Ofrecido por

Marc Márquez se prepara para conducir una moto con combustible renovable y no es el único: estos pilotos ya lo hacen

Por EC Brands

MARC MÁRQUEZ SE PREPARA PARA CONDUCIR UNA MOTO CON BIOCOMBUSTIBLE

MotoGP, el Dakar, la F4 francesa… Los deportes de motor se preparan para reducir sus emisiones incrementando el uso de estos combustibles sostenibles, que son compatibles con los motores tradicionales

Jueves, 10 de noviembre de 2022. El piloto español Marc Márquez, seis veces campeón del mundo de MotoGP, coge su moto y da doce vueltas al Circuito de Madrid Jarama-RACE. Podría ser un entrenamiento cualquiera, pero en realidad no lo es. Su moto no es la de siempre: en este caso está usando una Honda RC213V-S, cuya curiosidad más llamativa reside en el depósito: no lleva combustible tradicional, sino un combustible renovable diseñado a medida por Repsol que reduce de manera significativa las emisiones netas de CO2.

Esta apuesta no es baladí: a partir de 2024 las MotoGP deberán usar un mínimo del 40% del combustible de origen no fósil, una cifra que llegará al 100% en 2027. Es un ejemplo, entre otros, del proceso de descarbonización que están llevando a cabo diversos deportes de motor de competición, que está sirviendo de banco de pruebas para generalizar el uso de estos nuevos combustibles en todos los sectores del transporte.

La clave de este proceso son los biocombustibles avanzados, un tipo de combustible renovable desarrollado a partir de residuos de origen orgánico procedentes de los aceites de cocina ya usados, los aceites vegetales residuales, la industria agroalimentaria, la agricultura o la ganadería. Con ellos se puede reducir hasta un 90% las emisiones netas de CO₂ respecto a los combustibles tradicionales, pero sus ventajas van más allá: "Además de reducir la huella de carbono, estos combustibles renovables tienen propiedades muy parecidas, casi idénticas, a los combustibles que hoy utilizamos, por lo que son totalmente compatibles con los motores de combustión de nuestros vehículos", explica Dolores Cárdenas, experta en Desarrollo de Combustibles en Technology Lab, el centro de innovación de Repsol.

Así se desarrollan los biocombustibles avanzados

01/04

Recurso de una sombra
Papeleras
Fábrica
Bidones
Medios de transporte

Recogida de residuos

Los residuos de la industria agroalimentaria, la agricultura, la ganadería, los aceites de cocina o la biomasa, entre otros, forman parte del primer paso.

Tratamiento de los residuos

Pueden tratarse de dos maneras: en una refinería o en procesos de producción de estos biocombustibles.

Biocombustibles avanzados

Tras el tratamiento se obtienen, en función de la materia prima y el proceso, productos como bioetanol, biometanol, hidrobiodiésel, BioGLP, Biojet, Biogasolina o biogás.

Aplicaciones

Se pueden aplicar a coches particulares, pero también a otros grandes vehículos como camiones o, incluso, aviones y barcos.

Isidre Esteve: combustible renovable para el Dakar

Rally Dakar

El de Marc Márquez no es el único ejemplo del compromiso del mundo del motor con la reducción de emisiones. Isidre Esteve, un clásico español en el Rally Dakar, correrá a partir del 31 de diciembre por decimoctava vez esta carrera. Y lo hará a bordo de un Toyota Hilux T1+ en el que, de nuevo, el depósito almacena su mayor virtud: el 75% de su combustible será de origen renovable. Y no es la primera vez. El año pasado, el piloto de Repsol Rally Team ya utilizó un combustible con un 50% de composición renovable.

Esta iniciativa se enmarca en la estrategia del propio Dakar para ser más sostenible. En 2021, la carrera anunció su intención de ser neutra en carbono, principalmente mediante dos vías: el impulso de carburantes más sostenibles y el empleo de energías renovables en sus infraestructuras. Las marcas fabricantes, por tanto, llevan un tiempo remodelando sus vehículos y haciendo pruebas de movilidad eléctrica (Audi, Acciona), híbrida (Renault) o con otros combustibles no fósiles (Astara Team). El caso del Dakar ha servido de espejo para el Mundial de Rally, que desde 2021 trabaja en el desarrollo de diversos tipos de combustibles renovables para su uso en las carreras

F4 francesa: toda una competición renovable

Carrera de F4 francesa

Si hay un ejemplo de deporte de motor de competición sostenible, ese es el de la Fórmula 4 francesa, una de las competiciones que permiten ver de cerca a los jóvenes talentos del automovilismo mundial. Tanto en las pruebas de pretemporada como en las carreras disputadas a lo largo de 2022, todos los coches han utilizado biocombustibles avanzados 100% renovables. En total, fueron más de 30.000 litros producidos en el centro de innovación de Repsol cumpliendo los parámetros de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA).

Su ‘hermana mayor’, la Fórmula 1, también se ha puesto manos a la obra. La competición, que lleva varias temporadas incorporando a sus carburantes un contenido mínimo del 5,75% de biocombustible, ha incrementado este año la ambición al 10% y pretende alcanzar las cero emisiones netas en 2030.

No es casual que estos deportes estén albergando innovaciones de todo tipo a la hora de descarbonizarse. “En el mundo del deporte del motor encontramos los desarrollos más punteros. Es un entorno en el que confluye la colaboración tecnológica entre fabricantes de motores y de combustibles”, asegura Dolores Cárdenas. Además, “nos permite la celeridad que necesitamos para probar diferentes cosas en las condiciones más extremas a las que queremos exponer a nuestros productos”. Por ello, “es un banco de pruebas excepcional para desarrollar y evaluar nuestros productos”, sobre todo teniendo en cuenta que estos combustibles son aptos para los motores de los vehículos actuales, sin necesidad de realizar cambios en el vehículo y manteniendo las mismas prestaciones”.

Todo ello, en definitiva, dentro de una estrategia en la que todas las iniciativas son bienvenidas en la descarbonización, tanto de los deportes de competición como de la movilidad en general. Y es que "los combustibles renovables van a jugar un papel fundamental, pero no estarán solos en este reto, ya que otras alternativas, como la electrificación o el hidrógeno contribuirán a alcanzar los objetivos", concluye Cárdenas.