Lynk & Co amplía por fin su gama con el 02, un SUV eléctrico con 445 kilómetros de autonomía

Cuando hablamos de los eléctricos del Grupo Volkswagen y nos referimos a su plataforma MEB, solemos aclarar que se trata de una base técnica sobre la que se han desarrollado infinidad de modelos, como los Audi Q4 e-tron y Q4 Sportback e-tron, los Cupra Born y Tavascan, los Skoda Elroq, Enyaq y Enyaq Coupé, los Volkswagen ID.3, ID.4, ID.5, ID.7, ID.7 Tourer e ID.Buzz, e, incluso, los Ford Explorer y Capri. Y, del mismo modo, cuando la protagonista es la plataforma E-GMP de Hyundai Motor Company, explicamos que esa es la moderna base sobre la que, por ahora, se han creado los Hyundai Ioniq 5 e Ioniq 6, y los Kia EV3, EV6 y EV9; todos ellos eléctricos. Recordamos esto porque, más que nunca, contar con una plataforma común que sirva para muchos vehículos ayuda a ahorrar, detalle de especial relevancia en los coches eléctricos de batería, donde la carrera por rebajar costes no tiene descanso para tratar de convertirlos en una alternativa verdaderamente atractiva para el gran público.

Y otro tanto podemos contar sobre el gigante chino Geely, cuyo arsenal de marcas incluye, entre otras, a Volvo Cars, Polestar, Lotus o Smart, en este caso participada al 50% con Mercedes-Benz. Y a dos firmas que podemos considerar locales, pero que nacieron con ambiciones globales: Lynk & Co y Zeekr, esta última pendiente de desembarcar también en España. Porque Geely también sigue esa provechosa estrategia de compartir esquemas técnicos entre sus diferentes fabricantes, y tenemos ejemplos previos como la plataforma CMA (Compact Modular Architecture), empleada, por citar solo coches disponibles en Europa, en los Volvo XC40 y C40, en el Polestar 2 o en el Lynk & Co 01, este último un SUV de 4,54 metros que llegó a España en 2020, solo como híbrido enchufable, y que desde entonces ha monopolizado la oferta en nuestro país de la marca, que empezó ofreciendo sus coches a través de una fórmula de suscripción mensual, pero que ya los vende también al modo tradicional.

Pero esa oferta se duplica a partir de ahora porque Lynk & Co amplía por fin su gama en nuestro continente. Y lo hace con un SUV de estilo deportivo, o crossover, algo más bajo y compacto que el 01 y que recibe la denominación 02. Un modelo totalmente nuevo (nada tiene que ver con el Lynk & Co 02 a la venta en China) que mide 4,46 metros de largo por 1,85 de ancho y 1,57 de alto, tiene una distancia entre ejes de 2,76 metros y podríamos describir fácilmente explicando que es como un Toyota C-HR, pero ligeramente más grande y solo eléctrico. Y este Lynk & Co 02, cómo no, comparte su plataforma SEA con varios modelos eléctricos del grupo Geely, como el Volvo EX30 o los Smart #1 y #3.

A diferencia de los tres parientes citados, que permiten al cliente elegir entre una versión de tracción trasera con 200 kW (272 CV) y una variante de tracción total con 315 kW (428 CV), en el caso del Lynk & Co 02 la gama arranca con una única alternativa mecánica: tracción trasera y 272 CV, es decir, la más racional. Pero no parece fácil que alguien vaya a echar de menos más empuje, porque entre esa potencia ya generosa y los 343 Nm de par máximo, los 1.820 kilos del conjunto se moverán con agilidad, si atendemos a los 5,5 segundos homologados para acelerar de cero a 100 km/h. Y la velocidad punta ha sido limitada electrónicamente a 180 km/h.

Más autonomía en More que en Core

Además, el 02 equipa una batería de iones de litio con tecnología NMC (níquel, manganeso y cobalto) de 66 kWh de capacidad, y gracias a eso homologa una autonomía media en ciclo WLTP de 435 kilómetros en el caso de la versión básica Core, que monta neumáticos 235/50 R19, y 445 kilómetros con el acabado More, que incorpora de serie neumáticos 245/45 R20 pero se beneficia de mejoras como la bomba de calor o la parrilla frontal con lamas activas. Porque, respectivamente, el consumo medio de energía es de 17,6 kWh/100 km en uno y de 17,1 en el otro.

Y en cuanto a velocidad de carga, también hay alguna diferencia entre 02 Core y 02 More, pues en la recarga doméstica con corriente alterna, el primero admite un máximo de 11 kW y el segundo permite cargar a un máximo de 22 kW, de manera que las siete horas y media de uno se podrían reducir a solo cuatro horas y media en el otro. En cambio, los dos admiten la misma potencia con corriente continua: 150 kW, suficiente para necesitar solo unos 30 minutos en las cargas del 10% al 80% si disponemos de un punto apropiado. Además, dispone de carga bidireccional con función V2L, que habilita al coche para convertirse en suministrador de electricidad y alimentar herramientas eléctricas o electrodomésticos, e incluso recargar otros vehículos.

El Lynk & Co 02, cuyo precio arrancará en 35.495 euros que también estará disponible y mediante suscripción, y que llegará a España en pocas semanas, permite elegir entre los modos de conducción Eco, Comfort, Sport e Individual, este último configurable por el conductor, y la marca dice haber echado el resto en cuestión de seguridad y ayudas electrónicas, con más de una veintena de ADAS en la dotación de serie.

Durante el evento de presentación del 02 en la ciudad italiana de Milán, al que acudió El Confidencial, tuvimos ocasión de estudiar con detalle el nuevo crossover chino, y no hubo que afinar demasiado para comprobar que, en cuestión de calidad de materiales o refinamiento, el nuevo modelo supone un pequeño paso atrás respecto al 01. Cuando abres cualquiera de sus cuatro puertas, sin marco en las ventanillas para lograr seguramente una impresión de coche más deportivo, te encuentras con un interior bastante amplio, tanto en las plazas delanteras como en las traseras, beneficiadas por un suelo completamente plano y generosa altura al techo acristalado. Y aunque los materiales en general cumplen de sobra, pues abunda el plástico mullido, las bolsas de las puertas no vienen forradas por dentro y el acabado dista de parecer lujoso. Además, se echan en falta unas salidas de aire ajustables para las plazas traseras.

No obstante, y teniendo en cuenta que el 02 comparte la plataforma SEA con el Volvo EX30, hay que destacar algunos detalles positivos referentes al puesto de conducción y la ergonomía. Por ejemplo, que el nuevo coche eléctrico de Lynk & Co tiene en la puerta del conductor los mandos de los cuatro elevalunas eléctricos y el ajuste de los retrovisores exteriores, al modo clásico, mientras que en su pariente de Volvo los mandos de los elevalunas van entre las butacas delanteras y, peor aún, no hay un reglaje convencional para los espejos, pues para orientarlos debemos entrar en menús y submenús de la pantalla central, para finalmente moverlos pulsando unos botones del volante. Además, el eléctrico pequeño de Volvo prescinde de una instrumentación al uso frente al conductor, cuando el Lynk & Co 02, al igual que los Smart #1 y #3, sí lleva pantalla de información tras el volante. En concreto, de 10,2 pulgadas y configurable, mientras que la pantalla central táctil, enorme, es de 15,4 pulgadas. Y disponemos de un equipo de sonido Harman Kardon con 14 altavoces, de una plataforma para la recarga inalambrica del smartphone y de la función OTA (Over-the-Air), que permite descargar actualizaciones remotas del coche sin pasar por el taller.

En cuanto al espacio para el equipaje, el maletero homologa 410 litros y tiene un suelo móvil que podemos situar a dos alturas, mientras que bajo el capó frontal hay también un pequeño hueco, de 15 litros, ideal para los cables de carga, por ejemplo. Además, la marca china explica que el techo admite cargas de hasta 75 kilos, y que el 02 puede tirar de remolques con freno de hasta 1.600 kilos. Y aunque no se trata de un SUV ideado para circular por pistas forestales, el Lynk & Co 02 presume de una altura libre que posibilita la circulación ocasional por malas carreteras o caminos en aceptable estado: 191 milímetros de distancia al suelo sin carga y 174 milímetros a plena carga. Siempre, como es lógico, con las limitaciones que supone contar exclusivamente con tracción en un eje.