Ford Fiesta GLP, el coche ideal para reducir el consumo y las emisiones

Ford lanza al mercado una variante de su modelo Fiesta, de enfoque eminentemente urbano, equipado con tecnología bifuel que permite utilizar gasolina o GLP (gas licuado de petróleo), lo que reduce hasta en un 50% el coste del carburante respecto a su utilización con gasolina. Emplea un motor de 75 caballos y tiene etiqueta ECO, lo que le convierte en un modelo ideal para la ciudad.

Comprar un coche nuevo es, en estos momentos, una situación complicada por la incertidumbre a la hora de decidir qué tipo de tecnología emplear, y cada usuario debe adaptarse a sus circunstancias concretas, al tipo de carburante que puede repostar en su zona y a determinar si su utilización será más urbana o de carretera. Para los que buscan un coche para usar sobre todo en ciudad y que quieren un vehículo con etiqueta ECO y de bajo coste de utilización, Ford ha lanzado al mercado una variante del Fiesta, el 1.1 GLP de 75 CV que combina todas estas características en un modelo accesible.

No se trata de un modelo híbrido, puesto que solo tiene un motor de gasolina. Pero ofrece la posibilidad de utilizar dos carburantes diferentes, gasolina o GLP. Y lo puede hacer de manera alternativa sin el menor problema. El conductor tiene una tecla para elegir si quiere circular con GLP o con gasolina, pero en cualquier caso cuando se acaba el GLP (también denominado Autogas) el coche pasa al modo gasolina de manera automática.

El gas licuado de petróleo es, aproximadamente, un 50% más barato que la gasolina, lo que reduce a la mitad el coste de utilización cuando empleamos este carburante. Y tiene otras ventajas adicionales, como es la etiqueta ECO, la exención del pago del Impuesto de Matriculación y una bonificación en el IVTM que cada año se paga a los ayuntamientos, descuentos en los aparcamientos y demás.

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Mil kilómetros

Este Fiesta tiene además una gran autonomía, ya que el depósito de GLP se añade al de gasolina que se mantiene como en el resto de modelos de la gama Fiesta. Con ello tiene una autonomía de unos 400 km en modo autogás a los que se suman más de 600 km que permite recorrer con el depósito de gasolina completo. Con ello, se pueden recorrer más de 1.000 kilómetros sin tener que repostar.

El depósito adicional de GLP va situado en el hueco de la rueda de repuesto y no quita espacio de carga en el maletero. Eso sí, obliga a llevar un kit antipinchazo en lugar de la tradicional rueda de repuesto o la de emergencia.

Por lo que respecta su repostaje, es muy sencillo. En estos momentos hay en torno a 600 estaciones de servicio en las que se puede repostar autogás, muchas de ellas de Repsol. Para repostar solo hay que abrir la tapa del depósito, enroscar una pieza metálica que lleva unos 30 segundos hacerlo y conectar ahí la manguera. Posteriormente tendremos que presionar en el botón del surtidor y mantenerlo apretado hasta que se complete la recarga. En total, es el mismo tiempo que se tarda en repostar gasolina o gasóleo.

Lo que hace diferente a esta versión de GLP del Fiesta es que, usando este carburante, se puede conseguir una reducción en el coste de utilización del vehículo de casi un 50% con respecto al mismo vehículo usando gasolina. En cuanto a sus emisiones de CO2, un tema importante en estos tiempos, este modelo del Fiesta emite lo mismo que uno equivalente diésel y un 12% menos que el equivalente de gasolina.

En cuanto a sus precios, el Fiesta GLP se ofrece con dos acabados, Trend con un precio de 18.350 euros, pero que con todos los descuentos se queda en 14.050 euros, y por encima el ST line cuyo precio es de 20.450 euros (15.850 euros con descuentos). Con el sistema multi opción la marca del óvalo ofrece este interesante vehículo urbano con carrocería de cinco puertas por una cuota mensual de 125 euros, en 49 meses, con una entrada de 4.238 euros y una cuota final de 6.423 euros.