Si miramos la hemeroteca del 24 de marzo de 2007, la opinión era unánime: la carrera deportiva de Isidre Esteve se había acabado por completo. El piloto, que había perdido la movilidad de cintura para abajo tras un accidente en el Campeonato de España de Raids, seguramente diría adiós a la alta competición para siempre. A día de hoy, sin embargo, no solo sigue compitiendo, sino que está afrontando su vigésimo Dakar. ¿Qué ha pasado para que todo esto sea posible?
La historia de Esteve se compone de varios ingredientes: esfuerzo, trabajo duro, tecnología, innovación y, sobre todo, una superación al alcance de muy pocos. Su particular remontada comenzó cuando fue consciente de que ya no podría subirse a una moto, así que optó por los coches. Pero no fue tan fácil, ya que la carga del cuerpo sobre los glúteos le provocaba diversas úlceras. Fue entonces cuando la tecnología entró en acción: el piloto contó con Nubolo, un dispositivo que iba a solucionar sus problemas. Se trataba de un cojín antiescaras de aire, en el que un sistema electrónico favorecía la circulación sanguínea. De este modo, conseguiría evitar las úlceras por presión.
Merced a este invento, desarrollado exclusivamente para él, a día de hoy puede estar pilotando hasta 20 horas seguidas sin sufrir problemas. Y con esa ventaja acude a su cita número 20 (10 en la categoría de motos y otras 10 en la de coches) en el Dakar, donde huye de la autocomplacencia: “Estar en la línea de salida junto al resto de pilotos punteros, afrontar cada día las mismas dificultades y aparecer en la misma clasificación, sin ningún tipo de bonificación por mi discapacidad, tiene más valor para nosotros”, asegura. “Cuando estoy dentro del coche y en la pista, no existe ningún tipo de barrera; lo que hacemos es competir y disfrutar al máximo de un deporte que amamos”.
Esteve pilotará con el Repsol Toyota Rally Team, que en 2025 afronta la tercera participación con un Toyota Hilux T1+ de la categoría máxima, Ultimate. Aunque el coche técnicamente no cambia, sí dispone de una innovación esencial: el equipo viene utilizando desde 2021 un combustible que ya ha alcanzado un 70% de origen renovable. Para el Dakar 2025, se le añadirá un lubricante renovable para el motor, también desarrollado en el Technology Lab de la compañía multienergética.
Lo cierto es que el piloto ya estuvo con Repsol en sus años en moto y ahora comparten este proyecto en coche. "Sentimos que formamos parte de esta transición energética, que contribuimos plenamente a este cambio. Nos queda la satisfacción de ser más eficientes en este sentido y de ayudar a tener unos productos de alta calidad que permitan ser lo más competitivos posible. Estamos muy contentos de contribuir de una forma tan directa a este cambio". Y todo esto, evidentemente, sin olvidar el aspecto más importante: el competitivo. "Tenemos confianza en el coche, en el equipo y sabemos cómo tenemos que hacer las cosas. Nuestro objetivo sigue siendo estar entre los 20 primeros. Sería un resultado extraordinario y creo que es factible", valora el piloto de Oliana.
Sea cual sea la forma de moverse, lo evidente es que Esteve no se pone ningún fin: "No imaginaba una trayectoria deportiva tan larga. Y lo mejor es no saber cuándo terminará, porque mi motivación por correr continúa intacta desde el día en que empecé", sentencia.
Combustibles renovables para la prueba más exigente
La apuesta de Repsol por el desarrollo de combustibles renovables y su inclusión en el Dakar no es precisamente nueva. Además del Repsol Toyota Rally Team, la multienergética estrena este año un nuevo acuerdo con el Toyota Gazoo Racing, el equipo oficial de Toyota, que el año pasado ya contó con gasolina con un 70% de origen renovable, y el objetivo es continuar esta evolución hasta alcanzar el 100%.
En 2025, con pilotos como Lucas Moraes (podio en el Dakar en 2023) y Seth Quintero (una de las grandes promesas de la competición), el equipo es uno de los principales candidatos a la victoria. Por su parte, Joao Ferreira también es otro de los jóvenes talentos que apunta a lo más alto del Dakar en los próximos años. Actualmente, el piloto portugués compite al volante de un Mini John Cooper Works Plus y emplea combustible diésel 100% renovable.
"Una prueba tan extrema como el Rally Dakar nos sirve para desarrollar y probar combustibles y lubricantes renovables, con las máximas prestaciones en las condiciones más duras", afirma Javier Ariztegui, director de diseño de producto, sistemas energéticos y deep tech de Repsol. "Eso es fundamental, porque nos da una información extraordinariamente valiosa para crear los productos que ponemos en manos de nuestros clientes".
Durante más de 20 minutos, Álvaro de Cózar y Dolores Cárdenas, investigadora de Repsol Technology Lab, desvelan los entresijos de la historia, explicando qué hay de cierto en el tema y cómo los avances en combustibles renovables están cambiando la forma en que entendemos la energía. Además, esta conversación permite conocer detalles del proceso creativo del pódcast, como que la propia Cárdenas sirvió de inspiración para uno de los personajes de La bala mágica, la científica Dolores Arístegui.
“Estamos usando residuos orgánicos, cosas muy cercanas a todos como puede ser la cáscara de plátano o aceite de cocina usado, para a través de diferentes procesos de transformación conseguir combustible que ya se están usando en los vehículos: el Diesel Nexa 100% renovable, ya disponible en más de 600 estaciones de servicio de la península ibérica”, apunta Cárdenas.