Los cambios de la DGT a los que se enfrentan los conductores con gafas y lentillas

Con la entrada en vigor de la nueva Ley de Tráfico, son muchas las novedades que han cambiado respecto a las normas que regían hasta el momento. Por eso, es importante revisar ciertos puntos para actualizarse y no llevarse una desagradable sorpresa en forma de multa.

Uno de esos puntos va dirigido a los conductores que usan gafas o lentillas. Esto puede suponer un verdadero problema que muy pocas personas conocen. La clave se encuentra en la parte trasera del carné de conducir, concretamente en el punto 12. Si la casilla aparece vacía, no hay problema.

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Pedro Martín

Si aparece la numeración 01.01, significa que el conductor necesita obligatoriamente gafas, mientras que si el código existente es 01.02, se indica la necesidad de utilizar lentillas. En el caso de que aparezca el código 01.06 se dará a entender que el conductor puede conducir tanto con lentillas como con gafas.

Multa de 200 euros

El problema vendría cuando un agente pueda comprobar en un control que el conductor no lleva gafas o lentillas como marca su carné de conducir, bien porque no coinciden con la realidad y lleva lentillas cuando su carné obliga a llevar gafas o viceversa o porque directamente no las lleva puestas a la hora de conducir.

Esto supondría una infracción grave y acarrearía una multa de 200 euros. Para evitar este tipo de malentendidos, lo que hay que hacer es actualizar los datos de la documentación. Para ello, hay que pasar un examen psicotécnico homologado por la Dirección General de Tráfico (DGT) donde se realizará una revisión que permitirá apreciar si hay variaciones de cualquier tipo en las capacidades visuales del conductor.

Infringir la obligatoriedad de llevar gafas o lentillas podría conllevar una multa de 200 euros

Otro de los puntos relacionados con el uso de gafas o lentillas a la hora de conducir es si es obligatorio o no llevar un repuesto de estas en el coche. Actualmente, no es obligatorio, pero sí recomendable, ya que en cualquier momento puede ocurrir un imprevisto y tener que recurrir a unas gafas o lentillas extra. Lo mismo ocurre con las gafas de sol, con el fin de evitar deslumbramientos, sobre todo al atardecer o en las primeras horas de la mañana.