El BMW i7 se muestra por primera vez: viajes cero emisiones con el lujo de la Serie 7
Esta es la primera vez que la firma alemana deja ver su nuevo i7, una lujosa berlina eléctrica que llegará el año que viene como respuesta al Mercedes-Benz EQS
BMW deja ver por primera vez, aunque bajo un camuflaje todavía muy contundente, su futura berlina totalmente eléctrica i7, con la que la firma bávara está desarrollando las pruebas finales de sus sistemas de propulsión y suspensión utilizando unidades de preserie; un proceso que no solo se desarrolla coincidiendo con el test invernal, al que corresponden las imágenes hechas públicas ahora por BMW, sino también en carreteras de medio mundo y en diversos circuitos.
En plena transformación hacia la movilidad eléctrica, BMW presentará durante el próximo año su primera berlina de gran lujo totalmente eléctrica, el i7, que se sitúa claramente por encima de la otra berlina eléctrica de la casa, el i4. Pero para llegar a eso, primero ha de pasar por varias fases, y actualmente está siendo sometido a ensayos dinámicos de conducción en las instalaciones del centro de pruebas de invierno de BMW Group en Arjeplog, Suecia. Allí, a pocos kilómetros del Círculo Polar Ártico, los ingenieros y pilotos de la marca encuentran en las superficies heladas y las carreteras cubiertas de nieve las condiciones ideales para la aplicación integrada de todos los sistemas de tracción y suspensión.
Se presenta en 2022
Las duras condiciones invernales de Laponia también suponen un reto especial para cualquier vehículo eléctrico alimentado con baterías. Como ya es conocido, la temperatura idónea para una batería está en torno a los 25 grados centígrados, de modo que estas gélidas regiones son un territorio perfecto para llevar al límite las posibilidades de un eléctrico, pues resulta clave conocer si las baterías y el resto de los componentes electrónicos del coche son capaces de funcionar a pleno rendimiento a temperaturas bajo cero. El propulsor eléctrico, la batería de alto voltaje, la electrónica de potencia, la tecnología de carga y el sistema de regulación de la temperatura del BMW i7 corresponden a la quinta generación de la tecnología BMW eDrive, que ya puede disfrutarse en el nuevo iX, por ejemplo.
Además, los componentes de la suspensión, los sistemas de dirección y de frenado y los de dinámica de conducción y de estabilidad del i7, que serán después aplicados a la futura generación del BMW Serie 7, están diseñados para que el cliente perciba el coche a un nivel superior en cuanto a lujo, según la marca. Por todo esto, el invernal paisaje de Laponia es perfecto para las pruebas. Durante los recorridos por las carreteras nevadas se pueden probar y optimizar todas las funciones bajo condiciones extremadamente exigentes de cara a conseguir la experiencia de conducción que ha caracterizado a BMW durante los últimos años. Además, se utiliza para las pruebas la superficie de lagos helados, con su bajo coeficiente de fricción, para conseguir un ajuste particularmente preciso de los sistemas de control de la suspensión. La dirección se somete a una meticulosa puesta a punto, al igual que las numerosas funciones del sistema de control dinámico de estabilidad y la interacción regulada entre el freno hidráulico y la deceleración que se consigue a través de la frenada regenerativa.
Con el i7, BMW continúa con su ofensiva eléctrica en el segmento de lujo y responde a su más directo rival, el Mercedes-Benz EQS, que se ha adelantado prácticamente un año. ¿Podemos comparar algo de ellos? Poco todavía, aunque algo es algo: en su primera información, BMW explica que el consumo medio WLTP del i7 oscilará, según la versión, entre 19,5 y 22,5 kWh/100 km, cuando el EQS de la firma de la estrella homologa 16,7 kWh/100 km en el caso de la versión 450+ de 333 CV de potencia, 18,5 kWh/100 km en el 580 4Matic de 523 CV y 21,5 kWh/100 km en el brutal 53 4Matic+ de 658 CV.
BMW deja ver por primera vez, aunque bajo un camuflaje todavía muy contundente, su futura berlina totalmente eléctrica i7, con la que la firma bávara está desarrollando las pruebas finales de sus sistemas de propulsión y suspensión utilizando unidades de preserie; un proceso que no solo se desarrolla coincidiendo con el test invernal, al que corresponden las imágenes hechas públicas ahora por BMW, sino también en carreteras de medio mundo y en diversos circuitos.