Lo último de Lexus es el LBX, un pequeño SUV dotado de mecánica híbrida

Uno de los segmentos de mercado más boyantes es, sin duda, el de los llamados SUV-B, o SUV urbanos, modelos que a pesar de esa denominación, admiten una utilización más allá de los límites de la ciudad, incluso como pequeño vehículo familiar. Es esa polivalencia una de las razones del éxito de modelos como el SEAT Arona, el Peugeot 2008, el Renault Captur o el Ford Puma, por citar solo cuatro de los muchos ejemplos, aunque la oferta se contrae bastante a medida que escalamos en precio y nos internamos en la parcela prémium de esos SUV-B, donde nos encontramos básicamente al Audi Q2, al DS 3 o al Mini Countryman, ya agonizante a la espera de su relevo.

Y a estos últimos se sumará muy pronto un nuevo representante, pues a comienzos del próximo año será lanzado en Europa el nuevo Lexus LBX, con el que la prestigiosa marca de Toyota entra en un nuevo segmento donde antes no participaba, pues su gama SUV terminaba por abajo en el UX, de talla algo mayor: 4,50 metros de largo. Y es que el LBX, que emplea una evolución de la plataforma GA-B utilizada en los Toyota Yaris y Yaris Cross, se conforma con 4,19 metros de longitud (un centímetro más que el Yaris Cross), mientras que la anchura es de 1,83 metros y la altura, de 1,55 metros. La distancia entre ejes, una de las cotas clave en un vehículo, es de 2,58 metros, a caballo entre la batalla de los citados Yaris Cross (2,56 metros) y Lexus UX (2,64 metros).

Pero el LBX, que toma su nombre de Lexus Breakthrough Crossover (podríamos traducirlo como "crossover Lexus de ruptura") y es el segundo coche de la marca bautizado con tres letras tras el mítico superdeportivo LFA, no destaca precisamente por la capacidad de su maletero, que anuncia 332 litros de volumen en el caso de las variantes de tracción delantera. Es de suponer que en los LBX con tracción total e-Four, que integran un segundo motor eléctrico en el eje posterior, esa capacidad para equipaje sea aún inferior, lo que deja al modelo de Lexus por debajo de rivales directos, como los citados Q2 (405 litros con tracción delantera y 355 con tracción Quattro) o DS 3 (350 litros).

De hecho, el LBX se convierte en el Lexus más pequeño hasta la fecha, y en el primer coche de la marca que ha sido desarrollado pensando principalmente en Europa, donde podría llegar a convertirse en uno de sus modelos más vendidos, pues la firma nipona quiere conquistar clientela más joven y usuarios que hasta ahora no se habían planteado la compra de un Lexus, y satisfacer la demanda de quienes solo buscan un coche pequeño o un segundo vehículo. De ahí el término ruptura entre las siglas de su nombre comercial, aunque los responsables de la compañía explican que en otros apartados será tan Lexus como cualquier otro, refiriéndose al lujo o al concepto Omotenashi, inspirado en la tradicional hospitalidad japonesa.

Y para que sus futuros propietarios disfruten de un producto exclusivo y personal, del LBX se ofrecerán cuatro estilos distintos, al margen de la versión básica. Porque en lugar de conformar la gama mediante diferentes niveles de equipamiento o características de confort, cada estilo del nuevo SUV urbano de Lexus se distinguirá por ser más o menos refinado, dinámico o deportivo a través de detalles de estilo, colores, texturas o acabados.

Además, en la casa japonesa han tratado de ser menos continuistas a nivel estético, y eso se aprecia en la nueva configuración del frontal, que rompe la tradicional parrilla de doble punta de flecha, habitual en sus productos de la última década, para abrir una nueva era. Koichi Suga, director general de Diseño de Lexus, explica que han "deconstruido la parrilla de doble punta de flecha para dar lugar a un nuevo diseño. Hemos conseguido crear un frontal con una nueva identidad que es completamente distinta de la anterior, y que sin embargo sigue identificándose instantáneamente como un Lexus". La parrilla se ha unificado en una única forma trapezoidal, situada bajo una estrecha abertura que subraya de lado a lado el borde delantero del capó, conectando así sus afilados faros. Y aunque no se anuncia el coeficiente de penetración Cx, también ofrece una mayor eficiencia aerodinámica, pues el aire fluye mejor por encima y por los lados del vehículo. Además, con esta nueva disposición, la forma en L de las luces mira ahora hacia fuera, en lugar de hacia dentro.

En la vista lateral, se aprecia que los pilares delanteros, o pilares A, se han desplazado lo más posible hacia atrás, de manera que el capó parece más largo, lo que transmite deportividad. Y los pasos de rueda, grandes y prominentes, acogen llantas de hasta 18 pulgadas. Por su parte, la zona posterior del nuevo vehículo desplaza la matrícula muy abajo, hasta el paragolpes, lo que da protagonismo al nombre de la marca sobre la despejada superficie del portón trasero.

En cuanto a los colores de carrocería, los LBX dotados de los estilos Emotion y Cool ofrecerán un acabado exterior bitono, que combinará las alternativas de color elegidas con un techo negro brillante en contraste.

Construcción reforzada

Aunque el LBX comparte la plataforma con modelos más económicos de Toyota, su carrocería está más reforzada, empleándose adhesivos estructurales y soldaduras especiales, así como nuevos soportes y refuerzos con funciones específicas. Pero, según Lexus, el peso del vehículo se ha mantenido a raya con el uso de materiales ligeros, como aluminio en el capó y resina moldeada en los pasos de las ruedas, algunos paneles y las partes inferiores de las puertas; y también se han utilizado materiales estampados en caliente, muy resistentes a la vez que ligeros, en los pilares centrales y en los refuerzos de los paragolpes.

Y en lo que se refiere a la suspensión, todas las versiones incorporan un esquema independiente de tipo MacPherson en la parte delantera, mientras que para el tren trasero se recurre a distintas soluciones en función del tipo de tracción: en las versiones con tracción delantera se emplea un eje torsional trasero, mientras que el LBX con tracción total apuesta por una configuración específica, de doble horquilla, compatible con la presencia del segundo motor eléctrico. Una tracción total E-Four que actúa solo en determinadas situaciones, como al acelerar desde parado, al tomar curvas o al circular por superficies poco adherentes, tres casos en los que el sistema distribuye una parte de la potencia automáticamente a las ruedas traseras.

En cuanto al conjunto motopropulsor, el sistema híbrido Lexus autorrecargable del LBX es de nueva generación, pues parte de un motor 1.5 de gasolina de tres cilindros, como en la gama Yaris de Toyota, pero con componentes en el sistema híbrido que han sido objeto de un rediseño sustancial para mejorar la eficiencia y reducir las pérdidas, el peso y el tamaño. Y está equipado con una nueva batería de níquel metal hidruro bipolar (NiMH) que hace posible un mayor apoyo del motor eléctrico en aceleración y amplía la capacidad de conducción del vehículo en modo eléctrico. Gracias a todo eso, frente a los 116 CV que rinde esta mecánica en los Toyota Yaris, en el Lexus LBX entrega 136 CV de potencia.

Y, según Lexus, la mecánica híbrida ha sido nuevamente ajustada para conseguir un mayor disfrute al volante, ya sea circulando por ciudad o por carreteras de montaña, pues se ha trabajado para lograr una sensación de aceleración más lineal, con mayor paralelismo que hasta ahora entre el sonido del motor y el ritmo de ganancia de velocidad. Además, las mejoras introducidas permitirán conducir en modo totalmente eléctrico a velocidades superiores y en mayores distancias, lo que redundará en una eficiencia superior.

La condición de vehículo de lujo del nuevo LBX ha llevado a implementar otras medidas para reducir el ruido y las vibraciones; como la instalación en el motor de gasolina de un eje equilibrador que reduce la vibración. Además, se ha prestado especial atención a las puertas, donde se han instalado unas planchas fonoabsorbentes para suprimir el ruido de alta frecuencia y potenciar el de baja frecuencia. Y para contrarrestar las vibraciones y el ruido aerodinámico del techo durante la circulación, se ha incorporado un aislante de alta amortiguación junto con un panelado silenciador. Otras soluciones a destacar son el sellado de los bordes del capó y los nuevos forros, planchas, molduras y espumas de aislamiento y absorción del ruido colocados en puntos clave del vehículo. E incluso debajo del vehículo, donde unos adhesivos estructurales amortiguantes ayudan a reducir el ruido y las vibraciones, al tiempo que refuerzan la rigidez del vehículo.

Un interior más cuidado

Más pequeño, pero con la misma calidad prémium, según la marca japonesa. Por eso se ha puesto cuidado en la selección de tapicerías y acabados: además de cuero de semianilina de alta calidad, las opciones incluyen un interior confeccionado con materiales de origen no animal, empleándose cuero sintético y otros materiales de origen similar para los revestimientos de los asientos, el volante, la palanca de cambios y los paneles de las puertas. El LBX cuenta también con inserciones interiores de carbón Tsuyusami, creadas mediante una técnica que forma una película continua, usando múltiples capas, para transmitir una apariencia texturizada con sensación de profundidad. Y la iluminación ofrece un espectro de 50 opciones de color, clasificados en temas que evocan distintos estados de ánimo.

El cuadro de instrumentos, totalmente digital, es una pantalla de 12,3 pulgadas, y la disposición, el diseño de los indicadores y los datos mostrados cambian en función del modo de conducción seleccionado, pudiéndose personalizar también según las preferencias de cada usuario. Y en algunas versiones se ofrecerá un Head-up Display a color, que proyecta la información de conducción sobre el parabrisas. Y en el centro del salpicadero encontramos la pantalla táctil integrada de 9,8 pulgadas del sistema Lexus Link Connect, que cuenta con navegación en la nube y optimiza la planificación de los trayectos con información en tiempo real sobre el estado del tráfico. Además, tanto el conductor como el pasajero delantero pueden usar instrucciones de voz precedidas por el comando "Hey Lexus".

Por otro lado, se podrán integrar smartphones mediante conexión inalámbrica o por cable con Apple CarPlay, y solo mediante cable con Android Auto. Otra opción práctica es la posibilidad de usar una llave digital, compatible con dispositivos Apple y Android, y que permite al usuario emplear su smartphone para desbloquear el vehículo y ponerlo en marcha; y sin necesidad de sacar el teléfono del bolsillo o del bolso, pues basta con llevarlo encima. Además, la llave digital se puede compartir cuando queremos que otras personas accedan al vehículo o lo conduzcan.

Y el LBX, como los más recientes modelos de Lexus, permitirá instalar actualizaciones de software de forma inalámbrica (Over The Air) para los sistemas multimedia y de seguridad, de modo que los usuarios podrán disfrutar de mejoras o novedades sin tener que acudir al taller de Lexus.

Un coche, cuatro estilos

Como explicábamos al inicio, el LBX dará a elegir entre cuatro estilos de personalización, al margen del modelo base, que ya cuenta con tapicería de origen no animal: para quienes priorizan el refinamiento, Elegant (elegante) y Relax (relajante), y para los que buscan algo más de deportividad, Emotion (emocionante) y Cool (fresco). Los LBX Emotion y Cool destacan por su pintura bitono y sus llantas de aleación de 18 pulgadas con acabado mecanizado, mientras que las versiones Elegant y Relax presentan un acabado de un solo tono en la pintura exterior y llantas de 18 pulgadas con acabado brillante.

En cuanto al diseño del habitáculo, el estilo Emotion apareja una tapicería en cuero sintético perforado con detalles rojos y costuras contrastadas en asientos, consola central y paneles de puertas, mientras que el LBX Cool, que Lexus define como la alternativa más dinámica, presenta un interior en Ultrasuede y cuero bitono negro/gris oscuro, con costuras y detalles cobrizos. Por su parte, el LBX Elegant luce cuero sintético en tono marrón oscuro o marrón arena, en los paneles de las puertas, el cuadro de instrumentos y el entorno de la consola central, así como en la tapicería de los asientos. Y, finalmente, el estilo Relax se puede escoger en cuero semianilina caramel o negro, con costura Tatami.

En cuando a las opciones de equipamiento, algunas ya citadas, destacan el cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, el Head-up Display, el sistema de aparcamiento remoto, la llave electrónica Digital Key, el equipo de sonido envolvente Mark Levinson de 13 altavoces, el purificador de aire nanoe-X de Panasonic y el portón trasero eléctrico.

Y el LBX presumirá de la última evolución del conjunto de funciones de seguridad Lexus Safety System+, destacando entre otros dispositivos el sistema de seguridad de precolisión con asistencia al giro en cruces, el control de crucero con radar dinámico, el sistema de mantenimiento de la trayectoria, el reconocimiento de señales de tráfico, el sistema de apertura eléctrica de las puertas e-Latch con asistencia de salida segura, un monitor de fatiga o distracción del conductor, sensores inteligentes de aparcamiento con frenado automático, alerta de tráfico cruzado posterior, control de ángulo muerto, alerta de tráfico cruzado frontal o el monitor de visión panorámica de 360 grados para ayudar en maniobras de aparcamiento. Y gracias al estacionamiento remoto, podremos aparcar el vehículo en plazas muy ajustadas, pues el conductor puede colocar el vehículo desde fuera, mediante su smartphone.