Probamos la Honda NC750X DCT, una de las motos más versátiles del mercado

Las siglas NC de esta Honda corresponden al acrónimo de New Concept, un concepto introducido en 2012, aún con las secuelas de la crisis económica que obligaron a plantearse un nuevo tipo de motos, con una proyección más versátil, que permite un uso más variado del vehículo. La primera NC llegó con motor de 700 cc, pero se modificó a 745 cc en 2014, y desde entonces ha evolucionado. Además, este fue el segundo motor de Honda que recibió la transmisión de doble embrague DCT, un elemento diferenciador que permite proyectar las posibilidades de esta moto.

No cabe duda de que es un acierto por parte de Honda haber incorporado el DCT a esta plataforma, que es la que también equipa a la X-ADV y la Forza 750, y la prueba queda ahí, con 106.000 unidades vendidas de estos tres modelos con semejante plataforma.

La NC750X disfruta ya de la tercera generación del DCT, muy refinado y efectivo, pero además ha sido sometida a una profunda renovación, con mejoras en la parte ciclo (llantas y frenos), instrumentación y, sobre todo, diseño, muy estilizado y con una marcada proyección aventurera, aunque la NC750X no es una crossover al estilo convencional que conocemos hoy, sino una moto con una perspectiva más amplia. Otra novedad por parte de Honda, no sólo en la NC sino también en otros de sus modelos, es el empleo de un material sostenible, desarrollado por el fabricante japonés, denominado Durabio, que se emplea en la carrocería y la pantalla. Se trata de una resina de policarbonato que no es completamente petroquímico, sino que emplea residuos biológicos procedentes del maíz.

El motor de 745 cc mantiene su esencia, un propulsor útil y versátil, más aún en la versión con cambio DCT. Tiene una potencia de 58 CV a 6.750 rpm, con un par motor de 69 Nm a 4.750 rpm, y cuenta con una versión limitada de 35 kW para el permiso A2. Dispone de tres modos de conducción, Standard, Sport y Rain, más un cuarto modo configurable en lo relativo a potencia, freno motor e intervención del DCT. Además, cuenta con control de tracción, con el sistema de par seleccionable Honda HSTC.

Los cambios notables están en los frenos delanteros, con un doble disco de 296 milímetros en lugar del único gran disco de 320 mm que equipaba antes. También las llantas, que son 1,8 kilos más ligeras, aunque la incorporación del segundo disco delantero hace que la reducción de peso se quede en 550 gramos. Pero es una rebaja importante que mejora la manejabilidad. En conjunto, su peso es de 216 kilos, que se eleva a 226 kilos en la versión con DCT.

En marcha

Desde el primer momento las sensaciones con la Honda NC750X DCT son extraordinarias. Basta con sentarse sobre su mullido y cómodo asiento y plantar ambos pies en el suelo con seguridad, gracias a su rebajada altura de sólo 802 mm. A partir de ese momento, todo son buenas sensaciones.

La versión DCT que hemos probado pesa, como decíamos, 226 kilos, pero no se tiene esa sensación de peso, ni en parado ni en marcha. La posición de conducción es impecable, ofrece confort y un adecuado equipamiento que permite poner buena cara a este mal tiempo que nos acosa en las últimas semanas. Protegido por una pantalla regulable que ofrece excelente visibilidad, y las manos a resguardo por unos cubremanetas apoyados por puños calefactados, el frío de estos días se siente mucho menos y la lluvia no es un inconveniente. La NC da confianza en todo momento, y su agilidad permite disfrutarla en carreteras de curvas, a pesar de ir equipada a tope con sus maletas (son de serie) y el baúl trasero, una excelente opción para viajar acompañado, porque dispone además de un cómodo respaldo para el pasajero.

El motor rinde con energía. No llega a 60 CV de potencia, pero es más que suficiente para disfrutar. En modo Standard la respuesta es cómoda y suave, muy plana y efectiva, ideal para moverse tranquilamente por la ciudad, donde la NC se desenvuelve con soltura incluso con las maletas. Pero en modo Sport ofrece una cara más viva y decidida, un mayor empuje y mejor aceleración, que permite disfrutarla en carretera de curvas. El par motor es notable y se siente con un buen empuje cuando se abre gas.

A sus futuros compradores les surgirá la duda: ¿con cambio estándar o con DCT? Si no has tenido la oportunidad de probar el DCT, hazlo. Y te convencerás. Recuerdo la brusquedad y cierta incomodidad de la primera generación del DCT en la Honda Integra, pero ahora el DCT hace que te olvides del cambio manual. Costará un poco más (aún no se ha definido su PVP) y tendrá 10 kilos extra de peso, pero es incomparable. Ya son mayoría los usuarios que han comprado la NC con DCT, aunque en España sólo hayan alcanzado el 40% de las ventas.

El DCT es efectivo en todo momento. Responde con suavidad pero con toda la energía que desees. Si quieres llevar una conducción relajada, cambia de marcha tranquilamente a bajo régimen, en torno a 4.000 rpm, pero si lo que quieres es más brío, está en tu puño: si aceleras con energía, la respuesta será más enérgica. Y siempre tienes el control de la situación, subiendo o bajando marchas con los pulsadores de la piña izquierda, con una respuesta inmediata y absolutamente efectiva. Para mí no hay duda: la NC750X con DCT es la mejor opción. Si necesitas una moto para uso diario y manejarte entre las vías congestionadas de la ciudad, el DCT funciona a la perfección y permite sentirse seguro en los incómodos atascos de la ciudad.

También conviene destacar su capacidad como moto viajera. A las maletas y el baúl se le añade el enorme espacio que hay en la zona del depósito convencional, ya que este se ha trasladado bajo los asientos, lo que ha repercutido en su bajo centro de gravedad y en la mejora de su estabilidad. Esto permite una capacidad de carga extraordinaria que potencia sus posibilidades como moto de turismo. Y si le quitas todo el equipamiento viajero, es una moto excelente para el día a día, y se disfruta en las salidas por carretera de curvas. De ahí su versatilidad.

El depósito sólo tiene 14 litros de capacidad, pero el consumo es tan ajustado que permite disfrutar de casi 400 kilómetros de autonomía, con un gasto anunciado por Honda de 3,6 l/100 km; y este es un argumento más a favor de la Honda NC750X DCT, un modelo en el que se pueden encontrar múltiples opciones de uso.

Ficha técnica: Honda NC750X DTC

Motor: Bicilíndrico en paralelo 4 tiempos SOHC, 4 válvulas, refrigerado por agua, inyección electrónica.

Cilindrada: 745 cc.

Potencia: 58 CV a 6.750 rpm. Par motor 69 Nm a 4.750 rpm.

Suspensiones: Delante, horquilla convencional de 120 mm de recorrido. Detrás, monoamortiguador de 190 mm, regulable en precarga.

Frenos: Doble disco delantero de 296 mm, y un disco trasero de 240 mm. ABS.

Neumáticos: 120/70-17 y 160/60-17.

Altura de asiento: 804 mm.

Capacidad del depósito: 14 litros.

Peso: 216 kilos (226 kilos con DCT).