La escalada de potencia de los eléctricos no para: 1.200 caballos para el Lucid Air Sapphire

Los 1.050 caballos que anuncia el Lucid Air Grand Touring Performance que la firma dirigida por Peter Rawlinson presentó el pasado año ya deberían haber servido para resolver a su favor el 'pique' con Tesla, que ofrece en su gama desde comienzos del pasado año las versiones Plaid de sus Model S y Model X, en ambos casos con 'solo' 1.020 caballos de potencia. Pero sus responsables parecen haber querido dejar todavía más clara su superioridad frente a los productos de Elon Musk, al menos en cifras de potencia máxima, lanzando una variante aún más brutal de su berlina de lujo Lucid Air a la que han bautizado Sapphire y que llegará a los primeros clientes estadounidenses y canadienses en 2023.

Clientes que deberán pagar 249.000 dólares (casi 250.000 euros) por esta nueva demostración de fuerza y tecnología, que Lucid Motors califica sin rubor como "el primer súper sedán eléctrico de lujo del mundo", pasando por alto, seguramente con toda la intención, a berlinas eléctricas de talla aún mayor como el Mercedes-Benz EQS o el BMW i7, que desde luego no pueden rivalizar por caballería frente a la nueva edición especial Sapphire, cuya principal particularidad frente a la versión Gran Touring Performance no es solo aportar 150 caballos extra, sino incorporar un motor eléctrico más: tres en lugar de dos. En concreto, uno delante y dos detrás.

Con 1.200 caballos de potencia para distribuir entre las cuatro ruedas, podemos esperar unas prestaciones de primer nivel, dignas literalmente de un monoplaza actual de Fórmula 1, cuando no mejores. Porque se anuncian menos de dos segundos para acelerar de 0 a 60 millas por hora (96 km/h) y menos de cuatro segundos para pasar de 0 a 100 millas por hora (161 km/h), dos valores mareantes para prorrogar una escalada de potencia que no parece tener fin ni tope.

Así las cosas, el Lucid Air Sapphire pasa a ser también el sedán más potente del mundo, incluidos modelos de gasolina o híbridos, y la firma californiana defiende otras dos plusmarcas: es el coche eléctrico con más autonomía, pues homologa 520 millas (836 kilómetros) en el exigente test de la agencia americana EPA, más duro y realista que nuestro ciclo europeo WLTP, y es también el eléctrico que más rápidamente carga su batería, de 118 kWh de capacidad. Porque, según los cálculos de la compañía, 22 minutos bastan para reponer electricidad para otros 482 kilómetros.

Además, el pasado año un Lucid Air fue el vehículo eléctrico que mejor recargó energía en un test independiente realizado por la revista estadounidense 'Car and Driver', utilizándose en todos los casos un cargador de Electrify America con 350 kW de potencia máxima. Porque el coche de Lucid Motors cargó del 10% al 90% en 46 minutos, a una potencia real media de 135 kW y con picos de hasta 297 kW, mientras que el segundo clasificado, que fue precisamente el Tesla Model S Plaid, pasó del 10% al 90% en 38 minutos (su batería es más pequeña que la del Lucid Air), a una potencia real media de 125 kW y con un pico máximo de 250 kW.

El fabricante americano, además, no se ha limitado a poner un motor extra en el tren posterior para aumentar la potencia, sino que ha aprovechado para evolucionar su tecnología de propulsión, y mientras que el motor delantero se beneficia de un avanzado sistema de enfriamiento, los dos traseros estrenan un nuevo intercambiador de calor y ven incrementado el caudal del líquido refrigerante. Asimismo, la batería del Lucid Air Sapphire adopta una lógica de funcionamiento que genera mejoras térmicas y de potencia, según sus responsables.

Frenos cerámicos de competición

Y el chasis también ha sido desarrollado para que esté a la altura de un conjunto propulsor tan potente. Por ejemplo, Lucid Motors afirma que los frenos de serie serían capaces de afrontar una competición en circuito, pues constan de discos carbocerámicos de enorme diámetro. Y aunque el objetivo era preservar un nivel de confort adecuado para una berlina de lujo, los muelles de la suspensión son más firmes que en el resto de la gama, la amortiguación también ha sido personalizada, los bujes de rueda son más robustos y hay una puesta a punto específica y más deportiva del ABS, los controles de tracción y estabilidad, y la asistencia de la dirección. También es más avanzado el sistema de vectorización del par, adaptado a la fuerza que llega de tres motores a la vez, y sus exclusivas llantas Aero Sapphire se combinan con neumáticos Michelin PS4S desarrollados especialmente por el fabricante francés para esta versión, que los monta en medida 265/35 R20 delante y 295/30 R21 detrás. Además, las cuatro ruedas incorporan unas cubiertas aerodinámicas de fibra de carbono, desmontables, que optimizan a alta velocidad la lucha del coche contra el viento.

Otra de las novedades técnicas introducidas en el Lucid Air Sapphire tiene que ver con la transmisión de par de las ruedas traseras, pues los ingenieros de la casa han implantado un sistema que agiliza y aumenta el giro del coche en las curvas, ya que se puede proporcionar par a cada una de las ruedas traseras en direcciones opuestas, consiguiéndose un efecto similar al logrado en otros vehículos mediante el frenado de una sola rueda o con la dirección en el eje trasero, pero de forma más rápida, silenciosa y progresiva, siempre según la información publicada por la marca. No obstante, la experiencia al volante dependerá del modo de conducción elegido, que interviene sobre la dirección, la suspensión, la frenada y la respuesta del tren motriz.

Mientras que en el exterior, que estrena un nuevo tono azul (Sapphire Blue) nunca ofrecido por la marca, los diseñadores han efectuado pequeños ajustes para depurar la aerodinámica y ganar apoyo contra el suelo a alta velocidad, dentro la versión Sapphire también se personaliza gracias a un equipamiento exclusivo y más generoso. Destacan los asientos deportivos con reglaje eléctrico de 18 vías y tapizados con una combinación de piel negra con dos tonos de piel Alcantara: negra y azul. Por supuesto, con calefacción, ventilación interna y función de masaje. Además, los reposacabezas muestran el emblema de la marca, que es el oso característico del estado de California.

Por último, y sin abandonar el repaso al habitáculo del Lucid Air Sapphire, se han revestido con madera las puertas y el salpicadero, y tanto el volante como el tapizado interior del techo son de Alcantara negra. La guinda está en la instrumentación, que ha sido adaptada especialmente a la medida de los programas de conducción y de las nuevas posibilidades de ajuste de la mecánica.