Es noticia
Multas por circular a 11 km/h: Pontevedra impone los límites más severos de España
  1. Motor
EN LAS VÍAS DE PLATAFORMA ÚNICA DEL CENTRO

Multas por circular a 11 km/h: Pontevedra impone los límites más severos de España

La ciudad gallega ha decidido proteger a los peatones en las vías de su casco histórico, en las que comparten el mismo espacio el viandante como cualquier tipo de vehículo

Foto: Multas por circular a 11 km/h: Pontevedra impone los límites más severos de España. (iStock)
Multas por circular a 11 km/h: Pontevedra impone los límites más severos de España. (iStock)

Vas circulando por tu ciudad, en primera y prácticamente con el coche detenido, cuando se te acerca un agente de la autoridad y te avisa: estás yendo demasiado rápido y debes de aminorar la marcha si no quieres ser sancionado. ¿Ficción? Nada más lejos: ya existe en España una ciudad en la que te pueden multar si circulas a velocidades superiores a los 10 kilómetros por hora. Y te puede pasar si vas en coche, en bicicleta o, incluso, en patinete.

Pontevedra se ha convertido en la primera ciudad española en la que circular por encima de 10 km/h puede ser motivo de sanción. De hecho, ya es oficialmente el límite de velocidad más bajo de todo el país, establecido principalmente en una serie de calles del centro de la localidad para evitar que los vehículos puedan poner en peligro a los peatones, con quienes comparten la vía en varias de las calles más céntricas de la ciudad gallega.

Foto: Los 10 radares que más multan de Madrid o por qué la M-30 es una máquina de recaudar. (EFE)

Son calles situadas en el casco histórico de la ciudad y todas ellas de plataforma única, es decir, vías en las que no existe distinción de la acera con respecto a la calzada, por lo que se ha decidido rebajar el límite de velocidad anterior, de 20 km/h, a la mitad. Según explica 'La Voz de Galicia', las calles afectadas son todas las del centro histórico, además de otras como Michelena, Virxe do Camiño, Benito Corbal, Arzobispo Malvar, Herreros, Rúa do Gorgullón, Plaza de España y A Peregrina.

La principal novedad no es solo la reducción de la velocidad, sino que se hace efectiva a todo tipo de vehículos. Es decir, no solo son los coches particulares o los camiones de reparto los que deben de asumir el nuevo límite, sino que otros más relacionados con el turismo como es el caso de las bicicletas, los patinetes o cualquier otro sistema de velocidad municipal. El objetivo es reducir drásticamente las posibilidades de que un peatón resulte herido por un vehículo.

"Se ha demostrado, a través de estudios, que cuanto mayor es la velocidad a la que circula el vehículo, mayor es el número de accidentes que se producen, pero también aumenta exponencialmente la gravedad de los mismos. La prioridad es que se entienda que la calle no es solo un lugar de paso para los vehículos. Por tanto, el que quiera circular por zonas donde tienen preferencia los peatones, deberá de adaptarse a su velocidad", explica Demetrio Gómez, concejal de Movilidad de la ciudad.

placeholder (iStock)
(iStock)

De hecho, el plan inicial incluía restricciones mucho más severas. El primer informe presentado al consistorio, realizado por el experto Fernando Nebot, sugería que la velocidad máxima a la que un vehículo debería de circular en una vía sin aceras en la que también caminan peatones no podría ser superior a los 5 km/h. Sin embargo, Pontevedra ha considerado, al menos de momento, inviable que los vehículos se desplacen a una velocidad tan reducida.

Se han instalado trece nuevas señales en la zona que indican que, desde ahora, la velocidad máxima por el casco histórico de Pontevedra es de 10 km/h por hora. Se trata de una iniciativa pionera en las calles españolas, pero podría no ser la única: en caso de que los datos de siniestralidad se reduzcan de manera importante, seguro que otras ciudades la importan no tardando. El principal objetivo no es otro que proteger la vida del más débil en la carretera, el peatón.

Vas circulando por tu ciudad, en primera y prácticamente con el coche detenido, cuando se te acerca un agente de la autoridad y te avisa: estás yendo demasiado rápido y debes de aminorar la marcha si no quieres ser sancionado. ¿Ficción? Nada más lejos: ya existe en España una ciudad en la que te pueden multar si circulas a velocidades superiores a los 10 kilómetros por hora. Y te puede pasar si vas en coche, en bicicleta o, incluso, en patinete.

El redactor recomienda