Así te protege a ti ya tu perro cada sistema de seguridad para el coche, según Race y la DGT

La operación retorno está a la vuelta de la esquina y aunque se trate de un año atípico, el despliegue de medios que la DGT realizó con el cambio de quincena el pasado 15 de agosto demuestra que Tráfico espera que este 2020 también se acumulen los coches en las carreteras en los últimos días del verano, cuando quienes partieron de las grandes ciudades u otros puntos del país ese día, se dispongan a volver a su casa para afrontar el todavía en el aire nuevo curso.

Por ello, aprovechando que se acerca el momento de cargar las maletas y volver a casa, desde El Confidencial hemos recopilado la información publicada en el último número de la revista de la DGT en la que, utilizando los datos que se desprenden de las pruebas realizadas por los expertos del club de automovilistas RACE, especifican la eficacia de cada uno de los sistemas de retención para perros u otras mascotas en los coches; pues durante el regreso de las vacaciones, la seguridad, tanto para los humanos como para las mascotas, también es importante.

Estas son las conclusiones que ha hecho públicas la DGT y que determinan con qué sistema de seguridad la mascota y el conductor sufrirán menos si tienen un accidente:

• Animal suelto en el coche: Llevar el animal suelto en el coche es la peor de las ideas —tanto por seguridad como porque está sujeto a multas— y por la que opta, según un estudio realizado por Royal Canin y Race con el apoyo de la DGT y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el 1,1% de los conductores. En este caso, según la Dirección de Tráfico, el peor escenario sería tener un accidente si el perro, gato o animal del que se trate se encuentra tumbado sobre la bandeja trasera, detrás del conductor. En caso de colisión el animal saldrá lanzado contra el reposacabezas del conductor y los dos sufrirían lesiones muy graves que pueden llegar a ser mortales.
• Arnés de un solo enganche: Este tipo de arnés se engancha al cinturón de seguridad del coche pero en caso de colisión, la DGT asegura que la hebilla se rompe. Entonces, el perro choca contra el respaldo del asiento provocando lesiones de columna en el conductor y daños graves o mortales en el animal.
• Arnés con dos enganches: Este arnés, en caso de colisión, evita que el perro se desplace hacia delante, con lo que no chocaría con el asiento del conductor ni del acompañante provocando daños extra en ellos. Para evitar que el animal sufra lesiones el arnés debe tener un sistema de unión corto.
• Transportín sujeto con el cinturón de seguridad: En cuanto a los transportines, utilizados sobre todo con perros pequeños o gatos, si se sujetan con el cinturón, en caso de accidente este destroza los puntos de sujeción de la cinta de seguridad y además se rompe su parte superior. El animal sufre lesiones muy graves y los ocupantes del coche soportan también cargas importantes.
• Trasnportín en el suelo del coche: Los transportines de pequeño tamaño suelen encajar muy bien el suelo del vehículo. Como colocados aquí tienen poco espacio para moverse, la energía del impacto se absorbe pronto y apenas se deforma el habitáculo en el que viaja el animal, impidiendo así que sufra lesiones graves.
• Transportín en el maletero: Esta opción es adecuada cuando el animal es más grande y no cabe en un transportín pequeño. En este caso, se debe colocar en posición transversal a la dirección de la marcha y, según la publicación de la DGT, no se puede excluir la posibilidad de que los ocupantes de las plazas traseras del vehículo sufran alguna lesión.
• Rejilla divisoria: Esta rejilla evita que el perro se acerque a la parte delantera del coche y provoque distracciones en el conductor, sin embargo permite que la mascota se mueva con libertad por la parte trasera y en caso de choque, según la posición que tenga el animal en ese justo momento, puede sufrir lesiones muy graves. Lo ideal es combinar el transportín con la rejilla divisoria.