Yadea se pone en marcha en el mercado español el 2 de noviembre

Hace unos meses el fabricante chino Yadea hizo su presentación en nuestro país con una llamativa puesta de largo en Madrid. En esa ocasión pudimos tener una primera aproximación a la marca, bastante desconocida en España a pesar de ser líder mundial de la movilidad eléctrica sobre dos ruedas: en 2021 vendieron 13,9 millones de unidades, una posición que mantiene con solidez desde 2017; y desde que la marca se puso en marcha allá por 2005, Yadea ha producido nada menos que 60 millones de unidades. Lógicamente, teníamos curiosidad por conocer de primera mano los productos de este gigante chino, y a través de Human Mobility, importador y distribuidor exclusivo en España, fuimos convocados para una toma de contacto en Zaragoza, una de las ciudades españolas más preparadas para la nueva movilidad.

Yadea llega con el compromiso de contribuir e impulsar la movilidad eléctrica que requieren los nuevos tiempos que vivimos, una movilidad que intenta ser neutra y respetuosa con el medioambiente, y que pretende recuperar el sentido útil y práctico de los vehículos, por encima de cualquier otro criterio. En este sentido, Yadea se presenta como la primera empresa del sector que ha registrado el impacto de la huella de carbono en todo el proceso a través de la certificación ISO 14061.1.

Seis van a ser los modelos con los que el fabricante chino se estrene en nuestro país, tres ciclomotores (de la categoría L1e) y tres motocicletas (L3e), todas destinadas al uso privado y al sharing, aunque dos de esos modelos también están orientados al uso profesional.

El lanzamiento oficial de la marca será el próximo 2 de noviembre, ofreciendo disponibilidad asegurada en todos sus modelos. De hecho, Yadea va a contar con 102 puntos de venta en toda España, y más de 300 unidades demo para que los usuarios puedan acercarse a los concesionarios y poder probar y descubrir las virtudes de estos modelos.

Ion-litio

Yadea trabaja con baterías de ion-litio, que son las más eficientes en estos momentos, instaladas en celdas blandas que destacan por su mayor efectividad y manejabilidad, y también porque esta clase de empaquetadura es mejor para el reciclaje. Su fabricante es CATL, que produjo más del 38% de las baterías de litio en 2021, de las cuales Yadea vendió 25 millones de baterías el año pasado. Las baterías de los modelos Yadea se alojan en celdas portátiles, y son de alta densidad, lo que supone que con menor volumen se obtiene mayor energía, y además permiten que la temperatura sea más estable.

En concreto, manejan cuatro tipos de baterías, de 60V 24 Ah a 72V 20Ah, en función del modelo al que se destine, y destaca su elevada velocidad de carga, que permite recargar de un 20 a un 80% en un tiempo inferior a tres horas.

De los seis modelos disponibles para rodar nos decantamos por el más potente de todos, el C1S Pro, de la categoría L3e, equiparable a un 125 de combustión. Este modelo incorpora un motor lateral con una potencia continua de 6 kW, que ofrece un par motor de 12,5 Nm. Tiene transmisión por engranajes y dos modos de conducción, Eco y Sport. Cuenta con dos baterías extraíbles (11,5 kilos de peso cada unidad) de 72V 20Ah, y alcanza una velocidad máxima de 80 km/h.

El consumo es de 46 Wh/km, lo que permite alcanzar una autonomía de 92 kilómetros. Yadea ha certificado en el INTA las prestaciones de todos sus modelos para validar la autonomía y el consumo en ciclo WMTC bajo modo Sport, es decir, a máxima potencia. El tiempo de recarga de las dos baterías al 80% es de tres horas, alcanzándose el 100% de carga en cuatro horas.

El C1S Pro es un scooter ligero y cómodo, y esta es una de las cosas que más nos llamaron la atención, porque dispone de mucho espacio entre las piernas y el escudo, una plataforma realmente plana bajo la cual se encuentran las baterías, y un enorme espacio bajo el asiento en el que cabe sobradamente un casco, y aún queda hueco para algún pequeño objeto. Además, tiene una amplia guantera en el lado izquierdo del escudo, con toma USB.

Dispone de llave con sistema keyless, que cuenta con alarma y bloqueo de rueda. La pantalla de instrumentación es LCD, amplia y de buena lectura, y el cambio de modo de conducción se realiza con un simple pulsador. Dispone de modo parking (P) que impide accionar accidentalmente el acelerador, y se activa automáticamente en el momento en que damos al interruptor de apagado, por lo que al darle al contacto nunca se arrancará involuntariamente si no lo desactivamos antes. También dispone de control de crucero.

El bastidor es multitubular en acero, y tiene sistema de frenos CBS, con discos en ambas ruedas y sistema de freno regenerativo. Delante equipa una horquilla convencional con 57 mm de recorrido, y detrás la suspensión está encomendada a dos amortiguadores hidráulicos regulables de 60 mm de recorrido. Su ergonomía está muy cuidada, resulta cómodo nada más subirnos a él, y el asiento es amplio, suficiente para dos personas incluso. Además, se llega cómodamente al suelo con los dos pies porque la altura del asiento es muy contenida. Las líneas de la carrocería son sencillas, muy básicas, con un trazo muy limpio.

Prestaciones sorprendentes

En marcha se nota ligera, pues solo pesa 87 kilos, y se maneja con extraordinaria soltura entre el tráfico. Acelera con energía y vigor, especialmente en modo Sport, donde deja atrás a cualquier coche y no se queda a rueda de ninguna moto, sino más bien lo contrario, para sorpresa de algunos. En modo Eco es más perezosa al salir de los semáforos. La entrega de motor es rotunda, y con piso deslizante (ese empedrado mojado de las zonas peatonales de Zaragoza) conviene pasarse al modo Eco si no quieres terminar cruzado cuando aceleras con despreocupación en modo Sport.

Las prestaciones que ofrece son calcadas a su ficha técnica. En modo Sport no conseguimos sacarle más de los 80 km/h que anuncia la información oficial, mientras que en Eco el velocímetro era capaz de llegar a 60 km/h, es decir, que permite tener un plus a velocidad urbana si hay necesidad de salvar un problema con un golpe de gas, como muchas veces pasa en las ciudades.

Los precios de los modelos de Yadea oscilan entre los 4.890 euros del modelo C1S Pro y los 2.550 euros del T9L Plus, que es un ciclomotor (L1e) con velocidad limitada a 45 km/h. Cuentan con tres años de garantía y su PVP incluye seguro gratis el primer año.