Cuidado con los nuevos límites de velocidad en ciudad

Este martes 11 de mayo cambian los límites de velocidad en todas las ciudades españolas, lo que va a hacer cambiar el modo de utilizar el automóvil en el entorno urbano. Desde mañana, todas las vías urbanas que no tengan un doble carril en cada sentido verán su velocidad limitada a 30 km/h, mientras que las zonas de calzada compartida entre peatones y coches tendrán un límite de velocidad genérico de 20 km/h.

Hasta ahora, el límite genérico en todas las calles de las ciudades españolas era de 50 km/h, pero este límite se va a reducir hasta los 30 km/h a partir de ahora salvo algunas excepciones. Por una parte la velocidad se limita aún más en las zonas de calzada compartida, aquellas en las que no hay una acera para los peatones y una calzada separada para los coches, sino que es una zona compartida entre ambos, las zonas peatonales. En este caso, la velocidad se limita a 20 km/h.

La otra exclusión al límite de los 30 km/h genéricos para las ciudades se refiere a las calzadas de las grandes vías que cuenten con al menos dos carriles por sentido de circulación. En este caso la velocidad se mantiene en el límite de los 50 km/h. En cualquier caso en ninguna vía urbana española se pueden superar esos 50 km por.

Pero hay un detalle importante, en las vías que tienen un carril bus/taxi y uno de circulación en cada sentido, se mantiene ese nuevo límite genérico de 30 km/h. Sobre este límite genérico los ayuntamientos pueden hacer alguna excepción, aumentar hasta los 50 km/h ese valor en algún tramo concreto o reducir estos valores si hay alguna razón específica para ello. Pero deberán anunciarlo con una señalización específica.

Esta limitación supone un gran cambio en la manera de entender la movilidad urbana y va a suponer un notable aumento de los atascos, lo que va a reducir aún más la velocidad media de circulación en las vías urbanas. También aumentará considerablemente el tiempo necesario para realizar los desplazamientos.

Nuevas multas

Con estos nuevos límites también aumenta, lógicamente, el importe de las multas. La sanción prevista por circular entre 31 y 50 km/h en ciudad es de 100 euros sin puntos. Circular por encima de 51 km/h ya supone la pérdida de dos puntos y una sanción económica de 300 euros. Hacerlo a más de 70 km/h supone 6 puntos del carné de conducir y 500 euros de multa.

Por lo que respecta a las travesías de pueblos, en ellas si se mantiene ese límite genérico de 50 km/h, aunque los ayuntamientos pueden reducir esa cifra en algún caso concreto. Y si hablamos de las autovías o autopistas en su paso por las zonas urbanas, se mantiene el mismo límite genérico previo, de 80 km/h, pero los ayuntamientos lo pueden cambiar, aunque sin superar en ningún caso los 120 km/h de límite máximo en las carreteras españolas.

Estos son los cambios más importantes que se aplican desde mañana en las calles de las ciudades españolas, pero también hay que recordar otro cambio importante en los límites de velocidad. Se trata de la eliminación del margen de 20 km/h para poder realizar un adelantamiento en una carretera, algo que ha creado una gran polémica. Los detractores de la medida plantean que esto conllevará un incremento de la siniestralidad vial porque para tratar de adelantar a un vehículo más lento sin poder aumentar la velocidad durante la maniobra habrá que hacerlo en las zonas más peligrosas, en una zona en curva o con alguna limitación especial para los vehículos más lentos.

Pero también creará un problema de ansiedad para los conductores por qué tendrán que hacer muchos kilómetros detrás de un camión sin poder adelantarle porque ahora la mayor parte de los vehículos industriales pueden circular a la misma velocidad máxima que el límite de la carretera. Eso ocurre salvo en zonas de curvas o subidas pronunciadas. Y por ello los adelantamientos se harán en esas zonas, que son precisamente las más peligrosas.

Más radares

Por otra parte la Dirección General de Tráfico sigue haciendo de la velocidad su caballo de batalla único para reducir la siniestralidad y también para aumentar su recaudación por excesos de velocidad. El pasado sábado terminó el estado de alarma genérico en España y desde ahora se autorizan los desplazamientos entre las diferentes comunidades autónomas.

La DGT ha aprovechado la pasada semana para instalar nuevos radares en las carreteras y también para revisar y volver a poner operativos los radares de toda la geografía española. Y durante esta semana pone en marcha una campaña de control de velocidad en todas las carreteras del territorio español de las que tiene jurisdicción. Es decir todas menos las de Cataluña y País Vasco.

Si siempre hay que tener mucho cuidado con la velocidad, los límites hay que cumplirlos y no hay excusa que valga, pero desde ahora habrá que estar aún más pendientes, porque hay nuevos límites, más estrictos. Pero también porque en los próximos meses habrá un control exhaustivo por parte de las autoridades para verificar que se cumplan estos nuevos límites.