El gesto al encender el coche que muchos españoles hacen y que puede causar averías muy caras

• Adiós a frenar antes de un radar: la estrategia poco conocida de la DGT para multarte
• Adiós a los triángulos de emergencia: por esta razón deberás llevar siempre pilas en tu coche

Cada mañana, miles de conductores en España arrancan el coche y emprenden la marcha de inmediato, sin saber que este gesto aparentemente inofensivo puede tener consecuencias muy costosas. Según advierte el mecánico del perfil @tallerredista en TikTok, lo recomendable es esperar entre 30 y 40 segundos con el motor al ralentí antes de moverse. Esa pausa permite que el aceite fluya correctamente por todo el sistema y proteja las piezas internas del motor. Saltarse este paso tan sencillo puede acarrear desgastes importantes con el paso del tiempo.

En su vídeo, el profesional muestra el caso de un motor dañado por esta práctica. El propietario solía arrancar y salir sin dar margen al lubricante para hacer su trabajo. El resultado fue un desgaste acusado en los casquillos de biela y en el cigüeñal, que tuvo que ser rectificado a 0,25. Reparaciones así no solo suponen una factura elevada, sino que también implican desmontajes y ajustes de precisión. Todo ello podría haberse evitado con un poco de calma al iniciar la jornada.

No se trata de una recomendación anecdótica, sino de un consejo respaldado por la experiencia en talleres. El aceite necesita unos segundos para alcanzar presión y temperatura adecuadas, especialmente tras horas de inactividad. Si se pisa el acelerador demasiado pronto, se fuerza al motor a trabajar sin la lubricación necesaria, lo que puede provocar daños que van desde rayaduras hasta gripajes. La prevención, en este caso, está al alcance de todos.

Los mecánicos coinciden: esperar medio minuto tras arrancar es una forma sencilla de alargar la vida útil del vehículo. Con esta práctica, las piezas móviles reciben la protección necesaria antes de enfrentarse al esfuerzo de la conducción. Aunque muchos lo pasen por alto por las prisas, dedicar unos segundos al cuidado del motor puede evitar averías que superan los 2.000 euros. El mantenimiento empieza en los pequeños hábitos, y este, en concreto, puede marcar la diferencia entre un coche fiable y uno con problemas constantes.