Un nuevo Toyota Land Cruiser, mucho más brutal, llega 14 años después
Sin perder su esencia todoterreno, el nuevo Land Cruiser 300 evoluciona a todos los niveles, pues es 200 kilos más ligero y mucho más enérgico, y estrena plataforma y tecnologías
Cuando hablamos del Land Cruiser siempre nos gusta hacer un poco de historia, pues ayuda a entender mejor lo que representa el modelo japonés, que acumula 10,4 millones de unidades vendidas en todo el mundo desde que naciera, allá por 1951, como Toyota BJ, un coche ideado específicamente para que la policía nipona pudiera acceder a los puntos más recónditos del país. Rebautizado Land Cruiser en 1954, sus capacidades le convirtieron en objeto de deseo, y en 1955 la marca lanzó una nueva generación, el Land Cruiser 20, adaptado ya al uso 'civil', ofreciéndose tanto en el mercado local como fuera de sus fronteras. Y de ahí, al estrellato: Serie 40 en 1960, Serie 50 en 1967, Serie 60 en 1980... hasta la aparición en septiembre de 2007 del modelo actualmente a la venta, un Land Cruiser Serie 200 que tras 14 años de comercialización será relevado tras el verano por el nuevo Land Cruiser Serie 300, que sirve también para conmemorar los 70 años de vida del todoterreno japonés, presente en 170 países bajo su ya famoso lema 've a donde quieras y regresa sano y salvo'.
Para empezar, el nuevo Land Cruiser apuesta por una imagen rotunda, al menos en esta primera carrocería de cinco puertas presentada, que mide 4,95 metros de largo por 1,98 de ancho y 1,93 de alto (rivales directos como el Land Rover Defender o el Jeep Wrangler también ofrecen versión corta, de modo que es lógico que Toyota acabe ofreciéndola, igual que en la Serie 200). Y bajo su 'piel' encontramos una de las grandes novedades de esta nueva generación, pues Toyota recurre por vez primera en un vehículo de chasis formado por largueros y travesaños (no es un monocasco autoportante, para entendernos) a la plataforma TNGA (Toyota New Global Architecture), en su variante específica GA-F, que preserva según la marca las excelentes capacidades 'off road' al tiempo que aporta beneficios en términos de rigidez, robustez y dinamismo en carretera, pues además de abrir la puerta a tecnologías inéditas en un Land Cruiser, contribuye a reducir el peso del conjunto en 200 kilos (capó, puertas y techo también ayudan, pues son de aluminio), a bajar el centro de gravedad y a repartir mejor las masas entre ambos ejes (el motor se retrasa 70 milímetros y se baja 28), con ventajas sobre el asfalto y lejos de él.
La dirección es prácticamente nueva, incorporando sistemas de ayuda como el Lane Tracing Assist que mejoran su precisión y suavizando los bruscos movimientos de retorno del volante al circular por terreno muy irregular. Y los frenos incluyen un sistema electrónico que modula su fuerza para lograr deceleraciones más progresivas. En cuanto a la suspensión, nueva también, reubica sus brazos y sus amortiguadores para optimizar el equilibrio entre comodidad y control, y garantizar que las ruedas estén en contacto con el suelo el mayor tiempo posible en conducción 'off road' extrema para asegurar la mejor tracción.
Seis programas de uso 'off road'
En ese último escenario cobrará protagonismo el sistema Multi Terrain Select, que tanto al circular con reductora como haciéndolo en el modo normal de la transmisión nos da a elegir entre seis programas de uso (Auto, Tierra, Arena, Barro, Nieve profunda y Rocas), adaptando a cada tipo de superficie la entrega del par del motor, el funcionamiento de la suspensión o la asistencia de los frenos; aunque, según Toyota, en el modo Auto el coche ya es capaz de adaptarse rápida y automáticamente a los cambios detectados en la vía.
Asimismo, el sistema Multi Terrain Monitor permite al conductor controlar mejor todo lo que le rodea, pues cuatro cámaras exteriores (la frontal, la trasera y una a cada lado) configuran una imagen perimétrica, aunque se puede elegir una específica para controlar mejor un punto concreto cuando avanzamos lentamente en conducción 'off road'. Y a coche parado, el conductor puede pedir una vista de lo que hay bajo el vehículo, y que el Multi Terrain Monitor ofrece recopilando los últimos instantes del avance hasta alcanzar la posición actual. Como en esa vista inferior el suelo es 'transparente', podemos verificar también la posición de las cuatro ruedas de cara a reiniciar la marcha con seguridad, pues conoceremos con precisión la distancia a obstáculos próximos con solo echar un vistazo a la pantalla central de 12,3 pulgadas, que también ofrece informaciones útiles en uso todoterreno como las inclinaciones transversales y longitudinales, el bloqueo de los diferenciales...
En cuanto a los motores, de los 204 CV de potencia del actual 2.8 turbodiésel de cuatro cilindros pasaremos a alternativas mucho más enérgicas. En gasolina, por ejemplo, un 3.5 V6 con doble turbo que anuncia 415 CV y 650 Nm de par máximo, y que cuenta con inyección directa; y en diésel, un 3.3 V6 también biturbo que homologa 309 CV de potencia y 700 Nm de par, y cuya respuesta es más progresiva porque a baja velocidad solo actúa uno de los turbocompresores para priorizar el agrado, mientras que a velocidades elevadas ya actúan ambos para conseguir máxima respuesta. Y los dos nuevos V6 del Land Cruiser 300 se asocian al nuevo cambio automático Direct Shift 10-AT, de 10 velocidades.
Del mismo modo, el diseño interior experimenta también una clara evolución, destacando su sistema de encendido del motor mediante huella dactilar: mientras llevemos encima el mando remoto Smart Key, bastará con pisar el pedal de freno y tocar con el dedo sobre un sensor situado en el centro del salpicadero. Y en materia de seguridad los avances son numerosos, pues el conjunto de asistentes Toyota Safety Sense introduce muchas mejoras. Por ejemplo, el sistema precolisión, que evita o minimiza el riesgo de chocar con otros vehículos, ciclistas o peatones, recibe dos nuevas funciones: en la primera, el Land Cruiser detecta vehículos en las intersecciones o peatones cruzando la calle cuando giramos en un cruce; y en la segunda, el coche nos asiste con la dirección si percibe que el conductor realiza una maniobra de correción de emergencia para evitar chocar con algo por salirse de su carril.
Asimismo, el Parking Support Brake ayuda a mitigar pequeños golpes cuando aparcamos o circulamos a muy baja velocidad, pues detecta obstáculos por delante y por detrás, vehículos que se acercan por detrás o incluso peatones que pasan por la parte posterior. Y el Blind Spot Monitor, que vigila los dos ángulos muertos laterales durante la marcha, también nos advierte ahora de un posible peligro (un vehículo o un ciclista que se acerca) cuando alguno de los ocupantes del Land Cruiser va a abrir la puerta para salir del coche.
Cuando hablamos del Land Cruiser siempre nos gusta hacer un poco de historia, pues ayuda a entender mejor lo que representa el modelo japonés, que acumula 10,4 millones de unidades vendidas en todo el mundo desde que naciera, allá por 1951, como Toyota BJ, un coche ideado específicamente para que la policía nipona pudiera acceder a los puntos más recónditos del país. Rebautizado Land Cruiser en 1954, sus capacidades le convirtieron en objeto de deseo, y en 1955 la marca lanzó una nueva generación, el Land Cruiser 20, adaptado ya al uso 'civil', ofreciéndose tanto en el mercado local como fuera de sus fronteras. Y de ahí, al estrellato: Serie 40 en 1960, Serie 50 en 1967, Serie 60 en 1980... hasta la aparición en septiembre de 2007 del modelo actualmente a la venta, un Land Cruiser Serie 200 que tras 14 años de comercialización será relevado tras el verano por el nuevo Land Cruiser Serie 300, que sirve también para conmemorar los 70 años de vida del todoterreno japonés, presente en 170 países bajo su ya famoso lema 've a donde quieras y regresa sano y salvo'.