Seguro que no lo sabías: esto es lo único que funcionó en las carreteras de España durante el apagón

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El histórico apagón que dejó sin electricidad a toda España este lunes a partir de las 12.30 horas también provocó un colapso en las principales vías del país. Semáforos apagados, rotondas bloqueadas y tráfico descontrolado fueron la tónica general en muchas ciudades y carreteras. Sin embargo, contra todo pronóstico, hubo un elemento que siguió operando con normalidad y que muchos conductores no esperaban.

Se trata de los radares de velocidad. Durante las horas en las que los semáforos no funcionaron, numerosos conductores pensaron que, al no haber electricidad, los radares estarían fuera de servicio. Una creencia errónea que podría costarles una multa en los próximos días. Y es que la Dirección General de Tráfico (DGT) lleva años modernizando sus sistemas para garantizar su funcionamiento incluso en situaciones extremas como la vivida recientemente.

Los radares que sobrevivieron al apagón

En 2023, la DGT presentó importantes mejoras tecnológicas en sus dispositivos de control de velocidad. Aproximadamente el 90% de los radares emplea tecnología Doppler, que funciona mediante ondas electromagnéticas contra los vehículos en movimiento.

Gracias a la incorporación de paneles solares y conectividad por redes 3G, 4G y 5G, estos cinemómetros han superado las antiguas limitaciones de la dependencia de acometidas eléctricas y fibra óptica. Esto ha permitido que se ubiquen en puntos estratégicos, incluso en lugares remotos donde antes era inviable su instalación.

Cuando un radar detecta una infracción de velocidad, genera automáticamente un fichero con los datos captados: fecha, hora, localización, velocidad y fotografía del vehículo. Estos datos viajan de forma encriptada hasta el Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas (CTDA) de la DGT en León, donde son verificados antes de emitir una sanción.

Estos dispositivos que funcionan gracias a las placas solares permiten a la DGT continuar sancionando excesos de velocidad incluso en pleno apagón, ya que no dependen directamente de la red eléctrica convencional. Así, los conductores que confiaron en pasar desapercibidos podrían recibir en los próximos días una notificación inesperada en sus domicilios.