Mercedes-Benz nos adelanta cómo será uno de sus próximos deportivos eléctricos

La gama actual de Mercedes-AMG, división deportiva de Mercedes-Benz, incluye el modelo AMG GT, una berlina cupé de cuatro puertas que corona su oferta mecánica con la versión GT 63 S E Performance, una auténtica bestia con 843 caballos de potencia capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y de alcanzar los 316 km/h de velocidad punta. Y a pesar de eso, recibe la etiqueta ECO de la DGT, pues su corazón es híbrido, ya que combina un 4.0 V8 Biturbo de 639 CV con dos motores eléctricos, uno de solo 13,6 CV que va unido al cigüeñal, opera como motor de arranque y alimenta de energía a la climatización y al sistema de iluminación, y otro de 204 CV que está situado en el eje trasero, dentro de la carcasa del diferencial de deslizamiento limitado. Y su batería de 6,1 kWh de capacidad le permite cubrir hasta 12 kilómetros en modo eléctrico. Pero este es solo el primer paso en el proceso de electrificación en la firma de Affalterbach.

Porque Mercedes-AMG trabaja en el desarrollo de su futura gama 100% eléctrica, cuyo denominador común será la plataforma AMG.EA, utilizada por vehículos que empezarán a llegar en 2025. Y uno de ellos podría ser el sucesor del antes citado AMG GT, un modelo al que le faltarían todavía tres años y del que ahora sabemos algo más gracias al AMG Vision, un 'concept car' que acaba de ver la luz. La larga distancia entre ejes, sinónimo de una poderosa batería, apareja unos voladizos bastante cortos, y la carrocería se distingue también por sus formas musculosas y anchos 'hombros', las enormes ruedas sobre llantas de 22 pulgadas y unas ópticas muy innovadoras tanto delante como detrás, todo ello firmado por el equipo del diseñador Gorden Wagener, máximo responsable de ese departamento en Mercedes-Benz Group, que de este modo crea el primer eléctrico puro para la 'submarca' deportiva alemana.

Porque si con el reciente EQXX Vision, un eléctrico que anuncia más de 1.000 kilómetros de autonomía entre recargas, priorizaban la eficiencia y el lujo, con el AMG Vision se ha querido crear directamente un 'supercar' eléctrico, un coche prestacional que genere deseo. Y se ha diseñado como una escultura, modelado prácticamente sin cortes en su carrocería y acabado en pintura Alubeam que se extiende hasta los cristales para generar un aspecto monolítico y aerodinámico, aunque en la marca alemana no hablan todavía de un coeficiente de penetración Cx concreto. Por ejemplo, la zaga incorpora un alerón activo que variaría su posición en función de las necesidades de la conducción.

Las ópticas traseras, activas tanto de día como de noche, son particularmente personales, con tres elementos circulares a cada lado, a modo de tubos, y un enorme difusor aerodinámico inferior, pintado en negro para contrastar. Asimismo, los diseñadores han recurrido a algunos tonos de pintura tomados del monoplaza Mercedes-AMG Petronas de Fórmula 1. Pero de dimensiones exactas nada se dice todavía, aunque desde la marca de la estrella se insiste en que la carrocería es mucho más baja que la de un Mercedes-Benz EQS, por ejemplo, pero manteniendo una cota de altura interior generosa para sus cuatro plazas pese a distribuir bajo el suelo la batería.

Además, la firma de Affalterbach ha explicado que la nueva plataforma AMG.EA nacerá vinculada a una nueva generación de propulsores eléctricos desarrollados en colaboración con YASA, una empresa subsidiaria que está poniendo a punto el nuevo motor Axial Flux, más compacto y ligero que los motores eléctricos convencionales pero con una potencia superior.