Así es el nuevo Z06, un Corvette tecnológico, más aerodinámico... y con 670 caballos

Aunque suene redundante, empezar por el principio siempre es lo más conveniente, y en este caso empezar por el principio significa echar la vista atrás 58 años para encontrar en la historia del legendario Corvette (nacido en 1953) la primera versión Z06, creada a partir de la segunda generación. Corría el año 1963, y aquel Corvette C2 Z06 extraía 360 CV de su motor V8 L84 5.4 OHV, asociado a una transmisión manual de cuatro marchas. Para la época, una mecánica descomunal. Y es curioso porque no volvió a haber un Z06 hasta el 2001, pues ni el tercer Corvette, ni la cuarta generación dieron pie a esta radical variante. Pero sí el Corvette C5, que de 2001 a 2004 ofreció una versión Z06 con el motor V8 LS6 5.7 OHV, primero con 385 CV y desde 2002 con 405 CV, siempre en combinación con un cambio manual de seis velocidades.

De 2006 a 2013 Chevrolet mantuvo en producción el siguiente de la saga, el C6 Z06, ya con el motor V8 LS7 7.0 OHV que rendía 505 CV, y que volvía a unirse a un cambio manual de seis marchas. Aunque la auténtica revolución mecánica tuvo como protagonista al C7 Z06, a la venta de 2015 a 2019, tanto por su motor V8 LT4 6.2 OHV con supercargador (primera vez que un Z06 incorporaba sobrealimentación), que rendía ya la friolera de 650 CV, como por permitir elegir entre dos tipos de transmisión: manual de siete velocidades o automática de ocho.

Así las cosas, el C8 Z06 que ahora desvelan en Estados Unidos, y que no se comercializará tampoco en nuestro país, representa el quinto capítulo en esta apasionante historia, y desde la marca americana vuelven a sorprendernos con una implantación mecánica de lo más innovadora, pues retornan a los motores atmosféricos, sin sobrealimentación (el V8 LT6 5.5 DOHC rinde nada menos que 670 CV, récord mundial para propulsores de este tipo), y optan por vez primera por un cambio automático DCT de doble embrague y ocho marchas.

Con esos 670 CV de potencia, que llegan a 8.600 revoluciones por minuto, y con un par máximo de 623 Nm, a 6.300 rpm, las prestaciones deben ser apoteósicas, aunque Chevrolet se reserva todavía los datos finales y solo podemos manejar dos cifras a modo de 'pista': la primera, que a 186 millas por hora (299,3 km/h) la nueva aerodinámica aumenta el apoyo sobre el suelo en 165,6 kilos, de manera que es lógico pensar en una velocidad punta superior a 300 km/h; y la segunda, que con el paquete opcional Z07 Performance Package la aceleración de 0 a 60 millas por hora (96 km/h) se resolverá en 2,6 segundos. Y ya podemos ir imaginando el sonido del Corvette C8 Z06, pues Chevrolet afirma que sus ingenieros han estado dos años modulándolo para que sea inconfundible. Además, las versiones Z06, aunque sean matriculables, han sido creadas siempre para dar lo mejor en los circuitos, y esta última entrega no parece una excepción, pues se beneficia de la experiencia en competición de Corvette Racing y de pilotos como el madrileño Antonio García, de modo que el chasis del Z06 toma soluciones probadas en el actual C8.R de carreras, que debutó en 2020. Y también por eso la puesta a punto final del nuevo Z06 se ha desarrollado tanto en el circuito de Austin, en Texas, como en el vieno Nürburgring, en Alemania.

Las principales modificaciones

En comparación con el Corvette C8 Stingray, al que podemos considerar como variante 'normal' de la actual generación, el Z06 se distingue por sus 94 milímetros de anchura extra (única forma de acomodar los neumáticos de anchura 345 que monta en el eje posterior), un frontal rediseñado para optimizar la refrigeración mecánica, el nuevo alerón posterior regulable, las llantas específicas de 20 pulgadas delante y 21 detrás (en opción se ofrecen unas de fibra de carbono que reducen 18,6 kilos el peso de las cuatro llantas), un reglaje especial de la suspensión Magnetic Ride Control 4.0, discos de freno de mayores dimensiones y con mejor resistencia en circuito, la transmisión DCT de ocho marchas con desarrollos finales más cortos para agilizar la respuesta al acelerar y un puesto de conducción con mayor protagonismo para los elementos de fibra de carbono.

Y si el usuario quiere que su C8 Z06 sea aún más radical y eficaz en la lucha contra el cronómetro, el paquete opcional Z07 Performance Package incluye elementos aerodinámicos que acentúan el efecto suelo (la intensidad con que el coche se adhiere al asfalto a alta velocidad), un reglaje más deportivo del chasis en general y de la suspensión magnética en particular, los neumáticos Michelin Cup 2 R ZP de máximo agarre, discos de freno cerámicos de Brembo y las antes citadas llantas de fibra de carbono. Ahí es nada.

En cuanto al motor, los responsables de Chevrolet dicen que la elección de un V8 atmosférico, sin sobrealimentación, responde a dos objetivos: lograr la respuesta más progresiva posible y conseguir el mayor disfrute al conducir en circuito. Para ellos, más importante que la potencia (los 670 CV no dejan indiferente en cualquier caso) es lo que llaman "experiencia prestacional", una de las claves de este Z06, donde la lubricación o los conductos de admisión o escape han sido meticulosamente concebidos para adecuarse a la conducción extrema en pista, aunque en esa labor ha sido esencial la experiencia acumulada en las carreras desde 2019 por el motor LT6 usado en el C8.R de competición. De hecho, el V8 LT6 del Corvette Z06 es fabricado a mano por especialistas del Performance Build Center de la factoría Bowling Green de Kentucky, y cada motor sale de esa planta con una placa que incluye la firma del técnico encargado de su montaje.

De serie, el Corvette C8 Z06 equipa neumáticos Michelin Pilot Sport 4S ZP en medida 275/30ZR20 delante y 345/25ZR21 detrás, y también forma parte del equipamiento estándar la suspensión magnética, que permite al conductor elegir entre ajustes más cómodos y otros más deportivos gracias al Driver Mode Selector, que también regula una decena de funciones, como el Launch Control (disponible en el programa Track para conseguir la aceleración más rápida posible), el control de estabilidad StabiliTrak, el control de tracción o el diferencial electrónico de deslizamiento limitado. Y mediante el sistema Performance Traction Management, ajustable también a través del selector de modos de conducción, podemos hacer que, en modo Track, el coche ofrezca cinco niveles de puesta a punto distintos de la tracción mediante la reducción del par y la intervención de los frenos.

Frenos, por cierto, que de serie cuentan con discos delanteros de 370 milímetros y traseros de 380 milímetros, firmados también por Brembo y con pinzas de seis pistones, cuando el C8 Stingray usa pinzas de cuatro pistones. Si pedimos los antes citados discos cerámicos del paquete opcional Z07, los delanteros pasan a ser de 398 milímetros mientras que los traseros son de 391 milímetros.

Y por si alguien no pierde aún la esperanza de hacerse con el nuevo Z06 y quiere saber cómo cuadraría en su garaje, ahí van las dimensiones: 4.688 milímetros de largo (4.722 con la aerodinámica opcional de 'efecto suelo'), 2.025 milímetros de anchura total y 1.235 de altura. Su peso es de 1.561 kilos (con las llantas de fibra de carbono opcionales) y tiene un maletero de 357 litros, válido incluso para afrontar viajes, en los que dispondremos de un depósito de gasolina de 70 litros, aunque por el momento la firma americana no ha comunicado cuál es su consumo medio. De aquí a su comercialización hay tiempo, pues el inicio de la producción está previsto para el verano del próximo año.