De los Mozos: "Me entristece cuando se utiliza la industria como arma arrojadiza"
Presidente de Renault España, director de Fabricación y Logística de Renault Group y presidente de Anfac, José Vicente de los Mozos conoce como pocos el sector del automóvil
Media hora de charla con José Vicente de los Mozos y ya tienes la sensación de conocer las claves del sector del automóvil. El directivo español, ingeniero y con experiencia en factorías desde que tenía solo 16 años, es hoy el máximo responsable de Renault en nuestro país, un cargo que compagina con la dirección del área de Fabricación y Logística de Renault Group, donde controla 38 plantas en 16 países distintos, y la presidencia de Anfac, la asociación nacional que reúne a las principales marcas de automóviles, y que ha colaborado con Fira de Barcelona en la organización de Automobile Barcelona, nueva denominación del tradicional Salón Internacional del Automóvil.
Con De los Mozos tenemos dos encuentros en solo una hora durante la jornada inaugural del evento barcelonés. En el primero, ejerciendo su papel de máximo responsable de Anfac, vuelve a explicar a un puñado de periodistas las líneas básicas de la reunión que horas más tarde celebrará la Junta Directiva de la asociación de los fabricantes, y a la que asistirá Pedro Sánchez. Ahí no hay sorpresas, porque el mensaje es claro desde hace tiempo, recordando que el automóvil es un eje vertebrador del país pues supone el 10% del PIB y el 60% de la industria. Un sector en plena transformación, pero que afronta problemas como la falta de infraestructuras de recarga o la crisis de los semiconductores, para la que De los Mozos no ve salida fácil hasta 2023. Y el presidente de Anfac teme que se derogue la Reforma Laboral porque eso eliminaría la flexibilidad que tiene el sector del automóvil y causaría problemas de competitividad, manifestando su oposición a un convenio único del automóvil porque proveedores de componentes y fabricantes de coches tienen problemas distintos: "Si el diálogo social en la industria del automóvil funciona, ¿por qué hay que cambiarlo?"
Y la visión de 360 grados sobre el sector le lleva a De los Mozos a referirse en ese primer encuentro al elevado precio de la electricidad en España, que para las fábricas es un 20% más alto aquí que en Francia: "me preocupa más por el coste de producción que por el impacto que pueda tener en las ventas de vehículos eléctricos". En este sentido, el directivo español, presidente de Renault España, ve también un riesgo en el hecho de que nuestro país esté metido en un 'sandwich': "por un lado tenemos que los centros de decisión no están aquí, sino en Alemania y Francia, y por otro tenemos a países que lo están haciendo bien y están recibiendo más ayudas, como Turquía, Rumania o Eslovaquia, donde los costes son más bajos". Y lo pone negro sobre blanco: "ningún consejo de administración te va a afirmar que se fabrique en un sitio donde es más caro, aunque se llame España".
Porque De los Mozos da gran importancia a la competitividad, al coste de la mano de obra o a los costes logísticos, pero también a la formación y a las leyes de educación: "tiene que evolucionar, porque por ejemplo necesitamos gente que sepa programar software, y los que salen de FP2 no saben hacerlo". Y añade: "hoy el 'business' es efímero, lo que ahora funciona mañana no lo hace, y por eso hay que entender los cambios económicos, porque detrás van los cambios sociales". Y en su papel de presidente de Anfac, concluye con un análisis de realismo puro: "La gente joven en las grandes ciudades no tiene dinero para comprar un coche, y ahora compran movilidad, y las marcas tenemos que darles servicio. Además, el paro ha subido, la gente no tiene dinero para comprar coches y por eso se va al mercado de ocasión, y eso generará un problema económico y después un problema social".
Tras ese encuentro con periodistas de diversos medios, y ya en una sala privada de Renault en Automobile Barcelona, charlamos a solas con José Vicente de los Mozos, ahora en su papel de presidente de Renault España y director de Fabricación y Logística de Renault Group. Y la entrevista comienza con el entrevistado preguntando al periodista: "¿Crees que tengo razón?" Uno, que lleva ya casi 33 años en el sector y ha visto de todo, se atreve a responder a De los Mozos con un breve análisis que parece no disgustarle: "en este país llevamos muchos años jugando con fuego con el sector del automóvil, y con independencia del partido que haya en el Gobierno". Al hilo de mi respuesta, le pregunto si aprecia más sensibilidad en partidos que ahora están en la oposición. De los Mozos es bastante inmediato en sus reacciones, y enseguida explica las cosas con pasión de ingeniero, es decir, con un aluvión de datos y argumentos perfectamente ordenados: "La industria es un elemento que no debe usarse de forma partidista, porque es algo que se construye a 10 o 20 años, pero en España te das cuenta de que la industria no es un proyecto de país, y me entristece cuando se utiliza la industria como arma arrojadiza, porque al final la consecuencia es que se pierden puestos de trabajo. Y cuando se habla de libertad y de dignidad, no hay mayor dignidad que tener un puesto de trabajo, y la industria genera trabajo de calidad. Hagamos un proyecto de país alrededor de la industria, premiemos la innovación, atraigamos productos de alto valor añadido, empujemos la digitalización y sigamos trabajando en la competitividad". "Y la competitividad no es solo el coste de la mano de obra, también es la flexibilidad, los costes de energía o las ayudas a la inversión".
Con la ventaja que me da haber estado minutos antes compartiendo su charla, en ese momento como presidente de Anfac, le pregunto si desde su privilegiada perspectiva, como encargado de controlar 38 centros productivos de Renault Group en 16 países, podría decirme quiénes lo están haciendo bien. "Hay que diferenciar muy bien entre Europa y el resto, pero los chinos desde luego están en el avance, en las nuevas tecnologías, aunque también hay países como Turquía, Rumanía, Marruecos, Eslovaquia o Polonia". Y nosotros en un 'sandwich', entre los que toman decisiones y los que fabrican más barato... "En efecto, y hay que salir de ahí, ¿qué puede aportar España? pues yo creo que formación cualificada, diálogo social, red de proveedores, nuevas soluciones de movilidad para un país con tanto turismo... El programa City empezó en Madrid, por ejemplo, y ahora se ha exportado a París".
Y a muy corto plazo, ¿qué hacemos para solucionar la crisis de los semiconductores?: "Los diferentes grupos estamos trabajando con los proveedores para aumentar las capacidades, nosotros trabajamos con Bosch, Visteon, Continental o LG, y ellos a su vez también hablan con sus proveedores para aumentar esas capacidades. Por otro lado, la gente de I+D está intentando evolucionar hacia 'chips' más estándar para tener más flexibilidad; o sea, que no estamos esperando, pero la UE tiene que darse cuenta de que esa parte de la cadena de valor está condicionándolo todo, que una pieza de céntimos condiciona la venta de algo de 20.000 euros".
En relación a la producción en nuestro país de varios modelos de la marca del rombo con tecnología híbrida enchufable, le recuerdo a José Vicente de los Mozos que en el Salón de Munich, semanas atrás, el presidente de Renault Group, Luca de Meo, hacía una defensa clara de la tecnología PHEV, al proponer que finalmente se permita también su venta a partir de 2035, junto con los eléctricos puros. De los Mozos asiente, y se queja de que en nuestro país no se haya puesto en valor la electrificación, pues defiende que la apuesta de Renault por la tecnología E-Tech en nuestro país, al final es una apuesta por coches eléctricos. Y pregunto al presidente de Renault España si no es un error que la Comisión Europea trate al conjunto de la UE como un todo, cuando las diferencias económicas, sociales o geográficas entre territorios son de tal calado: Bulgaria, Luxemburgo, Dinamarca, España... ¿qué tienen que ver y cómo pueden electrificarse a la vez? Para De los Mozos "la problemática de los países nórdicos, que no son productores, y de los países del sur, que sí lo son, no se parece; y luego está el tema de la renta 'per cápita', que tampoco es la misma". Y apunta: "el 80% de los coches tiene más de 12 años, ¿cómo los vamos eliminando de nuestros parques?"
Y ahí entra en juego uno de sus argumentos tradicionales: "¿por qué a un coche que ha pasado la homologación Euro 6 E-Temp le ponen problemas? Estamos generando incertidumbres". Le pregunto si aprecia esa intranquilidad de cara al futuro entre los empleados de su empresa: "pues imagínate en una planta de motores como la de Valladolid, una de las mayores del mundo, con 2.000 trabajadores que pueden preguntarse qué pasará si en 2035 se prohíben los motores de combustión". "O el ejemplo de Sevilla, donde se produce la tecnología E-Tech, porque Renault ha hecho una gran apuesta por este país, con motores híbridos, cajas híbridas... y es una tecnología híbrida que está arrancando y que ya se la quieren cargar".
Metidos en el capítulo de las tecnologías de motores, la siguiente pregunta gira en torno al hidrógeno. "Lo vemos más interesante en los vehículos comerciales, pero hay que recordar que nuestros clientes son principalmente pymes y medianas empresas, y hablamos de vehículos de hidrógeno que cuestan 10.000 euros más que los normales, y encima no hay estaciones para respostar. Hagamos una transición ecológica ordenada para que sea un éxito y dejemos al consumidor que elija, no le creemos confusiones, porque si no lograremos el efecto contrario".
Media hora de charla con José Vicente de los Mozos y ya tienes la sensación de conocer las claves del sector del automóvil. El directivo español, ingeniero y con experiencia en factorías desde que tenía solo 16 años, es hoy el máximo responsable de Renault en nuestro país, un cargo que compagina con la dirección del área de Fabricación y Logística de Renault Group, donde controla 38 plantas en 16 países distintos, y la presidencia de Anfac, la asociación nacional que reúne a las principales marcas de automóviles, y que ha colaborado con Fira de Barcelona en la organización de Automobile Barcelona, nueva denominación del tradicional Salón Internacional del Automóvil.