Hyundai desvela dos deportivos eléctricos, uno de ellos equipado con pila de hidrógeno

Del mismo modo que Audi potencia su gama deportiva RS y BMW o Mercedes-Benz hacen lo propio, respectivamente, con M y AMG, Hyundai lleva años apostando con fuerza por la submarca N, con 'n' de Namyang, la localidad coreana donde se asienta el centro de I+D que desarrolla sus coches, pero también con 'n' de Nürburgring, el mítico circuito alemán donde la marca perfecciona sus versiones más extremas. Así, la gama de Hyundai se ha ido poblando de modelos tan dinámicos como los dos i30 N (compacto de cinco puertas y Fastback), el Kona N o el más reciente i20 N, y en breve las alternativas de altas prestaciones se extenderán a la familia eléctrica, empezando por la versión más veloz del Ioniq 5, denominada Ioniq 5 N y que llegará en 2023, compartiendo muy probablemente una buena parte de la mecánica con el brutal Kia EV6 GT: batería de 77,4 kWh, un motor eléctrico en cada eje para sumar 585 CV y asegurar la tracción total... Pronto sabremos todos los datos.

Y ese Ioniq 5 N no estará solo en la parcela más deportiva de Hyundai, pues la firma coreana ha visto ahí un filón y seguirá lanzando modelos de corte radical, como los que acaba de desvelar, todavía en fase de prototipos y no confirmados al cien por cien como modelos de producción en serie: el RN22e, un eléctrico de altos vuelos que toma como base el Ioniq 6 recientemente presentado, y el N Vision 74, vehículo ultradeportivo y eléctrico inspirado en el Hyundai N 2025 Vision Gran Turismo y en el prototipo Hyundai Pony Coupe de 1974, y que recurre a una pila de hidrógeno para alimentar su mecánica.

RN22e: ¿rival del Porsche Taycan?

Cuando semanas atrás era desvelado el Ioniq 6, una aerodinámica berlina deportiva que comparte con el Ioniq 5 la plataforma de coches eléctricos E-GMP, muchos creyeron ver en él un posible rival del Porsche Taycan; y ahora esa presunción toma más cuerpo con el RN22e, que la firma coreana define como su "primer laboratorio rodante de Hyundai N desarrollado sobre la plataforma E-GMP". Al parecer, los ingenieros de la submarca N han continuado optimizando el rendimiento en curva, y para ello recurren a tecnologías como el diferencial electrónico de deslizamiento limitado (e-LSD) o el diferencial mécanico Corner Carving de tipo Torsen, disponibles en la mayoría de los modelos N. Debido a la enorme batería situada bajo el suelo y entre los ejes, el peso del RN22e es inevitablemente mayor que el de otros Hyundai N ya existentes, y por eso se ha trabajado en una vectorización del par específica mediante un doble embrague. Además, las piezas impresas en 3D reducen la masa del conjunto sin perder rigidez, para garantizar un buen comportamiento en curva. Equipado con tracción total (AWD), el RN22e proporciona una distribución optimizada del par según los diferentes modos de conducción, que permiten a los usuarios elegir cómo se reparte la fuerza entre las ruedas delanteras y traseras.

Asimismo, y para mejorar la capacidad del RN22e en circuito, los ingenieros se han centrado también en la refrigeración y la resistencia de la frenada; y se ofrecen unos ajustes optimizados para rodar en pista. Con pinzas monobloque de cuatro pistones y discos de 400 milímetros, el RN22e puede resistir en las frenadas los kilos extra de su pesado sistema eléctrico; y según los responsables de Hyundai N, utilizarán el RN22e para estudiar cómo se puede conservar la capacidad de la frenada regenerativa al tiempo que se garantiza la mayor precisión en los derrapes y el ataque más directo de las curvas. Lógicamente, se refieren a conducción en circuito.

Y las innovaciones del RN22e sobre las que trabajan no terminan ahí, pues equipa el sistema N Sound+, que genera sonido desde los altavoces interiores y exteriores para una sensación de conducción más dinámica. Además, la tecnología N e-shift añade al N Sound+ la sensación sonora del cambio de marchas, aunque cada conductor podrá configurar a su gusto las impresiones percibidas.

El RN22e aprovecha buena parte de las avanzadas características aerodinámicas del Ioniq 6, pero Hyundai N añade detalles inspirados en la competición, empezando por una distancia al suelo más baja. Además, la parte inferior del paragolpes ha sido rediseñada para incrementar la deportividad y personalizar el frontal, mejorando de paso la refrigeración y la aerodinámica.

Con 4.915 milímetros de longitud, 2.023 de anchura y 1.479 mm de altura, el RN22e quiere ser el germen del modelo eléctrico más extremo de Hyundai, como demuestra la parte mecánica del prototipo con el que se trabaja en Namyang, dotado de dos motores (uno delante y otro detrás) que suman 430 kW (585 CV) y 740 Nm de par máximo, y que le sirven para alcanzar su velocidad máxima, autolimitada, de 250 km/h. La batería tiene 77,4 kWh de capacidad y gracias a su tecnología de carga rápida de 400 V y 800 V, pasar del 10 al 80% de la capacidad lleva solo 18 minutos.

N Vision 74: deportivo de hidrógeno

El N Vision 74 es otro laboratorio rodante, pero en este caso no es un eléctrico de batería (BEV) como el RN22e, sino un eléctrico de pila de combustible de hidrógeno (FCEV) que subraya la apuesta de la compañía coreana por este tipo de tecnología como solución de futuro. O, en realidad, una mezcla de ambas soluciones, como después veremos.

En términos de diseño, el N Vision 74 rinde homenaje al 'concept car' Pony Coupe presentado por Hyundai en 1974, desarrollado por el reputado diseñador de automóviles Giorgetto Giugiaro. Y aunque al final no llegó a producirse, su estilo siempre se mantuvo como un referente para la marca, que ahora lo recupera para este innovador prototipo, pero asociado a tecnologías de nuestros días, como la electrificación a partir de hidrógeno o la iluminación mediante píxeles paramétricos, como los empleados en el Ioniq 5. Y en su interior también se produce esa combinación de diseño clásico y de vanguardia, pues el N Vision 74 mezcla instrumentación digital con botones analógicos.

Con unas dimensiones de 4.952 milímetros de longitud por 1.995 mm de anchura y 1.331 mm de altura, es el primer prototipo real de alto rendimiento de Hyundai N construido con el sistema de pila de hidrógeno, aunque realmente la submarca N lleva años dándole vueltas a la posibilidad de usar una pila de combustible en sus modelos, como se demostró con el 'concept car' Hyundai N 2025 Vision Gran Turismo, presentado en 2015 coincidiendo con el estreno de la marca N y que imaginaba un futuro coche de altas prestaciones basadas en el hidrógeno.

Sólo siete años después Hyundai N presenta el N Vision 74, en el que los ingenieros de la marca han ido un poco más allá al desarrollar una arquitectura híbrida que combina una batería eléctrica con un sistema de pila de combustible de hidrógeno colocado en una disposición completamente nueva, y que entre otras ventajas permite mejorar la eficiencia de la refrigeración. En concreto, la pila de combustible tiene un rendimiento neto de 85 kW y una potencia máxima de 95 kW, y se alimenta del hidrógeno almacenado a alta presión en tanques con 4,2 kilos de capacidad, que podemos llenar en solo cinco minutos.

Y la originalidad del N Vision 74 es que también equipa una batería de 62,4 kWh, dotada de carga rápida de 800 V, de manera que podríamos elegir entre una fuente de energía o la otra en función de las diferentes condiciones de conducción. Aunque siempre con tracción trasera para potenciar el rendimiento deportivo, ya que emplea motores gemelos en el eje posterior que suman más de 500 kW (680 CV) y 900 Nm de par máximo. Hyundai habla de una velocidad máxima superior a 250 km/h y de una autonomía por encima de los 600 kilómetros, aunque sin específicar cuánto de ese alcance corresponde al hidrógeno y cuánto a la batería eléctrica, o si es un alcance combinado, en cuyo caso el dato impresionaría algo menos.