Así es el Mercedes-Benz GLC Coupé, con motores muy eléctricos de gasolina y diésel

El pasado año Mercedes-Benz presentó la segunda generación del GLC, su exitoso SUV de talla media, y meses después, en octubre, ya nos poníamos a su volante en las cercanías de Madrid, coincidiendo con el inicio de las entregas. Pero la gama estaba aún incompleta, pues faltaba por llegar la variante de aspecto más dinámico, un GLC Coupé que por fin esta semana hemos conocido, y que desembarcará en nuestro país en julio, con una oferta mecánica similar a la vista en el GLC convencional, denominado GLC SUV por la marca, y precios parecidos pero todavía no confirmados oficialmente.

En cuanto al tamaño, es 31 milímetros más largo y 5 más alto que su predecesor, siendo sus dimensiones principales de 4,76 metros de longitud y 1,89 de anchura. Y también el volumen del maletero es mayor que antes, pues el GLC Coupé homologa 545 litros (45 litros más que el GLC Coupé precedente) con las cinco plazas en uso y hasta 1.490 litros (90 litros de ganancia) si abatimos por completo la segunda fila. Eso en las versiones Mild Hybrid, pues en los híbridos enchufables esas cifras son respectivamente de 390 y 1.335 litros. El portón trasero Easy-Pack, de serie, se abre o cierra cómodamente pulsando un botón con la llave de contacto, el interruptor en la puerta del conductor o el asidero de desbloqueo en el mismo portón.

Y el GLC Coupé recién desvelado acentúa su silueta deportiva y musculosa, en la que destacan los raíles del techo pintados en negro y los estribos opcionales. Además, se ha reducido la resistencia al viento, pues el coeficiente mínimo de resistencia aerodinámica del GLC Coupé es realmente bajo: Cx de 0,27, cuando su predecesor ya presumía en su día de un estupendo Cx de 0,30.

En cuanto al interior, lo más novedoso es el tablero de instrumentos dividido horizontalmente en dos secciones y una pantalla central en formato vertical que parece flotar sobre ellas. Y en la firma de Stuttgart insisten en el notable cuidado del confort acústico, ya que se ha reducido tanto el ruido de rodadura como el del viento, de manera que supera a su predecesor. Asimismo, incorpora la última generación del sistema de infoentretenimiento MBUX, con dos grandes pantallas y navegación a tamaño completo. Por otro lado, y siguiendo con el interior, el asistente de voz Hey Mercedes es aún más receptivo, y sus capacidades de aprendizaje han sido optimizadas. Por ejemplo, la función MBUX Smart Home convierte el GLC Coupé en un centro de control móvil para el hogar conectado en red; y el asistente de voz MBUX se amplía ahora con un nuevo servicio Mercedes me: la guía de viajes acústica Tourguide. Un MBUX que integra plenamente los servicios de los principales proveedores de música en streaming, incluidos ajustes personalizados y favoritos, mientras que el sistema de sonido surround Burmester opcional dispone de 15 altavoces de alta calidad y una potencia total de 710 vatios.

Motores más electrificados

El nuevo GLC Coupé estará disponible solo con propulsores electrificados. Las unidades con hibridación suave Mild-Hybrid incluyen un alternador arrancador integrado (ISG) de segunda generación y un sistema eléctrico de a bordo de 48 voltios. El alternador arrancador integrado de las variantes Mild-Hybrid ayuda al motor de combustión, especialmente a regímenes bajos, pues complementa al turbocompresor para proporcionar una potencia superior. El sistema eléctrico de a bordo de 48 voltios soporta funciones híbridas como la marcha por inercia, la sobrealimentación y la recuperación de energía, aumentando así la eficiencia. Los motores también arrancan rápida y cómodamente con la ayuda del ISG, con la función de arranque/parada apenas perceptible para el conductor.

Si el cliente prefiere híbridos suaves de gasolina, podrá escoger entre el GLC 200 4Matic, de 204 CV, 320 Nm de par máximo y un consumo medio de 7,1 l/100 km, y el GLC 300 4Matic, de 258 CV, 400 Nm de par y un consumo medio desde 7,3 l/100 km. Pero también podemos pedir diésel con hibridación suave, y en ese caso hay otras dos alternativas: el GLC 220 d 4Matic, de 197 CV, 440 Nm de par y consumos medios a partir de 5,1 l/100 km, y el GLC 300 d 4Matic, de 269 CV, 550 Nm y gasto medio desde 5,5 l/100 km

Pero hay otras tres variantes de motor más, estas con tecnología híbrida enchufable y con autonomía eléctrica mejorada, pues el nuevo programa de conducción híbrida reserva el modo de conducción eléctrica para los tramos más adecuados del recorrido. Por ejemplo, da prioridad a la conducción eléctrica en trayectos urbanos, independientemente de si se trata de una versión de gasolina o diésel. En concreto, hay un híbrido diésel enchufable, el GLC 300 de 4Matic, con 197 CV procedentes de la parte de combustión y otros 100 kW (136 CV) de la parte eléctrica, lo que da como resultado 335 CV de potencia combinada y 750 Nm de par máximo, siendo el consumo medio homologado de 0,4 l/100 km, y la autonomía media máxima sin emisiones, de 130 kilómetros, gracias a la batería de 31,2 kW, la misma que en los otros híbridos enchufables.

Las otras dos versiones de tecnología PHEV son de gasolina: el GLC 300 e 4Matic, con 313 CV y 550 Nm de rendimiento combinado, consumo medio de 0,5 l/100 km y hasta 131 kilómetros de autonomía media; y el GLC 400 e 4Matic, con 381 CV y 650 Nm de rendimiento conjunto, gasto medio de 0,5 l/100 km e idéntica autonomía.

En ese sentido, otro de los avances incorporados es el simulador de autonomía, pues el simulador de alcance del nuevo GLC Coupé tiene en cuenta factores externos como la temperatura ambiente, el perfil de conducción y las necesidades de calefacción o refrigeración. Y los GLC Coupé híbridos enchufables puede circular en modo totalmente eléctrico, libre de emisiones incluso a 140 km/h.

La batería de alto voltaje es un desarrollo propio de Mercedes-Benz, y partiendo de vacío, una recarga completa con el cargador opcional de corriente continua de 60 kW se completa en unos 30 minutos. Además, el GLC Coupé está equipado de serie con un cargador trifásico de corriente alterna de 11 kW.

Por otro lado, tanto la suspensión deportiva como la dirección de desmultiplicación variable son de serie en el nuevo GLC Coupé, y son nuevos el sistema de eje delantero de cuatro brazos y una suspensión trasera independiente multibrazo con tirante trasero. Asimismo, la suspensión neumática Airmatic tiene amortiguación regulable en compresión y rebote. Y sin abandonar el chasis, decir que con la dirección opcional en el eje trasero, combinada con una relación de dirección más directa en el eje delantero, el ángulo de giro de las ruedas traseras es de hasta 4,5 grados, y eso reduce el radio de giro en 90 centímetros, hasta 10,9 metros.

El equipamiento de serie incluye la línea exterior Avantgarde con llantas de aleación de 18 pulgadas y el paquete cromado. Las versiones híbridas ruedan sobre neumáticos de perfil mixto con anchuras diferentes en los ejes delantero y trasero. La línea AMG Line está disponible con neumáticos de perfil mixto de 19 o 20 pulgadas y pasos de rueda en el color del vehículo. También se ofrecen como equipamiento opcional estribos para facilitar el acceso y, a partir del AMG Line, el paquete Night.

Asimismo, el paquete opcional Energizing Plus consta de hasta siete programas de confort, y se encarga de crear una atmósfera más adecuada en el interior, por ejemplo, revitalizante en caso de fatiga o relajante en caso de un elevado nivel de estrés. Por otro lado, el Energizing Coach sugiere un programa adecuado de fitness o bienestar basado en los datos del vehículo y del viaje; y también incluye información sobre las constantes vitales y el bienestar actual en su algoritmo inteligente si el conductor lleva una pulsera de actividad o un dispositivo compatible.

El paquete Air-Balance también forma parte del paquete Energizing Plus, y ofrece una experiencia aromática individual y sutil en el interior, según las preferencias personales y el estado de ánimo del conductor. Al mismo tiempo, el aire exterior e interior se ioniza y filtra. La función Energizing Air Control supervisa de forma inteligente la calidad del aire en el interior del vehículo, para lo cual incluye sensores de calidad del aire y de polvo fino. En el momento en que se supera alguno de los valores límite definidos se conmuta el aire acondicionado al modo de aire interior circulante.

Por último, el nuevo GLC Coupé también es apto para conducción todoterreno, y cuenta con varias características y sistemas nuevos diseñados para ese uso. El equipo de serie incluye un programa Offroad y la función DSR (Downhill Speed Regulation). Las versiones híbridas enchufables ofrecen una conducción todoterreno totalmente eléctrica, lo que permite una conducción altamente precisa y controlada incluso en terrenos muy accidentados. Además, como el motor eléctrico sólo consume energía cuando realmente está moviendo el vehículo, la demanda de potencia será baja a velocidades normales fuera de carretera. Como resultado, es posible un largo tiempo de conducción totalmente eléctrica incluso en terrenos exigentes.

Y en modo todoterreno, el GLC Coupé disfruta de la cámara de 360 grados con función de 'capó transparente'. El visualizador central muestra una vista virtual de la zona situada por delante y por debajo del vehículo, incluidas las ruedas delanteras y su orientación, permitiendo al conductor reconocer antes y con mayor facilidad obstáculos como piedras grandes, troncos o baches profundos.