Nueva sede de Porsche en Madrid para dejar con la boca abierta a clientes... y a no clientes

Porsche ibérica inaugura su nueva sede en la zona norte de Madrid en la que comparte espacio con el Centro Porsche Madrid Norte. Tras un año y medio de obras para realizar una completa reforma de la anterior, en estos días se presenta un centro completamente renovado, en el que se ha potenciado por encima de todo la experiencia de los clientes y también de los no clientes. Un centro para apasionar con sus coches deportivos y con la manera de entender la vida de los aficionados de la marca alemana.

El espacio destinado a oficinas de esta sede se ha reducido con respecto al anterior edificio, mientras que el espacio de taller se mantiene prácticamente inalterado. Donde ha cambiado mucho es en lo que se refiere a la experiencia del cliente. Antes era un pequeño espacio dedicado a que los clientes pudieran esperar mientras se arreglaba su coche o mientras esperaban alguna gestión en la compra de su vehículo. Ahora, se trata de una zona pensada para vivir plenamente la experiencia en Porsche.

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Y no solo en lo relativo a hacer una operación de comprar o vender un vehículo o de reparar un coche sino que personas que no son clientes de la marca pueden acceder a estas instalaciones. Y con ello aprender algo de su tradición, conocer algunos de los modelos más representativos de la historia de Porsche, con modelos traídos del museo, de la sede oficial en Alemania, o con la zona específica para vehículos clásicos.

Las nuevas oficinas están estructuradas de una manera moderna con salas perfectamente equipadas con los últimos avances tecnológicos pero al mismo tiempo ofrecen distintos entornos donde poder compartir la experiencia Porsche. Estas salas tienen nombres de victorias históricas de la marca de Stuttgart, como Le Mans, Daytona, Nurburgring, Sebring o la de la mítica Targa Florio.

12.000 m2 de terreno

La sede de Porsche ibérica comenzó funcionar en el año 1989 en este emplazamiento de la Avenida de Burgos, tras dos años de obras desde la compra del primer terreno en 1987. A partir de ahí se vivió una primera época tras la inauguración por parte de Wolfgang Porsche ese mismo año. 10 años después, en 1999, se hizo una profunda renovación del edificio y se separaron más las dos marcas que entonces compartían sede, Porsche y la marca sueca Saab. Fue en 2016 cuando se aprobó el nuevo proyecto para renovar completamente la sede de Porsche ibérica. Fue un momento complicado tras el caso del “dieselgate” y se logró gracias al apoyo incondicional de Wolfgang Porsche.

Ahora, después de 18 meses de obras y de una reforma completa, la nueva sede de la legendaria marca alemana ya está al 100 × 100 operativa. Son 12.000 m² de terreno, con una edificación de 6000 m² de los que 2.100 corresponden a oficinas, y el resto se reparten entre taller, exposición de vehículos nuevos y de segunda mano y toda la zona dedicada a la experiencia del cliente.

Allí se puede encontrar una pista de Scalextric con el legendario trazado de las 24 horas de le Mans, donde Porsche ha logrado algunas de sus victorias más relevantes, pero también una historia de la marca a través de las maquetas en escala 1/43 de sus modelos, una interesante biblioteca en la que se pueden alquilar los libros y devolverlos unos días después o también usarlos allí mismo. Un espacio en el que no solo tiene cabida el propietario del vehículo, sino también su familia o sus hijos, que tienen una zona específica para ellos, tranquila y segura mientras el padre o la madre hacen la gestión necesaria.

También en estas instalaciones es donde se hace la entrega del coche, tanto nuevo como usado a algunos de los nuevos propietarios. Es una sala específicamente acondicionada para ello en la que los clientes reciben una explicación de entre una y una hora y media sobre cómo funciona cada elemento del coche. Además, los clientes tienen la que se denomina una segunda entrega, en la que tras un mes de usar el coche se vuelve al concesionario para preguntar al experto las dudas que han surgido tras usarlo durante ese tiempo.

Cursos personalizados

Por si todo esta preparación no es suficiente, para los clientes de los vehículos más deportivos o para los híbridos enchufables, se da un curso personalizado. En este caso el encargado de hacer estos cursos es Luis Villamil, un piloto muy experimentado y un gran experto en la conducción al límite y hacer una conducción más efectiva con un enchufable.

El objetivo con estas nuevas instalaciones es conseguir que más personas puedan disfrutar de la experiencia de Porsche, de conocer su historia y sus argumentos de la filosofía de sus productos basada en las altas prestaciones pero sin renunciar a las sensaciones al volante y la ecología. No es normal en otras marcas, por muy premium que sean, que en un concesionario se ofrezcan unas posibilidades así, pero Porsche Ibérica abre sus puertas no solo a sus clientes.

Pueden acceder a este centro personas que quieran contar una historia, organizar una reunión en alguna de sus salas, presentar un libro y muchas otras opciones. Y en la tienda, la Porsche Driver Selection, siempre se puede “picar” con algún producto personalizado de la marca, como cazadoras, polos, juegos de maletas, carteras, relojes, bañadores o maquetas… el catálogo de productos es tan amplio como diverso.

La nueva sede de Porsche Ibérica y el nuevo Centro Porsche Norte, son lo que podríamos denominar como unas oficinas multidisciplinares. El denominador común de todas estas instalaciones, y de las diferentes opciones de utilización que ofrecen, es la pasión por los deportivos que se respira en cada detalle y que está en el ADN de Porsche.