El presidente de Suzuki Ibérica cree que la venta de coches eléctricos subirá muy poco en 2025

Como ya es tradición al encarar el final de cada año, el presidente de Suzuki Ibérica, Juan López Frade, se ha reunido con la prensa especializada en el sector del automóvil para repasar el comportamiento de la marca japonesa a nivel español y mundial, pero también para analizar la situación del conjunto del mercado y trasladar su pronóstico sobre lo que pueden dar de sí los siguientes 12 meses, basándose en diferentes informes nacionales e internacionales. Una previsión del próximo ejercicio que ya se ha convertido en un clásico, y que en esta ocasión ha contado, incluso, con una bola de cristal real. Aunque el máximo representante de Suzuki en nuestro país reconoce que ni así parece fácil acertar, por la complicada situación del mercado del automóvil.

En lo referente a nuestro país, López Frade explicó que Suzuki cerrará este 2024 con unas 6.900 unidades matriculadas, lo que representaría un 13,2% de incremento respecto al año anterior, calificándolo como "un buen resultado, fruto del trabajo realizado en estos meses previos”. Además, eso supone un crecimiento por encima del conjunto del mercado español, que podría cerrar el año en torno al millón de turismos matriculados, de manera que la cuota de Suzuki pasaría del 0,64% en 2023 al 0,69% este año, en el que el presidente de Suzuki Ibérica destacó como hitos la llegada del nuevo Swift y la actualización de los modelos Vitara y S-Cross, sin olvidar la organización, una vez más, de la competición 'Litros x kilos', un referente de la ayuda solidaria y de la promoción de la conducción ecológica que va ya por su novena edición y que totaliza hasta la fecha 35 toneladas de alimentos destinados al Banco de Alimentos de Madrid.

Pero de cara al 2025, su previsión es que las ventas de Suzuki en España bajen hasta las 5.900 unidades, debido a la caída de modelos importantes para la marca como el Jimny. Eso supondría un descenso del ventas del 14,5% frente al 2024, y también una disminución de la cuota de mercado hasta el 0,57% si el próximo año se venden en nuestro país, como recogen sus previsiones, en torno a 1.028.000 turismos, lo que representaría un 2,9% más que en este ejercicio.

El mercado del coche eléctrico

Un 2025 en el que, como recordó el presidente de la marca en España, iniciarán la comercialización de su primer coche eléctrico, el eVitara, un SUV de 4,28 metros desvelado hace unas semanas, pero que aún tardará en llegar, pues la fabricación arrancará en abril y no estará en los concesionarios hasta septiembre, cuando ya conoceremos los precios de una gama que incluirá versiones con tracción delantera y tracción total, cifras de potencia entre 144 y 184 CV, y dos tallas de batería: 49 kWh y 61 kWh.

En cualquier caso, López Frade se volvió a mostrar desconfiado en torno a la expansión del coche eléctrico en nuestro mercado, y destacó lo que él llama "narrativa cambiante" sobre los vehículos eléctricos, en referencia a la evolución de la opinión sobre este asunto de algunos fabricantes, a los que atribuyó "miopía" en el pasado. "Cada vez leo más declaraciones que sugieren que una solución de tecnología combinada es la ruta preferida para ofrecer una solución de cero emisiones netas para el planeta", afirmó el presidente de Suzuki Ibérica, quien resaltó que "la oferta de vehículos eléctricos está por delante de la demanda y los fabricantes están ajustando el volumen de producción". Hasta el punto, según López Frade, de que "algunos fabricantes están adoptando cautelosamente un enfoque de 'esperar y ver', y están aplazando inversiones multimillonarias".

Centrarse en el consumidor

Además, el presidente de la firma japonesa en España cree que hay que "volver a situar al consumidor en el centro de esta transición energética, y que todos los actores implicados, desde el Gobierno a las compañías eléctricas, pasando por los fabricantes, el distribuidor, el concesionario y el proveedor del punto de carga, trabajemos colectivamente para ayudar a difundir confianza a los consumidores y ofrecerles soluciones válidas para su vida real. El coche eléctrico se sigue enfrentando a grandes problemas en España, y todas las marcas están afrontando el desafío de instaurar el coche eléctrico en nuestro país... con resultados preocupantes”.

Sobre eso, López Frade recordó que los coches eléctricos puros (BEV) representaron en 2023 un 5,4% de las matriculaciones de turismos en España, mientras que de enero a octubre de este año la proporción ha bajado al 5,2%, aunque contempla la posibilidad de que en los dos meses finales el porcentaje suba un poco, hasta igualar el 5,4% del pasado ejercicio. Sin embargo, su bola de cristal, basada en diferentes informes nacionales e internacionales, no muestra ese fuerte aumento del coche eléctrico que muchos vaticinan para el 2025, y su previsión es que supongan solo el 5,9% del mercado nacional al final del próximo año. Pero es que, además, el presidente de Suzuki Ibérica extiende ese lento crecimiento a los años siguientes: 6,7% en 2026, 8,3% en 2027, 9,7% en 2028, 12,0% en 2029, 14,4% en 2030 y 17,5% en 2031.

De no cambiar las cosas, y teniendo en cuenta ese ritmo, al llegar el 2035, que es la fecha elegida por la UE para prohibir la venta de coches nuevos con motor de combustión, los eléctricos puros no representarían ni el 40% de las matriculaciones, según López Frade. "Creo que la industria está a punto de emprender un periodo de reflexión mientras navega por la delgada línea entre los precios, los márgenes de beneficio y la demanda de vehículos eléctricos". Y añade el presidente de Suzuki Ibérica: "El punto para lograr que un producto sea económicamente aceptable para los consumidores, puede ser comercialmente inaceptable para algunos fabricantes".

En todo caso, Frade aprovechó para reiterar que “hace falta un Plan Moves efectivo”, pues entiende que "el actual es ineficiente”, y recordó también que "los coches eléctricos son una gran opción para algunos conductores, pero que los coches eléctricos no son adecuados para todo el mundo, por el momento, porque requieren un cambio masivo en el comportamiento de los consumidores" que, según él, no exige unos años, sino "varias generaciones".