La planta barcelonesa de Zona Franca fabricará los Ebro S700 y S800 a partir del próximo mes
A falta solo de la homologación, la planta de Barcelona empezará a producir en noviembre, a un ritmo de 15.000 unidades anuales, los S700 y S800, que suponen el renacimiento de la firma española. Pero el Omoda 5 'made in Spain' se retrasa unos meses
A la espera de la homologación definitiva de sus primeros vehículos, la planta de la Zona Franca, junto a la ciudad de Barcelona, planea arrancar en noviembre la fabricación de los nuevos SUV de Ebro, lo que significaría la plena ocupación de las líneas de ensamblaje de la factoría y la reincorporación ya de un centenar de trabajadores, destinados al primer turno. Los Ebro S700 y S800, cuya presentación mundial se llevó a cabo en mayo en Madrid, serán los primeros en salir de las líneas de montaje, y la renacida firma española, fundada en 1954, prevé añadir un segundo turno durante la primavera del próximo año y un tercer turno en verano, hasta completar un total aproximado de 300 puestos de trabajo, buscando garantizar el empleo de la bolsa de reindustrialización a medida que se asignen las líneas de producción a los trabajadores que ahora se encuentran contratados bajo la modalidad de formación.
Una red en España con 30 puntos
Según fuentes de la empresa, las líneas de montaje DKD (Direct Knock Down) estarán plenamente ocupadas para entonces con el ensamblaje de estos dos vehículos, cuyas previsiones de ventas se han incrementado, una vez alcanzados acuerdos con 30 puntos de venta, que compondrían la red de concesionarios exclusiva para la marca Ebro en España, una red de distribución que ofrecerá también servicios postventa y dará cobertura a los programas de garantía de la marca.
Ebro prevé fabricar ya unas 15.000 unidades el próximo año, aunque antes, tanto el S700 como el S800 deberán contar con la homologación definitiva, necesaria para arrancar la producción. Se trata de dos coches de tipo SUV y tamaño medio basados en sendos modelos del grupo chino Chery, socio de Ebro para la producción de vehículos en España, y permitirán elegir entre motorizaciones híbridas enchufables PHEV y de combustión.
El S700 y el S800 se diferencian principalmente por su tamaño y el número de plazas, pues el S700 mide 4,51 metros de largo, mientras que el S800 se va a 4,72 metros y presume de hasta siete plazas. Y ambos modelos, destinados a un público familiar, se comercializarán con dos niveles de acabado, cuyos equipamientos serán confirmados más adelante, al igual que los precios. En cuanto a la parte mecánica, como decíamos, el Ebro S700 y el Ebro S800 se podrán adquirir con el motor de gasolina 1.6 TGDI de 150 CV o en versión híbrida enchufable PHEV 1.5 TGDI de 350 CV de potencia combinada, esta última con más de 80 kilómetros de autonomía en modo eléctrico y etiqueta ambiental cero de la DGT.
El Omoda 5 español, en 2025
En lo que respecta al Omoda 5 de mecánica 100% eléctrica, cuya fabricación por parte de Chery en la planta de Zona Franca estaba prevista para finales de este año, también en régimen de montaje DKD (Direct Knock Down), finalmente su producción se iniciará en 2025. Al parecer, el cambio regulatorio anunciado por la Comisión Europea el pasado junio, que afectaría a las importaciones de coches eléctricos chinos, junto con las previsiones de ventas reajustadas al alza de los modelos de Ebro, han motivado la reorientación de la producción de los vehículos en la factoría barcelonesa. De esta manera, los coches de la marca española serán los primeros en ocupar las líneas de montaje DKD, mientras que el Omoda 5 eléctrico será producido algo más adelante, pero ya en régimen CKD (Complete Knock Down), es decir, incluyendo una línea completa de soldadura y de pintura para su producción desde el inicio de su fabricación el próximo año; de manera que el Omoda 5 EV made in Spain tendrá un impacto más positivo del previsto en la actividad de la industria auxiliar local.
Como se recordará, el pasado mes de abril se alcanzó un acuerdo entre la compañía española y el fabricante Chery, el mayor exportador entre los fabricantes chinos de automóviles, que, con participación mayoritaria de Ebro, contempla la creación de dos joint ventures: en primer lugar, la denominada Ebro SUV, participada mayoritariamente por Ebro-EV Motors y destinada a la comercialización y posventa de vehículos SUV con marca Ebro en España y Andorra, y más adelante también en otros países; y, en segundo lugar, la inversión de Chery en la planta de Zona Franca, participada mayoritariamente por Ebro-EV Motors, y que tendrá como finalidad la producción de modelos de las dos firmas.
A la espera de la homologación definitiva de sus primeros vehículos, la planta de la Zona Franca, junto a la ciudad de Barcelona, planea arrancar en noviembre la fabricación de los nuevos SUV de Ebro, lo que significaría la plena ocupación de las líneas de ensamblaje de la factoría y la reincorporación ya de un centenar de trabajadores, destinados al primer turno. Los Ebro S700 y S800, cuya presentación mundial se llevó a cabo en mayo en Madrid, serán los primeros en salir de las líneas de montaje, y la renacida firma española, fundada en 1954, prevé añadir un segundo turno durante la primavera del próximo año y un tercer turno en verano, hasta completar un total aproximado de 300 puestos de trabajo, buscando garantizar el empleo de la bolsa de reindustrialización a medida que se asignen las líneas de producción a los trabajadores que ahora se encuentran contratados bajo la modalidad de formación.