publicar la segunda edición de su informe sobre la movilidad de los empleados en España y el resto de Europa, realizado por el Arval Mobility Observatory y que analiza las prácticas actuales de desplazamiento tanto en viajes al trabajo como de negocios, así como las expectativas de los trabajadores en torno a las ofertas de movilidad de sus empresas, donde el estudio descubre un significativo margen de mejora en cuanto a la adopción de nuevas soluciones de transporte para la movilidad corporativa.

Y como en la primera edición del trabajo, publicada a comienzos del pasado año, los autores dibujan primero el escenario de los desplazamientos por motivos laborales, en base a 2.900 entrevistas, centradas en profesionales de compañías privadas de más de 100 empleados, en seis países de nuestro continente: Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Países Bajos y España. En cuanto al perfil del colectivo encuestado, un 63% eran hombres y un 37% mujeres; un 65% tenían de 25 a 49 años, un 31% de 50 a 60 años y un 4% de 18 a 24 años; el 48% tenían hijos y el 52% no; y, en cuestión de residencia, un 53% vivían en ciudades, un 32% en pueblos o a las afueras de las ciudades, y un 15% en zonas rurales.

En nuestro 'Lambo' o en autobús

Sorprendía recientemente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al declarar que los españoles debíamos usar "más transporte público y menos Lamborghini", y aunque la elección para su ya histórica frase de una marca tan extrema, tanto por precio como por la anecdótica implantación del fabricante italiano en el parque móvil nacional, desvirtuó completamente el mensaje, el líder socialista parecía abogar por los medios colectivos en detrimento del vehículo privado. ¿Somos los españoles más de Lamborghini, por seguir la hipérbole presidencial, que de transporte público? Al respecto, el estudio de Arval parece confirmar que el vehículo privado, incluyéndose ahí el vehículo de empresa, sigue dominando los desplazamientos al centro de trabajo, y también los viajes de negocios, lo que refleja, en palabras de los autores, "una estructura de movilidad aún centrada en el vehículo personal".

Pero mientras que el vehículo privado es el medio elegido por los españoles como medio de transporte en los trayectos domicilio-trabajo por el 64% de los encuestados, en el conjunto de Europa es un 71%. Por el contrario, mientras que a nivel continental el transporte público es elegido por un 24% de los empleados en los desplazamientos domicilio-trabajo, en España es el 27%, de manera que el informe pone de manifiesto un dato: los españoles aún somos más de Lamborghini (coche privado) que de transporte público, pero no tanto como nuestros vecinos europeos.

En cuanto al resto de medios de transporte utilizados en esos desplazamientos, el 13% se mueve a pie para ir o volver del trabajo (13% también en Europa), el 9% emplea vehículos de dos ruedas como motos, bicicletas o patinetes (20% en Europa) y solo el 6% recurre a vehículos compartidos o con chófer, como taxis, carsharing o carpooling (8% en Europa). La suma de todos los medios supera el 100%, pues concretamente en la encuesta española alcanza un total del 119%, y aunque eso no parece tener sentido, se debe a una razón sencilla: en muchas ocasiones, los trabajadores usan más de un medio de transporte en sus desplazamientos. En concreto, la media de medios de transporte utilizados por los empleados españoles es de 1,3, frente a 1,5 en el conjunto continental. Y al comparar con los datos del anterior estudio, Arval señala que el peso del vehículo privado, del transporte público o del desplazamiento a pie no varía, mientras que el uso de vehículos de dos ruedas o de vehículos compartidos sí cae de manera relevante en nuestro país.

El informe sobre la movilidad de los trabajadores también se centra en los factores que llevan a elegir uno u otro medio de transporte, y en el caso español la razón más determinante es la rapidez del desplazamiento, motivo señalado el 39% de las veces. Por detrás se cita la comodidad (30%), la facilidad de acceso a ese medio desde casa o desde el trabajo (28%), la mayor economía del viaje (21%) o que sea un desplazamiento más directo (20%), resultados que están muy en línea con el de los otros países analizados.

Y en los viajes de negocios, la tendencia es similar, pues un 41% de los empleados españoles recurre al vehículo privado o de empresa, frente al 47% en Europa. El avión o el tren también tienen una presencia destacada.

¿Pero es así en todos los rangos de edad? Como resultado de la encuesta, el estudio concluye que los trabajadores más jóvenes, aquellos con edades entre 25 y 30 años, tienen sus propios criterios para sus desplazamientos, pues, para ellos, el impacto ambiental estaría por delante a la hora de elegir cómo llegar al trabajo o a casa, mientras que en empleados de mayor edad la rapidez, la comodidad o la seguridad siguen siendo claves al elegir cómo desplazarse. Y, en cualquier caso, la preocupación por el impacto medioambiental tiene menor peso entre los españoles que en la media europea.

Teletrabajo: menos, pero subiendo

También tiene menos peso en España el teletrabajo que en el resto de territorios estudiados, pues si en nuestro país solo el 54% trabaja a distancia al menos un día a la semana, en Europa es ya el 60%; aunque el informe de Arval indica que en poco más de un año, la proporción en España ha crecido dos puntos: del 52% a comienzos del 2023 al 54% actual. Aunque, sobre el colectivo completo de empleados, la media de días de teletrabajo a la semana ha bajado de 1,7 a 1,6 días en España (en el mismo periodo, en Europa ha disminuido de 1,9 a 1,7 días). Y si nos centramos solo en los empleados que disfrutan de teletrabajo, el promedio semanal en España es de 3,0 días, frente a los 2,9 en el conjunto europeo.

El estudio del Arval Mobility Observatory pone mucha atención también en el acceso y el uso de soluciones de movilidad corporativa, donde España se queda atrás porque solo el 46% de las empresas ofrecen, al menos, un servicio, cuando en el resto de Europa la proporción aumenta al 65%. En nuestro país, las empresas ofrecen principalmente soluciones tradicionales como plazas de aparcamiento y vehículos con motor de combustión, o una contribución en los gastos de transporte público; y la encuesta detecta un aumento en la aplicación de ayudas en el coste del consumo del vehículo y los alquileres a corto plazo, aunque la satisfacción de los empleados españoles con la movilidad corporativa es baja, en contraste con otros países europeos, donde la oferta es notablemente mayor.

Al respecto, un 62% de los empleados, tanto a nivel nacional como europeo, cree que la oferta de movilidad es un factor importante en la elección de una nueva empresa. Los coches de empresa y los presupuestos de movilidad se mencionan como los incentivos más atractivos, y los llamados mobility hub cobran fuerza como una opción destacada por muchos en España, incluso por encima de Europa. De ahí que los autores del estudio opinen que la oferta de movilidad puede ser un factor diferenciador importante para las empresas que busquen atraer y retener talento.

Sobre las expectativas de cambio en esta materia, los empleados españoles se declaran menos optimistas sobre la futura expansión de las ofertas de movilidad corporativa, aunque cuatro de cada 10 esperan mejoras en los próximos cinco años, y principalmente en dos frentes: el desarrollo en la infraestructura de transporte público y la mejora de su vehículo personal. Pero también existe una creciente demanda de soluciones innovadoras como el carsharing y las aplicaciones de movilidad, especialmente entre los más jóvenes.

Para Omar Sánchez, responsable del Arval Mobility Observatory España, "el informe sobre la movilidad de los empleados identifica en esta segunda edición una clara oportunidad para que España avance en el ámbito de la movilidad corporativa. Las empresas que tomen la iniciativa no solo mejorarán la satisfacción de sus empleados, sino que también fortalecerán su posicionamiento a la vez que contribuyen a una movilidad más accesible y sostenible". De hecho, y como recuerda Ignacio Martínez-Avial, CEO de BNP Paribas Real Estate España, "¿cómo llegar?" es lo más buscado en Google antes de aceptar un trabajo. "El sueldo, la posición, las responsabilidades o el estatus que nos ofrezcan deberán compensarnos si la respuesta a la pregunta no nos ha gustado", explica Martínez-Avial, quien concluye: "Cada vez más, vemos edificios de oficinas que incorporan cargadores para vehículos eléctricos, flotas propias de coches, bicis o patinetes para ofrecer un servicio de sharing eficiente a sus inquilinos. Estos servicios se han convertido en un ancla relevante para inversores e inquilinos, pero también para el talento, cuando busque respuesta a la pregunta ¿cómo llegar?".