Huettl: "Sabemos que durante un tiempo no cubriremos la demanda de algunos clientes"

En sustitución de Uwe Hochgeschurtz, promovido a otro puesto directivo en la cúpula de Stellantis, en junio pasó a ser CEO de las marcas Opel y Vauxhall el alemán Florian Huettl, que trabaja desde marzo para el grupo liderado por Carlos Tavares y ha desarrollado gran parte de sus 20 años en el sector dentro de Renault Group, donde ocupó distintos cargos en países como Reino Unido, Alemania, Francia, Suiza o Rusia. Huettl viajaba hace unos días a Zaragoza con motivo del 40 aniversario del Corsa para encontrarse en la planta de Figueruelas, donde hoy se fabrica tanto ese modelo como el Opel Crossland y el Citroën C3 Aircross, con los concesionarios de la marca germana en nuestro país, una cita que El Confidencial ha aprovechado para charlar con el nuevo CEO de Opel.

Le pedimos que nos haga una primera valoración de su marca, y Huettl nos comenta que va "en el rumbo adecuado y, manteniendo una cuota de mercado que está en línea con la del 2021, a pesar de los problemas que están generando la falta de semiconductores y de más cosas, unido a una tasa de inflación que está teniendo una repercusión tremenda, a la guerra de Ucrania y a la subida de los precios de la energía".

Pero el nuevo CEO de Opel quiere pensar que se trata de una situación coyuntural, y prefiere quedarse con la positiva evolución que protagoniza desde hace unos años la única firma alemana de Stellantis. "La recuperación comenzó en 2017, porque hasta entonces la situación era crítica, ya que se registraban las pérdidas más importantes de las últimas dos décadas, y se pagaban multas millonarias por el exceso de emisiones". Pero sin citar explícitamente la entrada de Opel en PSA, Huettl da a entender que esa fue la clave para la reactivación de su marca, que "volvió a ser rentable en 2018, solo un año después".

Tras el breve repaso a una época en la que Huettl trabajaba aún para la competencia, damos el salto al presente y al futuro, y preguntamos al directivo por los pilares de Opel a partir de ahora: "rentabilidad, electrificación y ventas fuera de los principales mercados", nos dice. Insiste en que Opel es rentable desde 2018 y que en el primer semestre de este año ha ganado dinero, y enseguida pasa al asunto de la electrificación. "Ya hay 12 modelos de Opel electrificados con una tecnología u otra, y para 2024 todos los vehículos de Opel tendrán versiones electrificadas", nos dice. Para a continuación confirmar que "desde 2028 Opel será una marca eléctrica en Europa". Al respecto, Huettl nos recuerda el papel que ya juega Opel en el mercado de los vehículos eléctricos en nuestro continente, donde su marca supone "un 4,8% de los vehículos eléctricos vendidos, y un 17% en el caso de las furgonetas eléctricas o eLCV".

Sin embargo, dejar de vender vehículos con motor de combustión en Europa en 2028 supone adelantarse siete años a la prohibición de la UE. Sobre eso le preguntamos, y también sobre la posibilidad de que en algunos países donde avance más lentamente la electromovilidad, como España, puedan retrasar su calendario: "nuestro proceso de electrificación se va a realizar paso a paso por modelos, pero no paso a paso por países, de manera que en 2028 se acaban los Opel no eléctricos en toda Europa. Y sabemos que habrá mercados que vayan más deprisa y otros que vayan más despacio".

Pregunta: ¿Pero entonces van a perder siete años de ventas en ciertos países?

Respuesta: No lo vemos como que renunciamos a siete años, y preferimos pensar que ganamos siete años, aunque sabemos que durante un tiempo no vamos a cubrir la demanda de algunos clientes. Lo que sí nos preocupa es la asequibilidad de los eléctricos, y por eso estamos preparando fórmulas de leasing o renting que acerquen más el coche eléctrico a la gente. Y necesitamos que los gobiernos tengan un plan claro, que apoyen la transición al vehículo eléctrico, pues esto no ha sido una idea de los fabricantes.

P. Estamos hablando de eléctricos, pero ustedes han presentado ya el e-Vivaro Hydrogen, propulsado por hidrógeno. ¿Extenderán esa tecnología a otros modelos?

R. Es una tecnología muy prometedora que da respuesta a la brecha entre producción y consumo, porque tú puedes producir el hidrógeno en un lugar y transportarlo a otros para su consumo. En efecto, hemos empezado por el segmento eLCV, de modo que Vivaro y Movano tendrán versiones de hidrógeno que permitirán hacer más de 500 kilómetros al día, lo cual no es tan fácil con furgonetas eléctricas de batería; pero hay mucho por llegar".

Florian Huettl se frena en la explicación sobre los futuros Opel de hidrógeno, pero en un momento dado deja caer que "no parece que el Corsa sea el coche ideal para tener mecánica de hidrógeno, pero en otros coches más grandes y pesados sería más lógico". Sus insinuaciones coinciden, de hecho, con informaciones no oficiales procedentes de Stellantis sobre la posible aplicación de la pila de combustible de hidrógeno en el futuro a turismos y modelos SUV de sus diferentes marcas.

P. Ya que estamos en la planta de Zaragoza, ¿podría contarnos algo sobre el Crossland y su futuro?

R. Sí, que habrá un sucesor en el que ya estamos trabajando. Y por supuesto ya será un vehículo con electrificación, en contra de lo que sucede ahora, pues es uno de los pocos Opel sin versión electrificada.

P. Otro Opel no electrificado es el Insignia. Y anunciaron hace poco que dejarán de fabricarlo a finales de año...

R. En efecto, porque vimos que electrificar el Insignia no era posible. Podríamos haber decidido seguir con él uno o dos años más, vendiendo solo motores de combustión, pero vimos que era mejor cesar su producción y dedicar el espacio que ocupa en la factoría de Rüsselsheim a fabricar más unidades del Astra, que desde el 2023 también se ofrecerá como Astra-e 100% eléctrico, tanto con la carrocería compacta como en versión familiar Sports Tourer. No obstante, estamos trabajando en un sucesor para el Insignia, que será totalmente eléctrico y para el que no hay fecha todavía. Será más amplio, más revolucionario y muy 'detox', nada que ver con el enfoque tan clásico del Insignia actual, por ejemplo en el diseño interior. Pero sí, queremos seguir estando en el segmento D/E como hasta ahora.

P. Porque Opel ahora solo está en segmentos donde están también el resto de las marcas de Stellantis. Sin embargo, en los últimos meses algunas de esas marcas han lanzado coches únicos, exclusivos, sin competencia directa en el grupo, como el Citroën C5 X o el Peugeot 408. ¿Veremos también un Opel único, militando en un segmento no existente en otras marcas de Stellantis?

R. Sí, vamos a tener un coche que ya hemos anunciado hace dos años con el 'concept car' Manta GSe, y será un nuevo Manta, un vehículo que conecte el pasado con el futuro, aunque nadie debe pensar en un modelo retro que se parezca al original, porque será otra cosa diferente. Ahora estamos viendo precisamente todo lo relativo al diseño, a los equipamientos... Será eléctrico, por supuesto, y podemos esperarlo para mediados de la década.

P. Entre los pilares de su marca citó rentabilidad y electrificación, pero también las ventas fuera de los principales mercados. ¿Que objetivo tienen en ese sentido?

R. Queremos internacionalizar más a Opel, porque actualmente más del 90% de nuestra ventas son en Europa. Desde 2017 se han añadido 14 nuevos mercados, y en algunos de ellos estamos vendiendo muy bien, como Turquía, Egipto, Marruecos o Chile. En el mercado turco, por ejemplo, casi todos los Opel que vendemos son Corsa y Crossland, de modo que eso es muy importante para los intereses de Zaragoza. Y entre las claves de futuro yo citaría otras, como seguir estando orgullosos de ser una marca alemana, apostar por la excelencia en mecánica y conducción o poner en práctica lo que llamamos 'greenovation', que es la sostenibilidad pero yendo más allá de la electrificación, pues queremos hacer nuestra propia gigafactoría en Kaiserlautern, que será suministradora de nuestra baterías para Europa.

P. ¿Y cómo ve a Opel en España?

R. España es clave para nosotros, y por ejemplo la mitad de los Opel se fabrican actualmente aquí, entre las factorías de Vigo y Zaragoza. En cuanto al mercado, tenemos una cuota del 3,7%, y no estamos contentos con eso, pues queremos reconquistar la cuota de penetración que ya tuvimos. Y en eléctricos estamos en un 5,3% de penetración, que es solo un poco inferior a la que tenemos en el conjunto de Europa; aunque pienso que vamos a crecer. En cuanto al segmento eLCV, Opel supone un 10,1% de las ventas de furgonetas eléctricas. Además, hay datos estupendos, como que el 25% de los Grandland matriculados en España sean ya híbridos enchufables.